Níger, Mali y Burkina Faso descartan volver a la CEDEAO y consolidan la Alianza de los Estados del Sahel

Esta asociación busca impulsar los lazos con naciones como Rusia a la vez que afianza su independencia de Francia y Occidente
El jefe de Estado de Mali, Assimi Goita; el general de Níger, Abdourahamane Tiani; y el capitán de Burkina Faso, Ibrahim Traore, en la primera cumbre de la Alianza de Estados del Sahel (AES) en Niamey, Níger, el 6 de julio de 2024 - REUTERS/MAHAMADOU HAMIDOU
El jefe de Estado de Mali, Assimi Goita; el general de Níger, Abdourahamane Tiani; y el capitán de Burkina Faso, Ibrahim Traore, en la primera cumbre de la Alianza de Estados del Sahel (AES) en Niamey, Níger, el 6 de julio de 2024 - REUTERS/MAHAMADOU HAMIDOU

Aprovechando la reciente celebración de la cumbre CEDEAO, los líderes militares de Níger, Mali y Burkina Faso descartaron el regreso de sus naciones a este bloque regional de África Occidental, un rechazo que puede poner en peligro los esfuerzos para enfrentar golpes de Estado y frenar la violencia que se extiende por la región.

Los líderes de las juntas militares de estos tres países anunciaron esta postura durante su primera cumbre en Niamey, la capital de Níger, después de su retirada de la CEDEAO en enero. Esta reunión tripartita se ha celebrado un día antes de la cumbre del bloque africano en Nigeria. 

Las autoridades golpistas de estos tres países también acusaron al bloque de incumplir su mandato, comprometiéndose a consolidar su propia unión, la Alianza de los Estados del Sahel, organización creada el año pasado tras el distanciamiento con sus vecinos regionales. 

El jefe del Gobierno militar de Níger, el general Abdourahamane Tiani; el coronel maliense Assimi Goita; y el capitán burkinés Ibrahim Traore muestran los documentos de la Confederación de Estados del Sahel (AES) que firmaron durante su primera cumbre en Niamey el 6 de julio de 2024 - PHOTO/AFP
El jefe del Gobierno militar de Níger, el general Abdourahamane Tiani; el coronel maliense Assimi Goita; y el capitán burkinés Ibrahim Traore muestran los documentos de la Confederación de Estados del Sahel (AES) que firmaron durante su primera cumbre en Niamey el 6 de julio de 2024 - PHOTO/AFP

Para el líder militar de Níger, el general Abdourahmane Tchiani, la CEDEAO, establecida hace casi 50 años, se ha convertido en “una amenaza” para los países del Sahel. Por este motivo, Tchiani insistió en seguir avanzado en la Alianza de los Estados del Sahel, "en lugar de una CEDEAO cuyas directivas e instrucciones son dictadas por potencias ajenas a África”, 

Esta reunión entre los tres países sahelianos muestra la profunda división dentro de la CEDEAO, bloque que, a pesar de esforzarse por mantener unido, ve como crecen las tensiones internas. No obstante, tal y como apunta a AP Karim Manuel, analista para Oriente Medio y África de The Economist Intelligence Unit, es probable que continúen los intentos de mediación, en particular liderados por el nuevo gobierno de Senegal, aunque “no darán frutos en un futuro próximo”. 

Para el presidente senegalés, Bassirou Diomaye Faye, la reconciliación es posible. “Debemos hacer todo lo posible para evitar la retirada de estos tres países hermanos de la CEDEAO”, destacó Faye, quien también apuntó que eran necesarias reformas con el fin de “adaptar la CEDEAO a las realidades de nuestros tiempos”. 

La Alianza de los Estados del Sahel, formada en septiembre del año pasado, ha sido presentada y promocionada por Níger, Mali y Burkina Faso como una plataforma para buscar nuevas asociaciones con países como Rusia y consolidar su independencia de la antigua potencia colonial, Francia, país al que acusan de influir en la CEDEAO. También, en este sentido, estos tres países han expulsado a las tropas francesas, facilitando la expansión militar de Rusia en la región. 

Los líderes militares que gobiernan Burkina Faso, Mali y Níger formaron una nueva confederación el 6 de julio de 2024 al firmar un tratado durante su primera cumbre en Niamey, tras cortar los lazos con la CEDEAO - PHOTO/AFP
Los líderes militares que gobiernan Burkina Faso, Mali y Níger formaron una nueva confederación el 6 de julio de 2024 al firmar un tratado durante su primera cumbre en Niamey, tras cortar los lazos con la CEDEAO - PHOTO/AFP

En la reciente reunión de Niamey, el líder de Burkina Faso, el capitán Ibrahim Traoré, reafirmó estas cuestiones y acusó a los países extranjeros de explotar a África. “Los occidentales consideran que les pertenecemos y que nuestra riqueza también les pertenece”, subrayó Traoré, en declaraciones recogidas por AP. “Piensan que son ellos quienes deben seguir diciéndonos lo que es bueno para nuestros estados”, añadió. 

El capital Traoré aseguró que esta etapa “ha terminado para siempre”, ya que los recursos de los países africanos serán para sus pueblos. “El ataque contra uno de nosotros será un ataque contra todos los demás miembros”, afirmó por su parte el líder de Mali, el coronel Assimi Goïta.

La alianza del Sahel, tras elegir a Goïta como líder, firmó un pacto en el que los tres países se comprometen a crear un parlamento regional y un banco similares a los que gestiona la CEDEAO. Asimismo, también prometieron poner en común sus recursos militares para luchar contra la inseguridad en sus países.

Por otro lado, la CEDEAO durante su cumbre ha advertido sobre la “desintegración” que enfrenta la región tras la formación de la alianza del Sahel. De acuerdo con el jefe de la Comisión, Omar Alieu Touray, tras la retirada de Mali, Níger y Burkina Faso estos países corren el riesgo de “aislarse políticamente”, perder millones de dólares en financiación y obstaculizar la libertad de movimiento.

El presidente de Nigeria y presidente de la CEDEAO, Bola Ahmed Tinubu, durante el discurso de apertura de la cumbre de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) en Abuja, Nigeria, el 7 de julio de 2024 - REUTERS/MARVELLOUS DUROWIYE
El presidente de Nigeria y presidente de la CEDEAO, Bola Ahmed Tinubu, durante el discurso de apertura de la cumbre de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) en Abuja, Nigeria, el 7 de julio de 2024 - REUTERS/MARVELLOUS DUROWIYE

Igualmente, con estas brechas también se incrementará la inseguridad y se obstruirá el trabajo de la fuerza regional propuesta desde hace tiempo. La CEDEAO ha estado analizando como puede financiar una fuerza regional con el fin de combatir el terrorismo y restablecer el orden constitucional en Níger, el último de los tres países en sufrir un golpe de Estado. 

No obstante, varios analistas señalan que no solo estas tres naciones se sienten alejadas de la CEDEAO. En los últimos años, el bloque ha perdido el apoyo de los ciudadanos, quienes, en muchos casos, han celebrado y apoyado la reciente oleada de golpes de Estado en la región, debido a la falta de oportunidades y la alta inseguridad en sus países. 

“En gran medida, se considera que la CEDEAO representa únicamente los intereses de los líderes de sus miembros y no los de los pueblos", explica a AP Oge Onubogu, director del Programa de África del centro de estudios Wilson Center.