El uróboro latinoamericano: ¿Ausencia yihadista o fusión  con crimen organizado?

“Pese a la necesidad de controlar estas rutas con la implantación de medidas acordes a la amenaza, las agencias de inteligencia de América Latina no se dedican a estudiar en profundidad el terrorismo yihadista”. 

Estados Unidos, Europa, Rusia, Nueva Zelanda, África, Oriente Medio, Tailandia, Canadá… Durante los últimos años se ha evidenciado que el yihadismo se ha propagado desde un extremo a otro del planeta, sin embargo, resulta cuanto menos llamativo el hecho de que en América Latina no sea así. 

En un continente donde el 95% de la población pertenece a la religión católica y constituye las dos terceras partes a nivel mundial, el cristianismo se convierte en el pilar fundamental de su cultura tradicional. Sin embargo, a pesar de esta predominancia derivada de la colonización, tuvo sus primeros altibajos a principios del siglo XX. En este entramado de nuevas tendencias, el islam empezó a encontrar huecos por los que acceder a la sociedad latinoamericana.

La tradición histórico-cultural que ha conformado los pueblos del continente americano, proporciona a la religión musulmana diversas oportunidades. En primer lugar la doble identidad histórica de los pueblos autóctonos, poseedores de tradiciones autóctonas, europeas y africanas. En suma, tomando en consideración el largo recorrido del islam en la Península Ibérica durante los siglos VIII-XV, reafirma su papel como “participante indirecto o de segundo grado en la conformación de la identidad latinoamericana”.  Además de los esclavos procedentes de África, que a pesar de ser en su mayoría animistas, se mantuvieron apegados a sus raíces religiosas.

Las difíciles condiciones sociales que reinan en los países de América del Sur y Central propician el surgimiento de crisis identitarias y la búsqueda de soluciones divinas para sus problemas terrenales, siendo el islam la religión que mejor se adapta a estas características.

Por el lado político, el avance del marxismo en diversos países latinos, con ese sentimiento anti EE.UU innato, se ha postulado paralelamente con la yihad. Se puede plantear un símil entre ambos: la lucha contra los infieles no es necesariamente contra los “no musulmanes”, sino más bien contra los atacantes del islam, uniéndose varios caminos en un punto común: el imperialismo norteamericano. 

Poniendo bajo relieve el auge de la izquierda latinoamericana durante los últimos años no cabe dudar la posible relación con Hezbollah y la creación de filiales en suelo americano. El problema planteado, como es en el caso venezolano, se centra en la existencia de cierta o absoluta permisión en la comisión de atentados por el “Hezbolla venezolano”, al darse esa coincidencia ideológica y de intereses. O en el caso argentino, estando directamente relacionado con la denominada Revolución Bolivariana. 

A pesar de las diferencias intrínsecas, encontramos coincidencias tales como una mezcla de progresismo, revolución bolivariana, indigenismo, antiamericanismo, antisionismo y reafirmación de la lucha armada . En definitiva, la existencia de zonas grises está pudiendo ser aprovechada tanto por esta organización como por uno de sus principales apoyos, Irán. 

Por último las oportunidades económicas, entrando de lleno el predominio del narcotráfico y el crimen organizado. Poniendo especial atención en la triple frontera Brasil-Argentina-Paraguay, caracterizada por el escaso control estatal y una alta permeabilidad; Estados fallidos como Haití, además de determinadas zonas en Colombia, Chile y Venezuela, donde la financiación del terrorismo se torna sencilla.  

No queda más que comprender este fenómeno como una amenaza híbrida que entremezcla los fines ideológicos, tanto políticos como religiosos, con otros de carácter delictivo y lucrativo, viniendo a ser en este caso el contrabando, el lavado de dinero, el tráfico de armas y estupefacientes, incluso de documentación falsa, que facilite los traslados internacionales de los foreing fighters. 

Actualmente, la mayor parte de musulmanes residentes en latino América son inmigrantes de países islámicos, siendo tan sólo un 10% de origen autóctono.  Entre la nacionalidad predominante destaca la libanesa,  país originario del grupo terrorista Hezbollah, apoyado por Irán (es necesario atender a las relaciones de este país con diversos gobiernos latinoamericanos).

No obstante, debido a las dificultades económicas presentes en la zona sur y centro del continente, los niveles de inmigrantes han disminuido y por ende, el número de población musulmana. No obstante, diversos informes de inteligencia demuestran la existencia de “yihadistas latinos” procedentes de Argentina, Brasil, Chile, Trinidad Tobago y México, además de flujos de dinero hacia Oriente Próximo, que oscilan entre los 60 y los 1000 millones de dólares al año. 

Latino América no se estrena como lugar de asilo para el terrorismo, siendo elegido por integrantes de ETA o por los mismos nazis. Tras analizar los datos proporcionados anteriormente no sorprende el hecho de que Trinidad y Tobago se haya consagrado como el país occidental con mayor número de yihadistas per cápita,  gracias a su situación socio-económica y su alta criminalidad.

En suma, es más que sabido el alto nivel de corrupción en las agencias estatales de seguridad y la alta criminalidad en todos los países latinoamericanos. Este área puede ser considerada como el escenario clave para la financiación de organizaciones terroristas, pudiéndose dar la tan temida sinergia entre crimen organizado-terrorismo. “Pese a la necesidad de controlar estas rutas con la implantación de medidas acordes a la amenaza, las agencias de inteligencia de América Latina no se dedican a estudiar en profundidad el terrorismo yihadista”. 

1.   Pareja, V. (2019). La amenaza del terrorismo yihadista en América Latina. The political room.
2.   Andrade, G. E. (2017). Posibilidades de crecimiento del Islam en América Latina: oportundiades y dificultades
3.   Centro de Estudios del Medio Oriente Contemporáneo (CEMOC), & Botta, P. (2010, julio). La doble cara de Hezbollah en América Latina. Centro de Estudios del Medio Oriente Contemporáneo (CEMOC). Programa de Estudios sobre el Irán Contemporáneo (PEIC). Pág. 5-7. 
4.   Centro de Estudios del Medio Oriente Contemporáneo (CEMOC), & Botta, P. (2010, julio). La doble cara de Hezbollah en América Latina. Centro de Estudios del Medio Oriente Contemporáneo (CEMOC). Programa de Estudios sobre el Irán Contemporáneo (PEIC). Pág. 3-4. 
5.   INISEG. (2017). Descubre los secretos nunca contados de la amenaza de terrorismo en América Latina. INISEG.
6.   Andrade, G. E. (2017). Posibilidades de crecimiento del Islam en América Latina: oportundiades y dificultades
7.   Navalón, A. (14 de Septiembre de 2014). El islam en América. El país.
8.   INISEG. (2017). Descubre los secretos nunca contados de la amenaza de terrorismo en América Latina. INISEG.
9.   Miranda, B. (8 de Marzo de 2017). Por qué Trinidad y Tobago se convirtió en el país occidental con más yihadistas de Estado Islámico per cápita. BBC.
10.   Pareja, V. (2019). La amenaza del terrorismo yihadista en América Latina. The political room.