Había muchas dudas sobre los motivos para posponer la Reunión de Alto Nivel (RAN) que tradicionalmente mantienen Marruecos y España, y que iba a producirse el próximo 17 de diciembre en Rabat. La coincidencia de esta decisión con el anuncio de Estados Unidos de reconocer la soberanía marroquí sobre el Sáhara, invitaba a pensar que la noticia hubiese afectado a la hora de tomar la decisión. No obstante, el ministro de Asuntos Exteriores marroquí ha transmitido que ambos países estaban de acuerdo, y que los motivos están "exclusivamente vinculados a la COVID-19".
Naser Burita no ha planteado las fechas alternativas, y ha indicado que éstas "serán propuestas a España para su valoración". El ministro ha añadido que la importancia de la reunión bilateral y los temas a tratar, impedían el desarrollo de la misma en un formato telemático, como sí se ha hecho, por ejemplo, en el ámbito de la Unión Europea. También ha señalado que dado el desarrollo de la pandemia, las medidas de seguridad como el distanciamiento, dificultarían las sesiones de trabajo que estaban planteadas en el programa.
Asimismo, el embajador estadounidense en Rabat, David Fischer, ha celebrado hoy un acto en el que ha obsequiado al rey Mohamed VI con un mapa de Marruecos en el que se incluye la totalidad del Sáhara Occidental. Según ha declarado, es una forma de "hacer tangible" el anuncio que llevo a cabo Donald Trump hace apenas dos días.
El anuncio de Trump incluiría la apertura de un consulado en la ciudad saharaui de Dajla, dónde también se establecerán otros países africanos. Según el New York Times, el reconocimiento de la soberanía marroquí traería de la mano una inversión de hasta 3.000 millones de dólares en proyectos que van desde los energéticos a los turísticos.
Donald Trump aprovecha sus últimas semanas al frente de la Casa Blanca, pero el hecho de estar en funciones plantea serias dudas de la validez de este reconocimiento, que en cualquier caso queda en manos de Joe Biden mantener o revocar.