Estas son las tres palancas de la política de agua en Marruecos

La problemática del agua constituye hoy en día para Marruecos uno de los grandes retos de 2024. Se trata de un sector vital para la economía del país que se debe tener en cuenta en su política y su visión futura. Razón por la cual, el país norteafricano opta por una nueva política basada en tres palancas esenciales: las aguas convencionales, las aguas no convencionales y la gestión de este recurso vital.
- Primera palanca: las aguas convencionales
- Recogida de aguas de lluvia, presas grandes y pequeñas
- Segunda palanca: las aguas no convencionales
- Tercera palanca: gestión del agua
Primera palanca: las aguas convencionales
En el ámbito de las aguas convencionales, Marruecos apuesta, en primer lugar, por sus grandes presas apoyadas por las presas medianas y pequeñas instaladas en el territorio nacional del país. En segundo lugar, están los proyectos de trasvase de agua entre las cuencas más importantes, a través de la captación de aguas pluviales y el desbloqueo de presas.
Los proyectos de transferencia de agua pasarán por etapas y zonas. La transferencia del excedente de agua de la cuenca de Sebou a la cuenca del Bouregreg, una vez finalizada, logra conectar dos de los ríos más importantes del país para el abastecimiento de las ciudades comprendidas entre Rabat y Casablanca.
Las autopistas abastecerán de agua las presas de Sidi Mohamed Ben Abdellah y de El Massira. A ello se suman también otros proyectos como la puesta en marcha de la interconexión de la presa Oued El Makhazine en Kenitra y la presa Dar Khrofa en Larache.
Otro paso muy importante, en este sentido, es eliminar la contaminación de las presas y actualizar la batimetría de las presas para disponer de datos fiables sobre la sedimentación de las presas. Un fenómeno que Marruecos enfrenta a través de la reforestación.
Recogida de aguas de lluvia, presas grandes y pequeñas
El país magrebí lanzó un programa de recogida de aguas pluviales, en 13 provincias en 2023 para pasar a 9 provincias en 2024.
Marruecos puso en funcionamiento 4 grandes presas: Tiddas en la provincia de Jemisset, Todgha en Tinghir, Agdz en Zagora y Fask en Guelmim. Mientras que se están construyendo 18 grandes presas de los cuales tres se pondrán en servicio en 2024 (Mdez en Sefrou, Rhiss en Alhucemas y Koudiat Borna en Sidi Kacem).
En este mismo año de 2024, se han lanzado proyectos de construcción de varias presas Bukhmiss en Jemisset, Ain Ksob en Benslimane, M'salit en Tata, Lemdad en Tarudant, Sidi Yaacoub en Tiznit.
En cuanto a las pequeñas presas, el Ministerio de Equipamiento y Agua realizó siete (Tizert, Mjouj, Id Boufous, Ain Smen Tazga, El Hank, Dhar y Laasma), cuando son cinco las que están en proceso de finalización (Hrihira, Afsou, Este Mediterráneo, Taghoucht y Tikitana), además del lanzamiento de la presa Foum Zguid en Tata.
Segunda palanca: las aguas no convencionales
De las fuentes de aguas no convencionales, las plantas de desalinización de agua de mar representan una solución a la escasez del agua que se agrega a las técnicas de reutilización de las aguas residuales depuradas y de la recarga artificial de las aguas subterráneas.
En 2021, Marruecos disponía de 12 desaladoras de agua del mar con una capacidad de producción de 145 Mm3/año que pasaron a ser 15 en 2023 con una capacidad de producción de 192 Mm3/año.
En su visión futura de 2030, Marruecos pretende tener 16 desaladoras más, cinco de ellas en expansión, con una capacidad de producción total de 1.460 millones de m3/año.
Cabe recordar que las plantas existentes son las de Alhucemas, Agadir (primera fase), AKhfennir, Tarfaya, Sidi ELghazi, Boujdour, el Mhiriz, El Aaiún, Jorf Lasfar y Safi en curso de extensión.
En lo que atañe a las plantas que están en vía de construcción, son las de Sidi Ifni y Dajla. Más aún, hay otras plantas programadas en la región oriental, en Tánger Guelmim, Agadir (segunda fase), Tiznit, Esauira y Casablanca (primera y segunda fase).
En cuanto a la reutilización de aguas residuales depuradas, Marruecos acelera los proyectos de su realización para alcanzar 100 Mm3/año para el riego de zonas verdes y campos de golf a finales de aquí 2027. Son 28 campos de golf que reutilizan 19 Mm3/año de aguas residuales tratadas.
En paralelo, hay tres proyectos de reutilización de 8 Mm3/año de aguas residuales tratadas para uso industrial. Cabe señalar que, a finales de 2022, el volumen reutilizado de aguas depuradas fue de 32 Mm3/año.
Para la recarga artificial de acuíferos, Marruecos programa proyectos importantes en este sentido:
- 2023: puesta en marcha de proyectos de recarga artificial para las capas freáticas en Er-Rachidía y Zagora.
- 2024: lanzamiento programado de proyecto de recarga artificial de las capas freáticas en Midelt, Zagora y Er-Rachidía
- 2025-2028: programación de la realización de 22 proyectos de los umbrales de recarga artificial de las capas freáticas de las provincias de Zagora, Er-Rachidía, Tinghir y Figuig.

Tercera palanca: gestión del agua
La gestión del agua en Marruecos tiene como objetivos:
- Mejorar el rendimiento de la red de abastecimiento de agua potable.
- Mejorar el rendimiento de canales y ductos de servicio completo.
- Conseguir un programa de eficiencia hidráulica para todos los usos del agua.
- Mejorar los rendimientos de las redes del 77% actual al 78% en 2027 y 80% en 2030.
El Ministerio de Agua firmó cuatro contratos de aguas: Al Haouz-Mejjat, Meski-Boudnib, Berrechid y Feija, a la espera de los 14 Contratos de capas en curso de elaboración o actualización (El Mnasra, Drader-Soueir, Fez Meknes, Charf El Akab, Dajla, Tadla, Guelmim, Bahira, Chtouka, Sus, Trifa, Rhiss-Nekor, Fouel Tadoue y Tadoue).
Es una serie de contratos de gestión de recursos hídricos que Marruecos mantendrá presente en el futuro planeando llevar a cabo otros 15 contratos de capas: Bou Sebaa, Tantán, Ain Béni, Methar, Figuig, Maamora, Medio Atlas, Bou Agba, Chaouia costera, Bir Guendouz, Er-Rachidía, Guelmim, Tinjdad, Jorf y Tafilalet.
La política de agua en Marruecos pretende hacer que cada gota de los valiosos recursos hídricos de Marruecos esté en el centro de los esfuerzos del país por adoptar enfoques eficientes en la gestión de esta materia vital.
La sensibilización y comunicación sobre la economía del agua y el estado de los recursos hídricos y sobre la economía del agua es, asimismo, uno de los pilares de la política de la gestión del agua en el país.