Los talibán amagan con la formación de Gobierno
Afganistán continúa en una situación convulsa y caótica. Con la salida de Ghani del país y bajo el poder talibán, el país afgano se encuentra a expensas de un nuevo nombramiento oficial del Gobierno talibán. Una nueva designación que de producirse sumaría al país en un nuevo periodo de oscurantismo. Existe información contradictoria. Por una parte, fuentes de EFE, que provienen directamente de portavoces talibán como es el caso de Bilal Kamili afirman que las informaciones sobre que “el Emirato Islámico (como se autodenominan los talibanes) anunciará hoy la formación del nuevo Gobierno, es propaganda incorrecta y rumores”.
Por otro lado, Reuters y otros medios árabes afirman que los talibán habrían hecho público la formación de un nuevo régimen que estará bajo las órdenes del líder Hebatullah Akhundzada Mullah. Asimismo, afirman que estarán ocupando puestos importantes de poder los talibán Muhammad Yaqoub, hijo del difunto fundador del movimiento, Mullah Omar junto con Sher Muhammad Abbas Stanikzai.
Aun así, los insurgentes han asegurado que el anuncio del nuevo Ejecutivo tendrá que esperar ya que todavía no existe una fecha oficial en el que se produzca el nombramiento.
Sin embargo, de formarse este régimen, diferentes países occidentales se han posicionado en contra de reconocerlos de manera oficial. En esta línea, Reino Unido ha sido uno de los primeros países en posicionarse en este aspecto después de que el canciller británico, Dominic Raab expresará que “su país no reconocerá al gobierno que los talibán pretenden anunciar en la capital”.
Asimismo, Raab expresó durante una conferencia de prensa conjunta con su homólogo paquistaní en Islamabad que durante las operaciones de evacuación del aeropuerto “no reconocimos a los talibanes, pero necesitamos mantener algún contacto para sacar a los colaboradores y brindar ayuda”, afirmaba.
Por otra parte, la Unión Europea ha afirmado que mantendrá relaciones con los talibán siempre que su “comportamiento” respete los derechos humanos, especialmente, aquellos relacionados con las mujeres, la libertad de prensa o el acceso que permita la llegada de ayuda humanitaria.
Tras la salida de las tropas internacionales, los talibán han aprovechado la situación para “celebrar” la retirada occidental y por ende, la victoria de los insurgentes. Los fundamentalistas, que prometieron llegar a un acuerdo pacífico con el antiguo gobierno afgano, han desfilado en Kandahar, el lugar del nacimiento espiritual del movimiento, en vehículos militares, entre los que se encuentran los Humvees tomados del arsenal estadounidense. En los desfiles, los talibán han hecho uso de diferentes banderas blancas con inscripciones negras que señalaban que Afganistán formaba parte ya de un Emirato Islámico.
Del mismo modo, la televisión nacional de Afganistán, ha retransmitido desfiles de islamistas con chalecos suicidas, coches bombas, bombas de carril y explosivos. Como ha señalado el medio TheNational.Cat, estas imágenes han ido acompañadas de una voz en off que ha ido describiendo lo que se puede ver: “Ahora, pueden presenciar al escuadrón de los mártires con la bandera islámica”, indicaban. “Y ahora, estas pesadas armas tan altas, diferentes tipologías de minas, barriles amarillos y coches bomba están pasando por delante de las autoridades (…) todo se ha utilizado para luchar contra los invasores y sus títeres con el objetivo de defender la independencia de nuestro querido país”.
Desde la ONU, el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, ha mostrado su preocupación por la actual situación que se cierne sobre Afganistán. Ha advertido de una “inminente catástrofe humanitaria” así como de “un colapso total de los servicios básicos”. De esta forma, Guterres ha demandado la aprobación de fondos que sirvan para proveer de asistencia humanitaria al país y a su población.
Por otro lado, el Gobierno de Qatar afirmó que se encuentra negociando con los líderes talibán para reabrir el aeropuerto de Kabul en “la mayor brevedad posible”, aunque hasta el momento no se ha conseguido ningún acuerdo para que el aeropuerto esté en condiciones de operar con normalidad, de acuerdo con el ministro de Relaciones Exteriores qatarí, Mohamed bin Abdelrahman al Thani.
En este sentido, Doha envío un Boeing C-17A a Kabul junto con un equipo técnico que busca ejecutar los equipos para poner en funcionamiento el aeropuerto. El ministro qatarí ha afirmado que “confiamos en poder hacer que el aeropuerto opere cuanto antes, con suerte en los próximos días recibiremos buenas noticias” ha señalado que “no hay informaciones sobre la fecha en la que podría estar operativo, pero trabajamos duro”, agregó, señalando que “todavía no hay ningún acuerdo”.
