Rusia advirtió que el ingreso de Finlandia como miembro de pleno derecho de la OTAN no fortalecerá la seguridad del bloque aliado, al tiempo que aseguró que se equivocan “profundamente” los que piensan que Moscú no reaccionará a dicha adhesión.
“Todo será calibrado en consonancia con la coyuntura cambiante, su seguridad no se reforzará, la seguridad de la Alianza Atlántica en general no se fortalecerá”, aseguró el viceministro de Exteriores, Serguéi Riabkov, en declaraciones a la televisión pública rusa.
Riabkov expresó su incomprensión con la decisión de la vecina Finlandia, lo que duplicará la frontera entre Rusia y los países miembros de la OTAN, y acusó a sus vecinos de caer presa de la “rusofobia” y de ser incapaces de anteponer sus intereses a los del “Occidente colectivo”.
De hecho, adelantó que su seguridad -también aludió a Suecia, que aún no ha ingresado- “se debilitará” tras el ingreso, ya que Moscú se verá obligada a tomar medidas, que anunciará “en su debido momento”. “Cualquier amenaza en nuestra dirección será rechazada”, subrayó.
El diplomático subrayó que Rusia tiene “los recursos militares” y “la voluntad política” de defender su soberanía y rechazar cualquier amenaza contra su integridad territorial.
Al respecto, destacó que, al suspender la aplicación del último tratado de desarme con Estados Unidos, el START III o Nuevo START, Moscú ha recibido “posibilidades adicionales” para garantizar su propia seguridad.
Recordó que la doctrina de “disuasión nuclear” aún está vigente y aludió al reciente anuncio de un acuerdo para el despliegue en Bielorrusia de armas nucleares tácticas rusas.
“Nuestros adversarios deben aceptar con realismo lo que ocurre a su alrededor. No apuesten por una escalada, no nos provoquen, ya que la cosa puede acabar con tales giros...”, aseguró.
Para describir las relaciones con EEUU, utilizó la palabra “colapso” y aseguró que Rusia no permitirá que Occidente logre asestarle una “derrota estratégica”.
Previamente, el ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, aseguró que el incremento de la actividad aliada en las fronteras rusas, el suministro de armamento a Ucrania y el ingreso finlandés en la OTAN llevarán “a una escalada del conflicto”.
En mayo de 2022, el presidente ruso, Vladímir Putin, aseguró que el ingreso finlandés y sueco en la Alianza no representaría “una amenaza directa” para la seguridad de su país, a no ser que incluya el despliegue de armamento en sus territorios.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, felicitó a Finlandia por su ingreso en la OTAN, y se mostró confiado en que Ucrania avance en sus aspiraciones de unirse a la Alianza en la cumbre de Vilna.
“Mi sincera enhorabuena a Finlandia y al presidente Sauli Niinistö por su entrada en la OTAN en el 74 aniversario de su fundación”, escribió Zelenski en sus redes sociales.
El presidente ucraniano añadió que “la OTAN se ha convertido en la única garantía de seguridad efectiva en la región ante la agresión rusa”.
“Esperamos que la Cumbre de la OTAN de Vilna pondrá a Ucrania más cerca de su objetivo euroatlántico”, remachó Zelenski en referencia a la cumbre del próximo julio en la capital lituana.