Israel intensifica sus ataques contra instalaciones nucleares clave de Irán
Los enfrentamientos entre Israel y la República Islámica de Irán han escalado dramáticamente y entran ya en su séptimo día consecutivo de intensos intercambios de fuego, situando a toda la región en un nivel crítico de tensión. En las últimas horas, el régimen iraní ha lanzado un bombardeo masivo contra territorio israelí, considerado por medios hebreos como el ataque de misiles más intenso hasta la fecha tanto por su magnitud como por la dispersión geográfica de sus impactos.
El jueves por la mañana, Irán disparó unos 30 misiles hacia el sur y centro de Israel, alcanzando zonas residenciales y objetivos civiles. Uno de los impactos más significativos se produjo en el Centro Médico Soroka, en la ciudad sureña de Beer Sheva, causando importantes daños materiales y dejando decenas de heridos, entre ellos al menos tres en estado grave, según datos del servicio de emergencias Magen David Adom (MDA).
The Iranian regime targeted Soroka Hospital in Beersheba with a ballistic missile—hitting a major medical center.
— Israel ישראל (@Israel) June 19, 2025
We will not stand by. We will continue doing what must be done to defend our people. pic.twitter.com/4ldeTQhATW
Las alarmas antiaéreas resonaron en todo el país y se confirmaron impactos directos también en ciudades como Tel Aviv, Ramat Gan y Holón, donde los equipos médicos desplegados atendieron a los afectados en múltiples puntos de impacto.
El ataque iraní generó preocupación internacional por la proximidad de los impactos a misiones diplomáticas. La Embajada de Lituania en Israel reportó que un misil cayó a apenas 200 metros de su sede en Ramat Gan. En el mismo edificio se encuentran también las embajadas de Austria y Kenia, cuyo Ministerio de Asuntos Exteriores recordó que “las misiones diplomáticas, protegidas por el derecho internacional, no deben sufrir daños y deben ser mantenidas al margen de cualquier conflicto”.
En respuesta a este ataque calificado como “crimen de guerra” por el ministro de Defensa israelí Israel Katz, Israel lanzó una ofensiva de gran escala contra infraestructura crítica iraní. Katz acusó directamente al líder supremo iraní, Ali Jamenei, de esconderse “en su búnker fortificado” mientras ordena disparos contra hospitales y zonas residenciales israelíes, y prometió que “pagará por sus crímenes”. Por su parte, el primer ministro Benjamín Netanyahu reiteró que Israel exigirá “el precio completo a los tiranos de Teherán”.
Ataque a instalaciones nucleares clave
Por su parte, la Fuerza Aérea Israelí (IAF) desplegó 40 aviones de combate, que durante la noche ejecutaron ataques simultáneos y coordinados contra docenas de objetivos militares en Teherán y otras regiones de Irán, empleando más de 100 municiones guiadas con precisión, según informó el comunicado oficial del Ejército de Defensa de Israel.
Dentro de estos bombardeos destaca el ataque contra el reactor nuclear de Arak, cuya construcción inició en 1997 pero que nunca fue finalizado debido a presiones de la comunidad internacional. Originalmente diseñado para producir plutonio apto para armas nucleares, en los últimos años el régimen iraní había acordado reconvertirlo para generar plutonio de baja calidad no apto para armamento.
No obstante, según Israel, Irán retrasó deliberadamente la conversión para mantener la capacidad de presión sobre Occidente. El ataque israelí tuvo como objetivo el componente clave para producir plutonio: el edificio de sello del núcleo del reactor. La destrucción de esta estructura busca imposibilitar la restauración del reactor con fines bélicos.
En paralelo, los aviones israelíes también bombardearon un centro de desarrollo de armas nucleares en Natanz, otro pilar estratégico del programa nuclear iraní. Según el comunicado israelí, en Natanz se almacenaban componentes y equipos especializados para acelerar el programa nuclear, así como proyectos avanzados de desarrollo de armamento atómico.
La ofensiva no se limitó a los sitios nucleares. La IAF también atacó fábricas de producción militar, plantas de materias primas para la fabricación de misiles balísticos, centros de ensamblaje de sistemas de defensa aérea y misiles iraníes. Además, se destruyeron baterías de defensa aérea, sistemas de radar de detección y centros de almacenamiento de misiles tierra-tierra, debilitando así la capacidad de respuesta del régimen iraní.
La posible intervención de Estados Unidos
Mientras la escalada entre Irán e Israel se intensifica, la comunidad internacional observa con creciente alarma la posibilidad de una confrontación aún mayor. Según Bloomberg, funcionarios estadounidenses ya preparan medidas contra Irán y contemplan la opción de lanzar ataques adicionales en los próximos días, posiblemente durante el fin de semana. Altos cargos de varias agencias federales estadounidenses habrían iniciado los preparativos ante esta posible intervención, lo que podría arrastrar a otros actores regionales e internacionales al conflicto.
