Karim, Karim, Karim Benzema
Benzema deja el Real Madrid. Hay una generación de seguidores blancos que no conoce otro nueve, que se enteró el domingo por la mañana de que Benzema era mortal y podía retirarse o irse a otro equipo. Chavales que preguntaban qué será ahora del goleador de blanco y quién llevará el brazalete de capitán.
Hay otra generación que despide a un 9 querido, pero también a un delantero que no honró el número que llevaba en la espalda durante muchas temporadas. Que pasó años a la sombra de Cristiano Ronaldo y al que se le pedían sus goles en ausencia del portugués. Benzema era ese delantero que no pisaba el área, que se movía entre líneas para deleite de sus compañeros a los que facilitaba el trabajo, pero que ponía de los nervios al aficionado porque nadie remataba las jugadas.
Benzema fue el capricho de Florentino Pérez. Un empresario que no sabe de fútbol, pero a quien algo le decía que ese francés del Olympique de Lyon que fue un ogro para los blancos en Europa a principios de silos XXI, tenía algo en sus botas. En 2009 pisó por primera vez el Santiago Bernabéu y ya no paró hasta 2023 con cinco Champions y cuatro Ligas, entre otros títulos en los que siempre fue protagonista.
Benzema ha sido el único jugador por el que Florentino Pérez ha perdido las formas en un palco. Fue en 2011 ante el propio Lyon tras un gol del francés que no significaba demasiado para el club. Detrás de aquel gesto estaba el presidente que cuidaba de su jugador favorito y que lanzaba un órdago a todos aquellos que querían sacar a Benzema del Real Madrid por no ser un delantero de los de antes.
El Real Madrid ha ido mucho más allá con Benzema que con cualquier otro jugador. Solo aquel gesto de Pepe con Casquero igualó la protección con uno de los suyos. El delantero galo vivió momentos complicados en su país con dos acusaciones graves. De una fue absuelto porque la supuesta menor con la que estuvo solo buscaba fama. En el segundo caso, el de Valbuena, el asunto llegó hasta la propia Presidencia del Gobierno que no se implicó demasiado en su defensa. Benzema estuvo seis años alejado de Francia por este caso y nunca fue querido en su país. Acusaciones de racismo y un regreso incómodo hicieron que el delantero se centrara más en el Real Madrid durante los últimos años.
Al gran Benzema se le recordará por la Champions número 14 del conjunto blanco. Seis partidos soberbios entre los octavos y la semifinal ante el City que el equipo redondeó con su trofeo favorito precisamente en París. También queda para el recuerdo el gol ante el Liverpool en otra gran final, la de la 13ª en Kiev, con el error de Karius que solo Benzema esperaba.
Se abre una incógnita que no será respondida fácilmente por la presidencia del Real Madrid durante el verano. Encontrar un 9 es una misión imposible en Europa. Harry Kane parece que es el elegido, pero que nadie espere un nuevo Benzema porque jugadores como el francés no existen.
