Este martes el presidente ruso Vladimir Putin ha culpado a Occidente por la tensión creada en Europa, afirmando que ésta había interpretado mal los resultados de la Guerra Fría, refiriéndose a la frontera del este de Ucrania, la que fue república soviética. El mandatario del Kremlin ha afirmado que la OTAN se ha expandido hacia el este desde la década de 1990. “Rusia se ha visto obligada a responder en todo momento. La situación ha ido empeorando y ahora estamos en una situación en la que nos vemos obligados a resolverla de alguna manera”, ha expresado Putin.
La crecida de tensión en el este de Ucrania ha aumentado por el temor de la Unión Europea y Estados Unidos a una posible invasión de Rusia en Ucrania, algo que se ha acrecentado con los grandes despliegues militares rusos en la frontera con Ucrania.

En una reunión celebrada este martes, Putin ha exigido que la OTAN niegue el ingreso a la organización a Ucrania y a otras naciones exsoviéticas y despliegue sus Ejércitos en otras zonas que no sean estas. Por su parte, el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, ha asegurado que Estados Unidos había desplegado más de 8.000 soldados en las fronteras rusas y que, junto con los demás aliados de la OTAN, realiza frecuentemente vuelos con aviones bombardeos cerca de Rusia. El ministro también afirmó que los intentos de la OTAN de involucrar al Ejército ucraniano en las actividades de la alianza representan una amenaza para la seguridad.
En esta intervención ante los cuadros del Ejército ruso y el Ministerio de Defensa, Putin afirmó que su país “responderá a cualquier escalada occidental”, señalando que Moscú sigue produciendo armas y contando con un gran ejército ante la escalada de amenazas por parte de la OTAN. “Son los responsables de la tensión que hay en Europa”, ha asegurado el presidente ruso.

De igual modo, en esta reunión un alto diplomático ruso dijo que ya se habían iniciado los contactos entre Moscú y la OTAN sobre la cuestión de garantías de seguridad que reclama Rusia, y que existiría una posibilidad de llegar a un acuerdo. Putin ha indicado su esperanza de tener unas “conversaciones constructivas” con Washington y Bruselas sobre las demandas rusas. Al mismo tiempo decía el presidente que no había intención de retroceder ante las escaladas de tensión en Ucrania.

Estas declaraciones se producen después de que la semana pasada la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, presentara, según sus declaraciones, varias propuestas a la OTAN para obtener un diálogo de seguridad, de las que no se tuvieron ninguna respuesta. Según las declaraciones de Zakharova a la agencia de noticias rusa TASS, el despliegue militar de la OTAN en la frontera con Rusia era simplemente “propaganda”.

Por su parte, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha afirmado este martes que la alianza está decidida a ponerse en contacto con Moscú para una reunión constructiva lo antes posible. “Es lamentable que la construcción militar rusa continúe en la frontera con Ucrania a pesar de las demandas de desescalada hechas por Moscú”, ha añadido Stoltenberg.