Los ataques con misiles entre las FDI y la milicia islámica dan paso a los disturbios en varios puntos de Israel entre árabes y judíos

El enfrentamiento entre Israel y Hamás se intensifica y provoca al menos 50 muertos

photo_camera AFP/ANAS BABA - Lanzamiento de cohetes desde la ciudad de Gaza, controlada por el movimiento palestino Hamás, en respuesta a un ataque aéreo israelí contra un edificio de 12 plantas de la ciudad, hacia la ciudad costera de Tel Aviv, el 11 de mayo de 2021

Al menos 50 personas han perdido la vida este martes durante los enfrentamientos registrados entre el Ejército israelí y la milicia islámica de Hamás en la Franja de Gaza y en varios puntos de Israel. El cruce de ofensivas aéreas, sumado las agresiones sobre el terreno entre árabes y judíos, ha supuesto un nuevo estallido de violencia en la región tan solo comparable a la registrada el pasado 2014, en la denominada Intifada silenciosa. Por el momento, la escalada bélica va in crescendo pese a los intentos de mediación de la comunidad internacional.

Las columnas de humo gris y los escombros han inundado la ciudad de Gaza tras las más de 40 ofensivas aéreas lanzadas por el Ejército israelí durante la noche del martes. El ataque ha provocado la muerte de 48 palestinos, entre ellos 14 niños, y hasta 296 personas habrían resultado heridas, según las últimas cifras publicadas por Ministerio de Salud de Gaza. A primera hora del miércoles, Hamás respondía con el lanzamiento de un misil guiado contra un vehículo israelí que patrullaba la zona fronteriza, que se ha saldado con un fallecido y dos heridos. La Corte Penal Internacional (CPI) vigila la situación por si pudieran cometerse crímenes de guerra.

Lanzamiento de cohetes hacia Israel desde la ciudad de Gaza, controlada por el movimiento palestino Hamás, el 11 de mayo de 2021

Desde el comienzo de las hostilidades, las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) han lanzado más de 1.050 misiles en el marco de la ‘Operación Guardián de los Muros’, tanto en el centro como en la frontera sur del país, ante los continuos ataques del Movimiento de Resistencia Islámico de Hamás. El Ejército israelí afirma haber acabado con al menos 20 milicianos y haber neutralizado durante la última operación al jefe de Inteligencia Militar de la organización, Hasán Kaogi, y a su número dos, Uail Isa, quien estaba al frente del Departamento de Contraespionaje e Inteligencia Militar. 

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha prometido “aumentar la intensidad y la cantidad” de los bombardeos. Mientras que el ministro de Defensa, Benny Gantz, ha declarado que las operaciones militares continuarán en la Franja de Gaza durante el tiempo que sea necesario. “Solo cuando logremos un silencio total podremos hablar de calma”, expresó el ministro. “No escucharemos sermones morales contra nuestro deber de proteger a los ciudadanos de Israel”.

Ataque aéreo israelí sobre el complejo Hanadi en la ciudad de Gaza

Por su parte, las facciones de Hamas y Yihad Islámica han confirmado el lanzamiento de más de 600 proyectiles contra Israel en las últimas 24 horas, 130 de ellos lanzados sobre Tel Aviv durante la noche del martes en el marco de la ‘Operación Espada de Jerusalén’, la más grande en la historia del conflicto, según la milicia islámica. Las autoridades israelíes han tenido que clausurar el aeropuerto Ben Gurión y desviar los vuelos a Chipre mientras la Cúpula de Hierro, el sistema antimisiles, interceptaba el 98% de los cohetes.

La ofensiva aérea habría provocado el fallecimiento de al menos una persona en Tel Aviv, por lo que el número de civiles israelíes muertos asciende a 6, y otras 8 personas habrían resultado heridas. Hasta el momento, entre las víctimas israelíes se encuentran dos mujeres residentes en la localidad sureña de Ascalón, un hombre y su hija de 16 años de Lod, y una mujer de Rishon LeZion, también al sur de Tel Aviv.

Las brigadas de Ezzeldin Al-Qassam, brazo armado de Hamás, amenazaron con atacar Jerusalén si las Fuerzas de Seguridad israelíes no se batían en retirada de la mezquita de Al-Aqsa –tercer lugar más sagrado para el islam– y de otras áreas de Jerusalén Este. La organización también exigió la liberación de todos los detenidos en las recientes protestas en el barrio de Sheij Jarrah, donde una multitud de colonos judíos trataron de desalojar a familias palestinas, motivo, a la postre, del estallido de los enfrentamientos.

El 12 de mayo de 2021 se produce un incendio en la refinería de Ashkelon, alcanzada por cohetes de Hamás el día anterior en la ciudad del sur de Israel, cerca de la Franja de Gaza
Lod, la escenificación del conflicto

El Movimiento de Resistencia Islámico hizo una llamada a la acción a los palestinos repartidos por territorio israelí para que “golpeen al enemigo donde sea posible”. La petición surtió efecto y provocó múltiples enfrentamientos en varios puntos del país. El de mayor gravedad se produjo en Lod, ciudad situada a tan solo 15 kilómetros de Tel Aviv en la que el Gobierno ha tenido que decretar el estado de emergencia tras una batería de enfrentamientos. 

“La guerra civil ha estallado en Lod”, declaró en la jornada de ayer el alcalde Yair Revivo. La urbe experimenta el caos tras una jornada marcada por el enfrentamiento frontal entre árabes y judíos en las calles. El alcalde ha señalado públicamente a “cientos de matones árabes” de lanzar “bombas de gasolina contra hogares judíos”. El propio Revivo ha llegado a comparar la violencia y los daños en la ciudad con los pogromos nazis de la Noche de los Cristales. En las imágenes se han visto sinagogas incendiadas, aunque también concentraciones y lanzamientos de piedras por parte de grupos de extrema derecha judíos a vehículos conducidos por árabes. 

Un agente de seguridad israelí inspecciona los daños en una casa de Yehud, cerca de Tel Aviv, el 12 de mayo de 2021, tras el lanzamiento de cohetes hacia Israel desde la Franja de Gaza, controlada por el grupo militante palestino Hamás

El portavoz del Ejército israelí, Hidai Zilberman, sostiene que “el aguante de Hamás se está acabando, pero es una organización con resistencia. [El conflicto] no terminará en 24 horas”. El Gobierno israelí, en funciones tras el dilatado bloqueo político, aprobó el pasado lunes una campaña de bombardeos contra la Franja de Gaza, y descartó por el momento la posibilidad de una incursión terrestre, que sería definitiva para el estallido de un conflicto bélico.

Los bombardeos aéreos israelíes en la Franja de Gaza han afectado a las viviendas de miembros de alto rango del grupo militante Hamás, según informó el Ejército el miércoles, y la sede de la policía del territorio también fue objeto de ataques

Netanyahu ha desestimado las propuestas planteadas por Naciones Unidas y Egipto para un alto el fuego con Hamás, y ha convocado una reunión de urgencia junto al ministro de Defensa, Benny Gantz, el comisionado de Policía, Kobi Shabtai, entre otros integrantes, con el objetivo de abordar y reducir los disturbios en Lod e iniciar la desescalada en el resto del país. El conflicto, surgido en Jerusalén con los primeros conatos de violencia en la mezquita Al-Aqsa, ha acabado por extenderse a todo Israel.