La diplomática ha visitado a las autoridades alemanas y británicas tras el posible estancamiento de las conversaciones del Cairo

La representante de Naciones Unidas en Libia, Stephanie Williams, busca apoyos en Europa

La representante especial adjunta del secretario general de la ONU para Asuntos Políticos en Libia, Stephanie Turco Williams, ha iniciado una gira por algunos países de Europa con el fin de recabar apoyos para restaurar la normalidad política en Libia y celebrar unas próximas elecciones democráticas en el país dividido entre dos autoridades y con un Gobierno interino que no cede el poder al nuevamente nombre primer ministro Fathi Bashagha. 

A lo largo de esta semana, Williams se ha reunido en Alemania con el ministro de Estado alemán, Tobias Lindner y con el secretario de Estado Andreas Michaelis. Williams lo hizo saber a través de un hilo en su cuenta de la red social Twitter.  Algunos días más tardes, y anunciado por los mimos canales, Williams se mostró en compañía de Ahmad de Wimbledon, ministro delegado británico para el Norte de África, Naciones Unidas y la Commonwealth. 

De acuerdo con los mensajes de Williams, las reuniones tuvieron lugar para informar a las autoridades alemanas y británicas sobre la situación actual en Libia además de darles las últimas noticias en lo referente a la cumbre mantenida en El Cairo entre la Cámara de los Representantes y el Consejo de Estado Superior. 

el cairo

En sus mensajes, Williams quiso recalcar la importancia de poner a Libia sobre las vías de un proceso democrático que estabilice políticamente el país, una tarea en la que Naciones Unidas fracasa desde el comienzo de su misión especial en Libia. De acuerdo con analistas como Kelly Alkhouli, consultora política y directora de relaciones internacionales del centro de Asuntos Políticos y Exteriores, las negociaciones entre las facciones de la Tripolitana y la Cirenaica no están yendo tan bien como Naciones Unidas querría, algo en lo que coinciden los analistas consultados por el medio especializado con sede en Londres, Al-Arab. 

Tras la cumbre del Cairo, Naciones Unidas pretende organizar otra ronda de encuentros entre la Cámara de los Representantes de Tobruk y el Consejo de Estado Superior de Trípoli después del fin del mes de Ramadán y la celebración del Eid Al-Fitr, la fiesta del fin del ayuno que tendrá lugar entre el 2 y el 3 de mayo. 
 

Se cree que las partes presentes en la cumbre del Cairo no lograron alcanzar ningún acuerdo para encaminar a las instituciones hacia un proceso constituyente que ponag al país en el camino de las elecciones democráticas, de acuerdo con el medio Al-Arab, y que las injerencias extranjeras que apoyan a los dos bandos impiden hacer avanzar las negociaciones. Desde un punto de vista europeo, por ejemplo, no existe siquiera un consenso en cuanto a Libia. Francia, aunque no públicamente, se ha posicionado distintas veces como un apoyo para le mariscal de campo Haftar, que apoyo el cambio de Gobierno en favor de Fathi Bashagha. Mientras que Italia, cierra filas detrás de Naciones Unidas en su respaldo a Dbeibé. 

La ONU persiste en su intención de celebrar unas elecciones democráticas, pese a que ello no sea la panacea para Libia, de acuerdo con un artículo firmado por Kelly Alkhouli para Middle East monitor. Según la consultora especializada en Libia, el país sufre de una desintegración demasiado avanzada como para que unas elecciones pueden restaurar un Estado en el país al completo.

Fathi Bashagha

Para Alkhouili, la elección de Bashagha como primer ministro es sin embargo una muy buena noticia. En un país que se ve dividido por les relaciones de fuerza entre las distintas facciones tribales y políticas, la consultora valora muy positivamente el perfil de Bashagha para la tarea de liderar un Gobierno en Libia. “Bashagha es una figura poderosa de Misrata (oeste de Libia), con estrechos vínculos con otras tribus occidentales y también fue ministro del Interior del Gobierno con sede en Trípoli. Las potencias extranjeras no parecen hostiles a él, y podría ser un compromiso aceptable para ambas partes”, comenta Alkhouili. Para la analista, la ONU debería de concentrar sus esfuerzos en limitar las influencias de las milicias y distintos grupos que parecen ir por libre a lo ancho del país. 

La fuerza de estas distintas milicias y grupo ha sido capaz, en este último mes, de paralizar gran parte de los ingresos por petróleo de Libia. Tribus de la zona conocida como Oil Crescent paralizaron las operaciones petrolíferas en la región, lo que desde entonces hace perder a país más de 60 millones de dólares en ingresos, de acuerdo con el ministro de Energía de Trípoli, Mohamed Aoun. 

Más en Política
joshua-harris
Una delegación militar argelina en Washington para reforzar la cooperación entre los dos países y una delegación americana de alto rango en Argel para poner fin a un conflicto que el régimen argelino ha agravado desde hace tres años sin dar la menor razón. ¿Beneficiará este acercamiento argelino-estadounidense a los pueblos de la región?

Conflicto argelino-americano: intervención diplomática de Washington