Trump conversará con Zelenski y dirigentes europeos antes de verse con Putin

Donald Trump, presidente de Estados Unidos, está preparando el terreno para su cumbre con Vladimir Putin, presidente de Rusia, el próximo viernes en Alaska de cara a abordar el anhelado alto el fuego en Ucrania.
Dentro de estos preparativos, a la espera de confirmar si Zelenski estará o no presencialmente en la cumbre con el dirigente ruso, aunque muchos aspectos apuntan a que no por las reticencias rusas en principio, se incluyen los contactos que mantendrá de manera telefónica Donald Trump con el propio presidente ucraniano y dirigentes como Úrsula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, António Costa, presidente del Consejo Europeo, y Mark Rutte, secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
De esta forma, los líderes europeos buscan no quedarse al margen de los aspectos que se abordarán o negociarán de cara a intentar llegar a un alto el fuego en Ucrania y quieren conversar, aunque no sea de manera presencial, con el presidente de Estados Unidos, que se verá en persona en Alaska con el presidente ruso.
Desde el Kremlin se confirmó que habrá encuentro personal entre Trump y Putin después de la visita que realizó a Moscú el enviado especial del presidente de Estados Unidos para política internacional, Steve Witkoff, quien tuvo un acuerdo amistoso con el máximo dirigente ruso, pero sin llegar a un acuerdo para poder detener las hostilidades en territorio ucraniano por el inmovilismo en cuanto a sus postulados del propio Vladimir Putin.

Desde la Unión Europea (UE), que ha estado apoyando a Ucrania en todos los aspectos desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022, al considerarla una agresión ilegal y un atentado contra la soberanía ucraniana, compartiendo postura con el expresidente estadounidense Joe Biden, se exige una salida a la guerra en Ucrania que proteja a Europa y al propio país ucraniano. De esta forma, todos los países europeos, excepto la Hungría de Viktor Orban, más próxima a Putin, han pedido una paz “justa” para Kiev con garantías de seguridad. Esto pasa por respetar la soberanía ucraniana, amenazada totalmente por los intentos de anexión por parte de Rusia de territorios que son considerados rusos por una especie de reclamación histórica defendida por los postulados de Vladimir Putin, que, en este caso, son los enclaves de Jersón, Donetsk, Zaporiyia, Lugansk y la península de Crimea, que ya fue anexionada en 2014.
La UE no tendrá presencia de peso en la próxima cumbre entre Donald Trump y Vladimir Putin mantendrán en Alaska, pero tratará de influir en las negociaciones sobre un hipotético plan de paz en Ucrania. Así, 26 de los 27 socios comunitarios han suscrito un comunicado para que el presidente de Estados Unidos tenga en cuenta su punto de vista, agradeciendo “los esfuerzos” del presidente estadounidense para poner fin a la guerra, pero también pidiendo que la salida al conflicto proteja “los intereses vitales de seguridad y Europa”. “El pueblo ucraniano debe tener la libertad de decidir su futuro. El camino hacia la paz en Ucrania no puede decidirse sin Ucrania”, han remarcado los firmantes del texto, apoyado por todos los Estados miembro menos la Hungría de Orban, afín al régimen ruso de Vladimir Putin.
La UE podrá intentar ejercer esta influencia en el encuentro virtual que mantendrá Donald Trump con los líderes europeos y de la OTAN y con el presidente ucraniano Zelenski.