Los terroristas en el continente africano están dispuestos a cooperar con el crimen organizado y los grupos separatistas, según apuntó el ministro de Asuntos Exteriores de Marruecos

La Coalición contra el Daesh concentra sus esfuerzos en África 

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Daesh emergió con fuerza en 2014 y significó un reto mayúsculo no solo para Occidente, sino también para todas las potencias afincadas en Oriente Medio y el Norte de África o con intereses en ambas regiones. El grupo terrorista islámico recibió en 2019 una contundente derrota en Siria, sin embargo, su amenaza sigue presente, especialmente en África.

En este contexto, la Coalición Global contra el Daesh ratificó el pasado 28 de junio su determinación de derrotar definitivamente a la organización yihadista, tanto en Oriente Medio como en el continente africano, según el comunicado emitido por la organización tras la celebración de la cumbre multilateral en Roma.

Los miembros de la Coalición mantuvieron una reunión de carácter presencial en la capital transalpina tras más de dos años de impasse. El ministro italiano de Asuntos Exteriores, Luigi di Maio, convocó a los integrantes junto al secretario del Departamento de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken.

AP/CAROL KASTER  -   Tony Blinken, Secretario de Estado de Estados Unidos

En este sentido, se ha alertado sobre que los grupos terroristas en el continente africano se han mostrado dispuestos a cooperar con las redes de crimen organizado y grupos separatistas, como indicó Nasser Bourita, ministro de Asuntos Exteriores de Marruecos. “Esta tendencia debe ser vigilada cuidadosamente porque penetra profundamente en las poblaciones locales y aprovecha las fronteras porosas para moverse libremente y reclutar combatientes”, manifestó Bourita con motivo de la cumbre romana. 

Las partes trataron de redefinir los objetivos de la organización en el nuevo escenario y debatieron sobre la repatriación de los excombatientes del Daesh retenidos en el norte de Siria. En este punto, Blinken expresó la necesidad de acometer el plan y presionó a sus socios para ejecutarlo cuanto antes. 

El secretario del Departamento de Estado describió como “insostenible” la situación de los 10.000 combatientes del Daesh detenidos en campos de refugiados por las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS). “Estados Unidos sigue instando a los países –incluidos los socios de la coalición– a repatriar, rehabilitar y, en su caso, procesar a sus ciudadanos”, declaró Blinken en una clara alusión a Francia y Reino Unido.

AFP/ DELIL SOULEIMAN  -   Un miembro de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), quita una bandera del grupo del Estado Islámico en la ciudad de Tabqa, a unos 55 kilómetros (35 millas) al oeste de la ciudad de Raqa. Al-Qaeda y el grupo del Estado Islámico (IS) son también adversarios ideológicos irreconciliables y, sobre el terreno, enemigos fratricidas

Dos de los principales aliados de Washington se han mostrado reacios a traer de vuelta a sus ciudadanos. Ni París ni Londres poseen un marco jurídico definido para procesarlos de manera fiable, y temen que los tribunales exijan la puesta en libertad de los encausados y que ello suponga una amenaza a la seguridad nacional. 

Mientras, los excombatientes del grupo yihadista, en su mayoría procedentes del viejo continente, se encuentran encerrados en campos ubicados al norte de Siria, en muchos casos acompañados por sus familias. Entre ellas hay un elevado número de niños. 

“Se están radicalizando, y a menos que encontremos una forma de repatriarlos, reintegrarlos y desradicalizarlos, estamos regalando combatientes en un plazo de cinco a siete años”, advirtió el general estadounidense Kenneth McKenzie al seminario American Enterprise Institute. “Será un problema militar dentro de unos años si no solucionamos ahora los aspectos no militares”.

REUTERS/ALI HASHISHO  -   Campo de desplazados de al-Hol en la gobernación de Hasaka, Siria

En otro orden de cosas, la organización reconoció a través de una nota de prensa que “la reanudación de las actividades de Daesh y su capacidad para reconstruir sus redes y capacidades para atacar a las fuerzas de seguridad y civiles en áreas donde la Coalición no está activa, requiere una fuerte vigilancia y una acción coordinada”.

