El presidente argelino está utilizando las iniciativas energéticas y educativas para servir a su ansiada reelección

Tebboune se hace fuerte y mira a las elecciones de 2024

PHOTO/AFP - El presidente argelino Abdelmadjid Tebboune

Abdelmadjid Tebboune ha decidido dar un impulso a varios de los compromisos que adquirió con la población argelina durante la campaña de las elecciones de 2019. Y los observadores apuntan a que esta oleada de movimientos, junto con los beneficios obtenidos de la subida del precio del gas, hacen mirar a unos próximos comicios que el presidente argelino podría estar mirando ya de reojo. El apoyo recibido por Tebboune ha crecido en las últimas semanas y, aunque sin apuntar de momento al adelanto electoral, muchos creen que todo se está alineando en consonancia con el objetivo de la reelección.

La situación económica en Argelia se ha visto reforzada por la subida de los precios de la energía en los mercados internacionales, lo que se ve traducido en nuevas iniciativas como la relacionada con educación. Se espera contar con sesenta mil profesores en los próximos tres meses, según anunció el último gabinete argelino. Esto se enmarca en el objetivo de “terminar el proyecto de ley del profesorado antes de que finalice este año, incentivando a los docentes y profesores a cumplir con su deber profesional, elevar el nivel de formación, y mejorar su condición social y profesional, lejos de toda explotación”.

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La problemática del profesorado en Argelia estaba entre los 54 compromisos que hizo Tebboune en 2019 y, aunque tres años después, cumple con uno de los más demandados por trabajadores y sindicatos. Estos son precisamente los que han recibido de manera muy positiva la noticia del Gobierno argelino, emitiendo un comunicado expresando su satisfacción por llevar a cabo esta iniciativa. Muchos de estos profesores se encontraban en una situación complicada y esperaban contar con un contrato que, según expresa el propio Consejo de ministros, reconozca como se merece “esta noble profesión” y la figura del profesor como un “educador y no un empleado administrativo”.

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Tebboune, conocedor de la importancia que tiene el sector educativo en la sociedad argelina, ha optado por focalizar sus esfuerzos en este, aprovechando los buenos resultados económicos de este año. Y es que el objetivo se está cumpliendo, al menos de momento. Los mensajes en redes sociales, así como en la agencia oficial de noticias, se han sucedido en las últimas semanas elogiando “los logros alcanzados en los últimos años en diversos campos políticos, económicos, sociales y diplomáticos”. Incluso, muchas asociaciones y organizaciones han publicado en redes la voluntad de seguir contando con el presidente más allá del 2024, cuando los argelinos volverán a acudir a las urnas.

Todo lo que a educación se refiere cuenta con una importancia mayúscula. Gran parte de los movimientos de protesta y huelga en Argelia han venido provocados por diversas demandas dentro del sector, por lo que el Ejecutivo de Tebboune lo ve como uno de los pilares de la estabilidad del país. Los observadores consideran que la importancia de la que dota el presidente a este apartado forma parte del objetivo electoral, que es doble.

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Por un lado, la voluntad de seguir al frente de la jefatura del Estado es firme y se trabaja para allanar el camino en los dos años que quedan hasta las próximas elecciones, si es que no se opta por adelantarlas, situación que no queda descartada por los expertos. Y por el otro, Tebboubne quiere aumentar el dato de participación de los comicios de 2019, que se quedó por debajo del 40%, además del importante número de votos nulos – más de un millón –, que se percibió como una protesta de la población contra la candidatura de cinco excandidatos régimen (incluido el actual presidente).

Para lograr estos fines, el jefe de Estado argelino ha impulsado firmemente movimientos en el ámbito social. En los últimos meses, ha anunciado una subida de salarios, la reducción de los impuestos sobre la nómina, y la destinación de un subsidio por desempleo del que actualmente se ven beneficiados cerca de dos millones de argelinos. Tebboune se comprometió recientemente a “prestar atención a los distintos grupos sociales” para poder “asegurar una vida digna para todos”. Además, las próximas iniciativas pasan por “enriquecer el proyecto de ley para la protección y conservación de los bienes inmuebles del Estado, y revisar la ley de construcción”.

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