EE.UU. bombardea un hospital de MSF en Kunduz "porque se ocultaban" talibanes

Diariocrítico/Agencias
Las fuerzas aéreas de Estados Unidos bombardearon este sábado un hospital de Médicos Sin Fronteras (MSF) en la ciudad de Kunduz (norte), causando la muerte de 19 personas, porque, según justificó el Gobierno afgano, en él se ocultaba un grupo de talibanes, lo que provocó la muerte de al menos nueve miembros de la ONG y una decena de "terroristas".
Un día trágico para la ONG Médico Sin Fronteras. Al menos 19 personas han muerto y otras 37 han resultado heridas en el bombardeo de la aviación de Estados Unidos sobre su hospital en ciudad afgana de Kunduz (norte), según el último balance de la propia organización. Entre los muertos hay 9 trabajadores de Médicos Sin Fronteras y 7 pacientes, entre ellos tres niños. Entre los heridos hay 19 trabajadores de MSF, cinco de ellos en estado crítico, además de 18 pacientes y cuidadores.
A las 2:15 de la madrugada, las fuerzas militares norteamericanas llevaron a cabo un ataque aéreo "contra individuos que amenazaban a la fuerza". Posteriormente, aclaraban que "el ataque podría haber causado daños colaterales en una instalación médica cercana".
La OTAN reconoció que fuerzas estadounidenses podrían estar detrás del bombardeo, pero no se refirió a las específicas reclamaciones de MSF, que desde hace tiempo atiende a los heridos en ambos lados del conflicto.
Los talibanes aseguran que ningún combatiente estaba en el hospital
Los talibanes han condenado "enérgicamente" el bombardeo y acusa a Estados Unidos de "martirizar" al personal médico y a los pacientes del centro.
"Anoche, las fuerzas americanas bombardearon un hospital civil en la ciudad de Kunduz, en el que médicos, enfermeras y pacientes resultaron martirizados y heridos", afirmó el portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, en un comunicado.
Según el portavoz, "este crimen" se produjo cuando no había ningún insurgente en el interior del centro médico, "ya que la situación de conflicto no permite a ninguno de nuestros guerreros ser hospitalizados en él".
MSF ha tratado al menos a 300 personas en los últimos días
El hospital, el único que funcionaba en esa ciudad, resultó "muy dañado" en un bombardeo "prolongado" lanzado a las 02.10 hora local del sábado (21.40 GMT del viernes), según explicó la organización que en los últimos días ha tratado a más de 300 personas que han resultado heridas tras los combates entre los talibán y las fuerzas afganas. "Cuando se produjo el ataque aéreo esta mañana teníamos 105 pacientes y familiares en el hospital, y a más de 80 miembros del personal internacional y nacional de MSF", señala el texto.
La organización ha señalado que está trabajando para hacer todo lo posible por la seguridad de los pacientes y del personal médico.
Todavía se desconoce qué paso y qué falló para que las fuerzas de aviación de EEUU bombardeasen este centro sanitario pese a saber sus coordenadas y pese a que la organización alertase de que estaban siendo bombardeados. "El bombardeo continuó "durante 30 minutos después de que se informara a responsables militares de Kabul y Washington", insisten desde MSF
La organización humanitaria reveló además que muchos pacientes y personal de MSF se encuentran en "paradero desconocido", por lo que el número de víctimas podría aumentar a medida que se vaya aclarando lo sucedido en el "horrible" bombardeo.
"Fue terrible ver la pérdida de vidas de médicos de MSF (por el bombardeo), pero lamentablemente los terroristas decidieron ocultarse en el hospital", afirmó el portavoz del Ministerio del Interior afgano, Seddiq Seddiqi, en una rueda de prensa en Kabul.
El hospital, el único con servicios de traumatología y cirugía en toda la región y en el que trabajaban 80 miembros de MSF, atendía a un centenar de pacientes en el momento del bombardeo que dejó "parcialmente destruido" el recinto, según la ONG.
Las imágenes difundidas tras el ataque mostraban parte del austero centro sanitario de planta baja calcinado por las llamas, mientras los supervivientes se amontonaban en las zonas que no habían sido dañadas.
"El bombardeo continuó durante más de 30 minutos después de que las autoridades militares estadounidenses y afganas fueran informadas en Kabul y Washington", denunció MSF, que aclaró que todas las partes en conflicto conocían sus coordenadas exactas.
El portavoz del Ministerio del Interior insistió durante su comparecencia en que fue el hecho de que "entre 10 y 15 terroristas se ocultaran en el hospital", lo que les llevó a bombardear el recinto, en el que murieron "todos los terroristas".
También fallecieron, según MSF, nueve miembros de su personal y otras 37 personas resultaron heridas, y señalaron que el número de víctimas podía aumentar con el paso de las horas.
El portavoz de las tropas estadounidenses en Afganistán, el coronel Brian Tribus, evitó reconocer abiertamente la autoría del ataque, al señalar tan solo que un bombardeo de Estados Unidos en Kunduz podía "haber producido daño colateral a una instalación médica cercana".
Sin embargo el Gobierno afgano, a través de su Ministerio de Salud, confirmó horas después de manera rotunda que el hospital de MSF había quedado "destruido casi en su totalidad por el fuego generado tras el bombardeo de Estados Unidos".
El portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, condenó "el crimen", y negó por su parte que en el momento del ataque hubiera insurgentes en el centro sanitario, "ya que la situación de conflicto no permite (a sus) guerreros ser hospitalizados en él".
Mujahid acusó a la agencia de inteligencia afgana de haber proporcionado información falsa a Estados Unidos para bombardear el hospital en Kunduz, lo que provocó que "médicos, enfermeras y pacientes fueran martirizados y heridos", criticó.
El bombardeo se produjo en el marco de la toma de Kunduz el pasado lunes por los talibanes, la victoria más importante de los insurgentes desde que fueron sacados del poder en 2001, y la posterior reconquista el jueves de la ciudad por parte de las tropas afganas, con apoyo aéreo estadounidense.
Sin embargo, desde entonces los enfrentamientos continúan en la ciudad, donde aún los dos bandos se disputan los distintos sectores.
Según informó el Ministerio de Defensa afgano, esta noche al menos 90 talibanes murieron en choques con las tropas afganas y estadounidenses en Kunduz, y concretó que los enfrentamientos todavía prosiguen en el extrarradio de la ciudad.
Un portavoz de la Policía de Kunduz, Sayed Sarwar Hussaini, explicó a Efe que la operación militar contra los talibanes se complica cuando estos se ocultan en áreas residenciales.
"Esta mañana, tras un breve tiroteo, detuvimos en una casa a seis talibanes. (...) Todos eran menores de edad", denunció Hussaini.
La OTAN, que como parte de la misión Apoyo Decidido cuenta con alrededor de 4.000 militares en tareas de asistencia y capacitación, también ha participado en la campaña en apoyo sobre el terreno a las tropas afganas.
Estados Unidos mantiene una misión de combate en el país con una dotación de 9.800 soldados que tiene previsto permanecer en Afganistán hasta final del año.