Henar Hernández
Pie de foto: El presidente ruso Vladimir Putin y el líder de Corea del Norte Kim Jong Un durante su reunión en Vladivostok, Rusia, el 25 de abril de 2019. AP/ALEXANDER ZEMLIANICHENKO
El pasado 17 de julio, la Guardia Fronteriza de Corea del Norte interceptó al pesquero ruso Xianghelin-8, propiedad de la compañía North-Eastern Fishing Company LLC, en las aguas del mar de Japón. Desde entonces, el barco se encuentra retenido en el puerto de Wonsan, en la costa oriental norcoreana. La información ha sido difundida este martes por el medio ruso RBC, que también revela que el incidente se produjo en la noche del 16 al 17 de julio, cuando el barco se dirigía hacia una zona de pesca. Según el director de la empresa, Victor Sedler, citado por la publicación rusa, la embarcación fue detenida a 53 millas de la cosa, fuera de las aguas territoriales, ya que, según la Convención de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, estas abarcan las 12 millas náuticas desde la costa, pero sí dentro de la Zona Económica Exclusiva (que se prologan hasta las 200 millas).
En este sentido, la Guardia norcoreana alegó que el pesquero había perpetrado un “cruce ilegal de las fronteras” sin previo aviso. De acuerdo con unas declaraciones del copropietario de la empresa, quien contactó con la Embajada, “por alguna razón, los norcoreanos pensaron que 50 millas es su zona de escolta militar, algo que no está reconocido por ninguna institución internacional”.
Sedler ha explicado que los guardias fronterizos llevan a cabo tareas de revisión de los barcos e incluso pueden ordenar el desembarco de la tripulación, pero que esta “es la primera vez que sucede este tipo de incidente, en el que se envía la embarcación al puerto”.
El pesquero cuenta con una tripulación de 17 personas, entre ellos 15 nacionales rusos y dos surcoreanos. El capitán y el asistente habrían sido trasladados a un hotel, siendo separados del resto de los marineros, que se encontrarían todavía detenidos por la Guardia fronteriza. Por ello, según informa RIA Novotski, citando a un funcionario de la Oficina Rusa de Asuntos Exteriores en Vladivostok, para la Embajada de Rusia en Corea del Norte es prioritario “resolver la situación cuando antes”. En este sentido, determinados funcionarios rusos ya se habrían conseguido reunirse con la tripulación, incluidos el capitán y su asistente.
Desde RT apuntan a que la embarcación podría ser liberada en breve, siempre y cuando termine la inspección que la Guardia fronteriza norcoreana está llevando a cabo. Posteriormente, el pesquero, junto con los marineros, será enviado de nuevo a Rusia.
Cabe recordar que las relaciones entre Rusia y Corea del Norte habían tomado un nuevo impulso tras la cumbre celebrada en abril en Vladivostok, en la que el presidente ruso, Vladimir Putin, y su homólogo norcoreano, Kim Jong-un, acordaron colaborar para resolver el problema nuclear, así como el reforzamiento de las relaciones bilaterales.
Rusia y Corea del Sur se enzarzan, con Japón de por medio
Sin embargo, los problemas de Rusia en la península coreana no solo se circunscriben a Corea del Norte. Este martes, los aviones de combate surcoreanos realizaron disparos de advertencia – lanzaron 10 bengalas y 80 disparos de ametralladoras – como respuesta a la violación de su espacio aéreo (Zona de Identificación de la Defensa Aérea de Corea, KADIZ) por parte de tres aviones militares rusos, dos bombarderos Tu-95 y un avión A-50 de alerta temprana y control aéreo, además de dos bombarderos chinos H6, según se denunció desde Seúl. La reacción de Corea del Sur ha ido en proporción, de acuerdo con las autoridades, puesto que se había tratado de la primera vez que un avión militar extranjero había violado su espacio aéreo desde el final de la guerra de Corea de (1950-1953).
Pie de foto: Aviones de combate F-35A de EE.UU., centro y centro izquierda, vuelan con aviones de combate de la Fuerza Aérea de Corea del Sur sobre la Base Aérea de Cheongju en Cheongju, Corea del Sur, el viernes 29 de marzo de 2019. Corea del Sur recibió el viernes los dos primeros de los 40 aviones de combate F-35A que ha acordado comprar a Lockheed Martin para 2021. South Korea Defense Acquisition Program Administration via AP
En concreto, según las fuentes surcoreanas, los aviones rusos habían sobrevolado un grupo de islotes gestionados por Corea del Sur – de 230.000 metros cuadrados de extensión – aproximadamente a mitad de camino entre el país de Moon Jae-in y Japón, los cuales han sido fuente de disputas territoriales entre ellos (para Seúl, los islotes se denominan Dokto, mientras que para Tokio son Takeshima).
Pie de foto: Mapa que muestra Takeshima/Dokto reclamado por Japón y Corea del Sur. AFP/AFP/JOHN SAEKI/ADRIAN LEUNG
Rusia, por su parte, ya ha desmentido estas acusaciones y asegura que sus aeronaves habían realizado “un vuelo de rutina sobre aguas neutrales” y que, en ningún caso, se introdujeron en el espacio aéreo surcoreano. Japón, tercero en disputa, también se ha manifestado. El secretario jefe del gabinete nipón, Yoshihide Suga, ha criticado la actuación de Rusia, por un lado, ya que le acusa de “violar el espacio aéreo japonés”; y a Corea del Sur, por otro, porque considera que los disparos de advertencia eran “absolutamente inaceptables”.