Las aerolíneas se refuerzan ante posibles ataques informáticos

Julián González/CapitalMadrid.com

Pie de foto: IAG considera que hay muchas incertidumbres para 2016 debido a China y la caída del crudo

Las compañías aéreas tuvieron en general un ejercicio 2015 muy bueno porque coincidieron dos elementos que favorecieron la mejora de los resultados: la caída del precio del crudo y un aumento de la demanda. La incógnita está en si este año será igual que el pasado por la situación geopolítica mundial y el empeoramiento de algunas economías. La caída del crecimiento de China y el hundimiento que están sufriendo las economías africanas y sudamericanas por la bajada del petróleo son dos factores que preocupan mucho a la mayoría del sector.

Las ae­ro­lí­neas han aña­dido otro factor muy im­por­tante de preo­cu­pa­ción a la hora de hacer pre­vi­sio­nes. Las em­presas temen cada vez más los ata­ques in­for­má­ticos que su­fren, lo que está lle­vando a que mu­chas de ellas estén au­men­tando sus pre­su­puestos y sus gastos en esta ma­te­ria. Tras el aten­tado contra las Torres Gemelas el 11S, los Estados y las com­pañías au­men­taron sus con­troles de vi­gi­lancia in­for­má­tica pero el pá­nico a los hac­kers es cada vez más pa­tente.

El con­se­jero de­le­gado de IAG, Willie Walsh, des­ve­laba en la re­ciente pre­sen­ta­ción de los re­sul­tados del grupo un cierto grado de preo­cu­pa­ción. “Hemos ob­ser­vado un au­mento del riesgo de pér­didas fi­nan­cie­ras, in­te­rrup­ción de las ac­ti­vi­dades o daño a nuestra repu­tación, de­bido al au­mento de la fre­cuencia y so­fis­ti­ca­ción de los ata­ques in­for­má­ticos a las em­pre­sas. En con­se­cuen­cia, hemos re­for­zado los re­cursos que des­ti­namos a la se­gu­ridad in­for­má­ti­ca”, seña­laba el má­ximo eje­cu­tivo de IAG.

Y es que, la se­gu­ridad in­for­má­tica se ha con­ver­tido en una ob­se­sión para las ae­ro­lí­neas de­bido a la di­men­sión que está ad­qui­riendo el te­rro­rismo in­ter­na­cio­nal. El con­se­jero de­le­gado de IAG re­co­noce pre­ci­sa­mente que es una de las ma­yores preo­cu­pa­ciones que tienen las em­pre­sas. En junio pa­sado, ata­ques de hac­kers al sis­tema in­for­má­tico de la ae­ro­línea po­laca LOT obli­garon a can­celar 10 vue­los. Adrian Kubicki, por­tavoz de LOT, de­claro a la ca­dena BBC: “Utilizamos lo úl­timo en sis­temas in­for­má­ti­cos. Lo su­ce­dido po­dría ser po­ten­cial­mente una ame­naza para otras com­pañías de la in­dus­tria”, dijo.

Factores de riesgo

Por ello, las ae­ro­lí­neas están te­niendo el viento de cara con la ba­jada del pe­tróleo pero tienen otros fac­tores de riesgo que en cual­quier mo­mento pueden torcer sus cuentes de re­sul­tados y sus co­ti­za­ciones en Bolsa. El pa­sado día 22 de marzo todas las ae­ro­lí­neas eu­ro­peas se hun­dieron en los mer­cados por los aten­tados de Bruselas. Lufthansa, Air France, IAG y las ame­ri­canas Delta, American Airlines y United Continental, entre otras, se tiñeron de rojo.

Todas tu­vieron que sus­pender gran parte de sus vuelos y otras como Brussels Airlines, está su­friendo fuertes pér­didas desde la fe­cha. La an­tigua ae­ro­línea de ban­dera belga y hoy pro­piedad de la ale­mana Lufthansa -principal usuaria del ae­ro­puerto de Zaventem- cal­cula que su­pe­rará in­cluso los 10 mi­llones de euros de pér­didas que le su­puso el es­tado de sitio de no­viembre pa­sado que se de­cretó en la ca­pital belga por los aten­tados de París.

