Últimas detenciones en los campamentos de Tigray producidas por las fuerzas de Etiopía y Eritrea

El pasado lunes por la noche, los soldados eritreos y etíopes detuvieron por la fuerza a más de 500 hombres y mujeres que pertenecían a cuatro campamentos para personas desplazadas en la ciudad de Shire, en la región norteña de Tigray, según confirmaron como testigos del suceso trabajadores humanitarios y un médico al medio Reuters.
Un hombre local asentado en uno de los cuatro campamentos se ocultó de los soldados y pudo observar la escena, según el medio DW: "Los soldados rodearon nuestro campamento por la noche, rompieron la puerta principal y comenzaron a golpear a todos con palos, golpearon a un hombre de 70 años y secuestraron a un ciego. Solo de nuestro campamento, la escuela primaria Tsehaye, 400 (personas) fueron tomadas ".

La investigadora de Amnistía Internacional Fisseha Tekele dijo que las tropas golpearon a los detenidos y confiscaron sus teléfonos antes de obligarlos a subir a camiones, confirmando que los campos de Tseheye y Adiwonfito estaban entre los objetivos de las tropas, según afirma el medio DW.
Los arrestos surgen como resultado de que el primer ministro etíope, Abiy Ahmed, ordenara una ofensiva militar en noviembre contra el Frente de Liberación Popular de Tigray (TPLF), una organización paramilitar y un partido político con sede en la región. La operación comenzó tras los ataques del TPLF a bases militares federales en la zona, acción que Ahmed ha calificado de "traición".

El mes pasado, el Gobierno etíope anunció la retirada de las fuerzas eritreas de la zona de Tigray, tras reconocer su presencia en la región, sin embargo, su supuesta participación en esta incursión desmentiría las promesas del primer ministro de Etiopía.
Hasta el momento no ha habido comentarios por parte del Ejército etíope en relación con las detenciones. Por su parte, el ministro de Información de Eritrea, Yemane Gebremeskel, calificó el incidente como un intento de propaganda del Frente de Liberación Popular de Tigray (TPLF) y dijo que no veía ninguna razón para "reunir a los desplazados internos", recalca el medio DW.
Amnistía Internacional ha denunciado repetidas veces la falta de intervención por parte de la Unión Africana y los gobiernos de la zona durante la compleja situación que atraviesa Etiopía, “la Unión Africana y los gobiernos de la región apenas han hecho nada para pronunciarse en contra del gran número de probables crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.” manifestaba Deprose Muchena, director de Amnistía Internacional para África Oriental y Austral.
La quinta evaluación de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), señala que más de 1,7 millones de personas desplazadas por el conflicto “necesitan asistencia urgente en 265 ubicaciones accesibles en la región de Tigray y las vecinas Afar y Amhara” según los datos recopilados por la Matriz de Seguimiento de Desplazamientos (DTM).

La inseguridad alimentaria en las regiones de Etiopía afectadas por el conflicto es el principal foco de preocupación internacional. Según el análisis del DTM existe una necesidad urgente de afrontar la inseguridad alimentaria, ayudando a los desplazados y proporcionando “refugio, agua, saneamiento, higiene y otros artículos no alimentarios en las zonas afectadas por el conflicto”.
La ONU también ha mostrado su preocupación al respecto: "Hoy, al menos el 20% de la población de esa zona se enfrenta a la inseguridad alimentaria", reclamó el secretario general adjunto de Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios, Mark Lowcoc, afirma el medio France 24.

Además, el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, ha explicado durante una rueda de prensa, que los trabajadores humanitarios han aumentado sus denuncias sobre los bloqueos de ayuda internacional y de “incautación de vehículos y suministros humanitarios por las partes del conflicto en Tigray", recalca el medio Europa Press.