Mohamed Benchaaboun, director del Fondo de Inversiones Mohamed VI y exministro de Economía, Finanza y Reformas Administrativas de Marruecos, ha publicado un artículo en el medio EUobserver en el que destaca la inversión y la transición verde desarrollada en Marruecos y el importante papel del país en la economía del norte africano y su relación con los países europeos.
Según Benchaaboun, las inversiones dentro del país han estado a la orden del día, y es reflejo de ello su situación económica actual. Con informes del Foro Mundial Económico que le posicionan como el primer país norteafricano en materia de competencia y el tercero dentro de la región MENA respecto a la facilidad de realizar negocios, manifiestan la estabilidad y el desarrollo del país.
En especial, el desarrollo verde. Su posición geográfica la hace ideal para la construcción de infraestructuras eólicas y solares por toda su costa, solo con el desierto del Sáhara se podría suplir el 10% de la energía total en Europa. El Gobierno marroquí es consciente de ello y está impulsando su inversión en este sector. Prueba de ello la reciente inversión de 7.000 millones en una fábrica de amoniaco impulsado por hidrógeno verde, producido por la compañía estatal OCP.
De acuerdo con Benchaaboun, tanto su posición geográfica (cercana a las rutas marítimas del Mediterráneo y Atlántico) como su estabilidad económica hacen de Marruecos un lugar especialmente atractivo para la inversión europea. En marzo de este año, la Unión Europea ha lanzado en cooperación con Marruecos un programa de 624 millones de euros dedicados a la inversión de los ambiciosos planes de Marruecos para la transición de energías verdes, así como la protección social, administración pública y las políticas climáticas.
El Fondo de inversiones Mohamed VI, anunciado por el rey Mohamed VI en julio de 2020, es uno de los pilares clave del plan de recuperación y crecimiento verde. Se espera que genere una dotación total de inversión de 120.000 a 150.000 millones de dirhams (unos 12.000 a 15.000 millones de euros), lo que podría impulsar el PIB de Marruecos en 1,8 puntos porcentuales por año durante tres años. El fondo también es visto como una oportunidad para fortalecer la posición de Marruecos como un centro regional para la inversión y el comercio, especialmente con Europa. Marruecos ya es uno de los principales socios comerciales de la UE en África y ha firmado varios acuerdos de comercio, inversión y cooperación con el bloque.

Benchaaboun afirma también que, “el Fondo de Inversión Mohamed VI acelerará el ritmo de la inversión, promoverá la acción del sector privado e impulsará el crecimiento económico y la creación de empleo. Pero quizás lo más importante es que la piedra angular de la misión del fondo será introducir en Marruecos la economía del mañana. Verde, digital y robusto, el Fondo garantizará un crecimiento inclusivo y sostenible para los ciudadanos de Marruecos y sus socios en Europa y África”.