El reino alauí se ha posicionado como uno de los líderes mundiales en el impulso de la energía verde que ha potenciado los acuerdos con Europa e Israel

Marruecos y la histórica inversión en energías renovables

photo_camera PHOTO/ARCHIVO - Producción de hidrógeno verde en Marruecos

La dependencia del gas natural y la vulnerabilidad energética es un problema que ha hecho saltar todas las alarmas en varios países europeos y africanos, incluido Marruecos. La alta importación de la energía consumida y el cierre del gasoducto Magreb Europa en octubre de 2021, por el que se le cortaba el grifo del gas, han impulsado la apuesta del reino alauí por las energías renovables con vistas no sólo de cubrir el consumo propio de Marruecos, sino también de convertirse a medio y largo plazo en un socio preferente para el continente europeo. 

A las ventajas naturales y geográficas que ya cuenta el país, se le suma una inversión de 130 millones de dírhams, el equivalente a 13.000 millones de dólares destinados a las energías verdes. Una de las mayores inversiones en la historia de Marruecos. 

Esta política proactiva ya recoge sus primeros frutos. Marruecos se ha posicionado como uno de los líderes mundiales en este sector según el último informe del Índice de Atractivo de los Países para las Energías Renovables (RECAI). Un reconocimiento logrado gracias a “sus ambiciosos planes para la energía solar, eólica y, más recientemente, hidrógeno verde, en busca de una participación de energía verde del 52% para 2030”, como asegura Mounia Boucetta en su informe del Centro de Política para el Nuevo Sur (PCNS).

En cifras concretas, este año Marruecos prevé alcanzar el 42% procedente de materias limpias previsto para 2020, un retraso producido por la pandemia, y un 64% de producción verde para 2030. Un propósito que reiteró la ministra de Transición Energética y Desarrollo Sostenible, Leila Benali, durante una comparecencia en la Cámara de Representantes. Según la ministra son 61 los proyectos en curso para alcanzar ese objetivo.

 gaseducto-marruecos-argelia-españa

Uno de los más fuertes el de la Oficina Jerifiana de Fosfatos de Marruecos (OCP, por sus siglas en francés). El monopolio – que controla el 95% de la producción de químicos de Marruecos - es el que invertirá esos 13.000 millones de dólares en aumentar la producción de fertilizantes con un consumo de la maquinaria industrial exclusivo de energía renovables - eólica y solar -, y alcanzar así la neutralidad de carbono antes de 2040. Para ello, OCP tiene previsto apostar por la desalinización de agua marítima y producir un millón de toneladas de amoníaco verde. Y al igual que disminuye la emisión de carbono, aumenta el volumen de negocio por la subida exponencial del precio de los fertilizantes como consecuencia del conflicto ruso-ucraniano.  

Precisamente esta demanda europea, tanto de fertilizantes como de energía verde, es en la que incidió el Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, en su visita a Rabat la semana pasada. “Consideramos que Marruecos es nuestro socio más dinámico y más cercano”, decía Borrell en alusión al acuerdo entre Rabat y Bruselas por el que se pretende potenciar la cooperación en la lucha contra el cambio climático y la inversión en energías renovables y en la industria del hidrógeno verde.

atalayar-josep-borrell-nasser-bourita-marruecos

Dicho y hecho. El grupo belga John Cockerill Hydrogen ha anunciado su intención de crear un proyecto conjunto para la fabricación de electrolizadores alcalinos destinados al sector del hidrógeno verde con una empresa marroquí, según ha informado el portal Le360. “Nos sentimos honrados de poder contribuir a la transición energética de Marruecos”, declaraba Raphael Tilot, director ejecutivo de la empresa belga. 

Marruecos no sólo ha alcanzado acuerdos con la Unión Europea recientemente, sino también con otros países como Israel, con quien ha acordado la exploración y producción de gas natural. Todo ello dentro de una consolidación de inversiones realizadas, según apunta Mounia Boucetta, por las Atlas Instrucciones Reales, construyendo una oferta atractiva y promoviendo el desarrollo de cadenas de valor competitivas. 

Desde la PCNS señalaban también el clima de negocios del reino, uno de los más atractivos de la región y los proyectos en materia de investigación y desarrollo a través de la Universidad Politécnica Mohammed VI. Una construcción a la que ahora le llega una cifra histórica para la inversión en energías renovables. 

Más en Economía y Empresas