Los ministros de Exteriores de España y Marruecos mantuvieron una reunión durante la tarde del martes 21 tras la cual anunciaron una normalización total del “tránsito de mercancías y personas por vías terrestres”. La apertura está fechada para el mes de enero de 2023, así como un encuentro de alto nivel previsto a finales de noviembre.
Si bien ni Bourita ni Albares mencionaron abiertamente a Ceuta y Melilla en su alocución a los medios de comunicación, el hecho de que hablen de fronteras terrestres indica que se refieren al paso por las dos ciudades autónomas españolas enclavadas en el norte de África. Dos ciudades en las que el establecimiento de aduanas es un punto de la declaración conjunta de abril de 2022 que ambos Gobiernos se comprometieron a cumplir progresivamente.
La reapertura de la Aduana Comercial entre España y Marruecos en Melilla y Ceuta, tal y como ha anunciado hoy el Ministro Albares, se producirá de manera ordenada y gradual en enero.
— Sabrina Moh /❤️ (@sabrinamohh) September 21, 2022
Una vez más, el Gobierno del Presidente @sanchezcastejon, cumple ?#GobernamosContigo ??
Desde Melilla, la delegada del Gobierno en la ciudad autónoma, Sabrina Moh, alabó las declaraciones hechas por los dos ministros y confirmó a través de una publicación en la red social Twitter que Albares y Bourita se refirieron a Ceuta y Melilla.
Antes de su cierre en 2018, por decisión unilateral de Marruecos, la aduana del puesto de Beni Enzar en Melilla permitía percibir a la administración una recaudación de 40 millones de euros anuales en base a impuestos sobre la circulación de productos. Son los números que Enrique Alcoba, presidente de la patronal melillense, dio a Atalayar el pasado mes de junio. Alcoba estimó también el comercio irregular prepandemia (sin aduana) en otros 60 millones de euros.
La patronal melillense expresó ya en diversas ocasiones su deseo por ver prosperar una aduana comercial con Marruecos. Desde Ceuta, el secretario general de la Cámara de Comercio de Ceuta, Joaquin Molinedo, expresó unos deseos similares a los de sus homólogos melillenses. Al contrario de Melilla, Ceuta no ha tenido nunca un puesto de aduana fronteriza con Marruecos.

Fuentes citadas por el diario local El Faro de Ceuta aseguran que el Gobierno de España ya ha emprendido gestiones para que el puesto fronterizo del Tarajal sea dotado de las infraestructuras mínimas necesarias para el funcionamiento de una aduana comercial con Marruecos.
Los empresarios de las dos ciudades autónomas ansían la puesta en marcha de esta aduana para que el tránsito de mercancías sea totalmente regulado por autoridades de España y Marruecos. Junto con una ampliación del régimen fiscal especial para Ceuta y Melilla dentro de un marco de la Unión Europea, la prioridad de este sector es acabar con la situación de ahogo que sufren las dos ciudades españolas del norte de África.

De acuerdo con las declaraciones de los ministros, la apertura de los puestos de aduana será “progresivos”, de la misma forma que lo fue la reanudación del tránsito de personas por las vías terrestres que unen a España y Marruecos.
Albares resaltó durante su alocución a los medios de comunicación que la nueva etapa en las relaciones entre España y Marruecos, consagrada en marzo de 2022 con la preferencia mostrada por el Gobierno de Sánchez hacia la solución marroquí en el conflicto del Sáhara, ha propiciado un aumento del 30% de las exportaciones españolas hacia Marruecos. Las ventas ascenderían a los 6.000 millones de dólares. Junto al comercio, Albares se felicita también de lograr una mejor cooperación en materia de control de la inmigración irregular.