Por este motivo, la Coalición decidió robustecer su cooperación y aprobará en las próximas semanas la asignación de una serie de recursos a los Estados integrantes que se ven amenazados de forma directa por el grupo terrorista. En todo caso, de la reunión no se revelaron medidas concretas.

La Coalición Global contra el Daesh se conformó en septiembre de 2014 con un único objetivo: derrotar al denominado Estado Islámico. Los 83 miembros que integran la organización mostraron su compromiso de combatir al grupo terrorista en todos los frentes, desmantelar sus redes de influencia y ejercer como contrapeso a sus ambiciones a nivel global.

PHOTO - El ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita, y el ministro italiano de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional, Luigi Di Maio

La hoja de ruta de la Coalición también pasa por impedir el tránsito de combatientes extranjeros, fortalecer las instituciones de las áreas liberadas del Daesh y, en última instancia, diluir la propaganda emitida por los yihadistas. Asimismo, una de las pretensiones es la de cortar todas las vías de financiación del grupo terrorista.

Argelia, Mali, Sudán, Siria e Irán son los únicos países ubicados en las zonas de influencia del terrorismo yihadista que no integran la organización. Por su parte, República Centroafricana, República Democrática del Congo, Mauritania y Yemen pasaron a formar parte del grupo durante la última cumbre.

Está previsto que la Coalición se reúna en junio de 2022, aunque también se celebrará una cumbre de irectores Políticos de Grupos Pequeños en Bruselas en el otoño de este mismo año, según recogió el comunicado conjunto.

AFP/ DELIL SOULEIMAN  -   Un miembro de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), quita una bandera del grupo del Estado Islámico en la ciudad de Tabqa, a unos 55 kilómetros (35 millas) al oeste de la ciudad de Raqa. Al-Qaeda y el grupo del Estado Islámico (IS) son también adversarios ideológicos irreconciliables y, sobre el terreno, enemigos fratricidas
África: alerta roja

En una sesión paralela, los aliados pusieron el foco en la amenaza a la seguridad existente en África. Los ministros de Asuntos Exteriores presentes “observaron con grave preocupación el crecimiento de las redes y afiliados de Daesh en el África subsahariana”. La amenaza directa incide sobre la región del Sahel y en África Oriental, sobre todo en Mozambique.

El ministro de Exteriores marroquí, Nasser Bourita, precisó que los atentados terroristas en África han pasado de 381 a 7.108 en tan solo cinco años. El aumento de víctimas en el continente es palmario: de 1.394 fallecidos se ha pasado a un total de 12.519. 

“Una cuarta parte de la violencia terrorista en el mundo tiene lugar en África, con grupos terroristas activos en la mitad de los países africanos", sentenció Bourita. En este sentido, su homólogo británico Dominic Raab alertó de que Daesh “se estaba reposicionando en África tras sus derrotas militares en Irak y Siria”.

Durante la apertura, el titular de Exteriores marroquí exigió una vigilancia cuidadosa de esta tendencia, “porque penetra profundamente en las poblaciones locales y aprovecha las fronteras porosas para moverse libremente y reclutar combatientes”. 

AFP/FADEL SENNA  -   Miembros de las brigadas centrales de intervención marroquíes (BCI)

El autodenominado Califato islámico perdió casi todo su territorio en Siria e Irak en 2019. Sin embargo, la presión de la organización terrorista se concentra hoy en el Sahel y en Mozambique. 

Francia, activa en la primera de las regiones, está reduciendo su campaña militar, mientras que EEUU no tiene visos de emprender acciones militares directas. “Debemos intensificar la acción emprendida por la coalición, no cambiando nuestro enfoque, sino aumentando las regiones en las que operamos, no sólo en Oriente Medio, sino en África”, propuso Di Maio. 

La Coalición “puede y debe colaborar más estrechamente con los países africanos, y creo que los participantes aquí están de acuerdo en ello”, agregó el ministro de Exteriores alemán, Heiko Maas. En cualquier caso, los esfuerzos de la Coalición Global contra el Daesh van enfocados en reducir al mínimo las vías de financiación del Daesh y respaldar de forma directa a los Estados africanos.

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