Al margen de este grave pro­blema que ame­naza cons­tan­te­mente al sec­tor, las pre­vi­siones de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) es que los be­ne­fi­cios de las ae­ro­lí­neas se in­cre­men­tarán en 2016 por el ba­rril y el au­mento de la de­manda. Aunque el pe­tróleo ha de­jado de caer, no se es­pera que haya un re­punte a lo largo del año y todo lo que se mueva en el en­torno de los 50 dó­lares el ba­rril, es un precio que per­mite al sector tener unos costes uni­ta­rios re­la­ti­va­mente ba­jos.

Ahora bien, todo lo que les be­ne­ficia por esta vía a las em­pre­sas, les per­ju­dica tam­bién por la caída de los in­gresos que su­fren los países pro­duc­to­res. Según el in­forme de la IATA, Norteamérica y Europa fueron en 2015 los mer­cados más fuer­tes, mien­tras que África se vio muy afec­tada por la caída de los pre­cios del com­bus­ti­ble. América Latina su­frió por su parte el im­pacto ne­ga­tivo de la de­pre­cia­ción de las di­visas como Brasil y Argentina.

Beneficios ré­cord de IAG

El Grupo IAG, el hol­ding for­mado por British Airways, Iberia y Vueling -Aer Lingus se in­cor­poró el pa­sado 18 de agosto- tuvo un be­ne­ficio neto atri­buido de 1.516 mi­llo­nes, lo que su­puso un 51,1% más que en 2014 cuando ob­tuvo 1.003 mi­llo­nes. El be­ne­ficio ope­ra­tivo antes de ex­tra­or­di­na­rios me­joró un 68% hasta 2.335 mi­llo­nes.

Por ae­ro­lí­neas, la bri­tá­nica British Airways ganó 1.75 mi­llones de li­bras es­ter­li­nas, unos 400 mi­llones más que el ejer­cicio an­te­rior. Iberia, por su parte, me­joró bas­tante sus ci­fras y ganó 247 mi­llones de eu­ros, frente a los 50 mi­llones de 2014 lo que su­puso un 394% más.

La em­presa con­tro­lada por IAG logró volver a los nú­mero ne­gros en 2014 (50 mi­llo­nes) des­pués de un duro pro­ceso de re­es­truc­tu­ra­ción para acabar con las pér­didas y de­vol­verle la com­pe­ti­ti­vi­dad. Este plan in­cluyó una fuerte re­duc­ción de plan­ti­lla, re­corte de los sa­la­rios, can­ce­la­ción de ru­tas, re­ti­rada de avio­nes, re­vi­sión de todos los costes y re­duc­ción de la es­truc­tura.

El Plan de Futuro ya está dando re­sul­tados po­si­ti­vos. De he­cho, ha em­pe­zado a re­novar su flota, con 29 nuevos aviones de largo radio y ha abierto 30 rutas entre 2014 y 2015 entre Iberia e Iberia Express. En 2015, la fi­lial de IAG llevó a cabo la pri­mera con­vo­ca­toria para la con­tra­ta­ción de nuevos pi­lotos en once años. Respecto a Vueling, au­mentó un 13,5% sus ga­nan­cias ope­ra­tivas hasta 160 mi­llo­nes. Mientras, Aer Lingus, ad­qui­rida el 18 de agosto de 2015, aportó 35 mi­llones de be­ne­fi­cios al grupo.

La com­pañía ale­mana Lufthansa re­gis­tró, por su parte, un ejer­cicio es­pec­ta­cular con un be­ne­ficio neto de 1.698 mi­llones de eu­ros, lo que su­pone mul­ti­plicar por 30 lo que ganó en 2014 (55 mi­llo­nes). El pre­si­dente de la ae­ro­línea ale­mana, Carsten Spohr, señaló en la pre­sen­ta­ción de los re­sul­tados que 2015 fue “un año emo­cional y muy di­fícil por el ac­ci­dente de Germanwings, pero tam­bién un buen año en tér­minos eco­nó­mi­cos”. Los buenos re­sul­tados se de­bieron no solo al aba­ra­ta­miento del que­ro­seno sino tam­bién al cre­ci­miento de pa­sa­je­ros.

Air France KLM no su­peró, en cam­bio, los be­ne­fi­cios de 225 mi­llones de euros re­gis­trados en 2014 aunque ganó 118 mi­llo­nes. La com­pañía tuvo el im­pacto de 120 mi­llones de euros en sus cuentas por los aten­tados de París y además pa­deció 14 días de huelgas de sus pi­lo­tos.