El presidente argelino tiene previsto visitar antes Francia y Rusia, dos socios con los que recalibra a marchas forzadas sus relaciones

Raisi extiende a Tebboune una invitación para visitar Irán: “Es difícil imaginar que se produzca pronto”

photo_camera IMAGEN/PRESIDENCIA DE ARGELIA - El presidente argelino, Abdelmadjid Tebboune, en una visita oficial a Turquía

El Gobierno argelino mantiene el firme propósito de reforzar su política exterior en los próximos meses. Pretende sacar músculo y marcar perfil propio en un contexto más que favorable a cuenta de las necesidades energéticas de Europa, el destino principal de sus exportaciones de gas, que, de acuerdo con el director del Ministerio de Energía y Minas, Miloud Medjelled, batieron el récord en 2022 con un volumen de 56.000 millones de metros cúbicos. 

Después de una etapa turbulenta a nivel interno, marcada por el estallido del Hirak, las protestas multitudinarias contra el expresidente Abdelaziz Buteflika que sacudieron los cimientos del régimen y forzaron su renuncia, e inmediatamente después por la crisis sanitaria inducida por la COVID-19, el país magrebí quiere recuperar el tiempo perdido, aprovechando eso sí el viento a favor. 

En la residencia presidencial de El Mouradia no faltan propuestas. La agenda de Abdelmadjid Tebboune está desbordada para los primeros meses de 2023. Los líderes de Rusia y Francia, Vladímir Putin y Emmanuel Macron, respectivamente, esperan con inquietud la visita del mandatario argelino, cuya influencia estratégica ha ganado enteros en este impasse propiciado por la invasión rusa de Ucrania. No son los únicos. El presidente iraní Ebrahim Raisi se ha sumado al grupo.

atalayar-presidente-iran-ebrahim-raisi-teheran-acuerdo-nuclear

En una reciente conversación telefónica entre el ministro iraní de Asuntos Exteriores, Hossein Amirabdollahian, y su homólogo argelino, Ramtane Lamamra, el diplomático persa trasladó la invitación de Raisi a Tebboune para realizar una visita de Estado al país. “Estamos listos para celebrar una reunión del Comité Económico Conjunto en un futuro próximo”, transmitió Amirabdollahian al veterano jefe de la diplomacia argelina. 

Tebboune nunca ha pisado Irán como jefe de Estado, pero es un gran conocedor del país. En 2002, después de ocupar la cartera de Hábitat y Urbanismo —y mucho antes de ser primer ministro—, representó a la Presidencia de Argelia en una serie de misiones diplomáticas en el extranjero por decisión expresa de Buteflika, quien le colocó bajo su ala. En ese breve periodo, Tebboune estuvo destinado en Irán. 

El último presidente argelino que visitó el país fue, precisamente, el difunto Buteflika. Lo hizo 2008 en una visita de Estado de dos días en la que se reunió con el entonces presidente Mahmud Ahmadineyad. El que fuera alcalde de Teherán, principal exponente del ala dura del régimen, volvió a encontrarse con Buteflika dos años después durante una escala técnica en el aeropuerto internacional Houari Boumedienne de Argel.

Abdelmadjid Tebboune

“Las relaciones entre Argelia e Irán podrían describirse como cordiales en el plano diplomático, pero bastante limitadas en los planos estratégico, económico y político”, explica en conversación con Atalayar el analista argelino Zine Ghebouli. “En el pasado hubo intentos de reforzar estos vínculos, pero se quedaron en tímidos esfuerzos sin resultados concretos”. 

El analista asegura que “Argelia desea mantener su estrategia de no alineamiento y, por tanto, solo aceptaría una visita de este tipo si no conlleva significados estratégicos que puedan complicar la dinámica con los principales actores internacionales y regionales”. Es precisamente esta línea roja la que le marcan Francia y Estados Unidos, actores con los que Argel ha emprendido un nuevo acercamiento. Washington, concretamente, viene ejerciendo presión sobre la plana mayor del régimen argelino a través de su embajador y el coordinador de Oriente Medio y el Norte de África de la Casa Blanca, Brett McGurk, a quien Tebboune recibió hace unas semanas. 

“Es difícil imaginar que esta visita se produzca pronto por varias consideraciones, entre ellas el tenso entorno geopolítico —apunta Ghebouli a este medio—. Imagino que esta visita se produciría después del viaje de Moscú, pero eso dependerá en gran medida de la relación de Argelia con otros socios”.

atalayar-ministro-exteriores-iran-hussein-amir-abollahian-teheran-alto-representante-ue-union-europea-josep-borrell

El envío de Teherán a Moscú de drones Shahed, de fabricación persa, e instructores de la Guardia Revolucionaria Islámica, ejecutado en plena invasión de Ucrania, sumado a la brutal represión desplegada por el régimen de los ayatolás contra la sociedad civil en las revueltas internas tras la muerte bajo custodia policial de la joven kurda Mahsa Amini, tensa la situación. En este contexto, los países occidentales han decidido reforzar las sanciones contra Irán. 

Pero, en el caso de que se produzca finalmente la visita, no sería la primera vez que Raisi y Tebboune se ven las caras. Ambos mantuvieron un breve encuentro en el marco del Foro de Países Exportadores de Gas, celebrado en Doha el pasado mes de febrero. Los líderes iraní y argelino aprovecharon la ocasión para discutir los asuntos globales y regionales, pero apenas avanzaron en su agenda bilateral. 

El mandatario argelino ha sido percibido como un partidario del acercamiento con Irán, pero no ha tomado partido de forma explícita en la rivalidad regional que mantienen Teherán y Riad, enconada desde la ruptura de sus relaciones bilaterales en 2016. De hecho, en una reciente entrevista con los medios oficialistas argelinos, Tebboune describió las relaciones entre Argelia y Arabia Saudí como “muy buenas”, aunque reconoció que existen ciertas fricciones.

Más en Política