El Banco Central Europeo ha anunciado que aumentará el volumen de las compras de deuda de emergencias frente a la pandemia de la COVID-19 en 600.000 millones de euros, hasta alcanzar 1,35 billones, por la revisión de las previsiones de inflación. La entidad ha informado de que el Consejo de Gobierno también ha decidido prolongar su duración, “al menos hasta finales de junio de 2021”, cuando hasta ahora había asegurado que compraría deuda en cualquier caso hasta final de este año. También mantiene los principales tipos de interés al 0%.
Desde el final de marzo, la institución presidida por Christine Lagarde compra deuda de la zona del euro para hacer frente al impacto de la pandemia de la COVID-19 en las condiciones de financiación de los países que comparten el euro y planea reinvertir el principal de los valores adquiridos para hacer frente a la pandemia hasta, al menos, finales de 2022. Las últimas proyecciones macroeconómicas de la entidad indican que se producirá una caída del PIB del 8,7% para 2020, un crecimiento de 5,2% en 2021 y un 3,3% en 2022. Las previsiones de inflación fueron rebajadas al 0,3% en 2020, al 0,8% en 2021 y al 1,3% en 2022.
“La expansión del programa de compras es una señal más de la enérgica respuesta de las instituciones europeas para hacer frente a la pandemia. Para España, uno de los miembros de la zona euro más afectados, es una noticia muy positiva desde el punto de vista crediticio. Esto asegurará tasas de financiación muy bajas en los próximos 12 meses. No obstante, la enérgica respuesta monetaria también refleja la profunda recesión a la que se enfrenta Europa y la perspectiva de que tardará varios años en recuperarse de esta crisis”, ha señalado Alvise Lennkh, subdirector de finanzas públicas de la agencia de calificación Scope Ratings, en unas declaraciones remitidas por correo electrónico a los medios de comunicación.
“Con la extensión del programa de compras para la pandemia hasta junio de 2021, sumado a los 750.000 ya existentes, Lagarde ha superado las expectativas del mercado, que esperaba 500.00 millones adicionales. El BCE ha destacado los riesgos e incertidumbres a la baja sobre la economía y ha alertado de una caída de entre el 8% y 12% del PIB de la zona euro en 2020”, explica Fraçois Raynaud, economista de la consultora Edmond de Rothschild en una comunicación para medios enviada por correo electrónico.
El BCE había adquirido hasta el 29 de mayo deuda por valor de 234.665 millones, de los que 186.603 millones han sido deuda pública, 35.384 millones pagarés y 10.579 millones bonos corporativos. La peculiaridad del nuevo programa de compra de deuda es que es flexible y el BCE puede comprar más deuda de un país en un momento dado si su prima de riesgo se dispara en el mercado.
“Estas compras continuarán realizándose con flexibilidad a lo largo del tiempo, entre distintas clases de activos y entre jurisdicciones”, ha explicado este jueves el BCE. El Consejo de Gobierno espera que los tipos de interés continúen en los niveles actuales, o en niveles inferiores, hasta que observe que las perspectivas de inflación alcancen un nivel algo por debajo del 2%, y se reflejen en la evolución de la inflación subyacente.
Asimismo, el BCE mantiene su anterior programa de compra de deuda a un ritmo mensual de 20.000 millones, unas compras que espera que finalicen poco antes de que comience a subir los tipos de interés oficiales. También seguirá invirtiendo el principal de los valores adquiridos que vayan venciendo hasta que comience a subir los tipos de interés. La entidad también publica hoy sus nuevas proyecciones macroeconómicas y se espera una fuerte rebaja de sus pronósticos de crecimiento.
“Lagarde quiere subrayar la independencia del BCE mediante este anuncio, que es probable que esté motivado por la reciente sentencia del Constitucional alemán. El aumento de las compras de deudas ha sido mayor del esperado por el mercado. Es un claro gesto de que las instituciones europeas van a poner toda su maquinaria para evitar una ruptura del mercado común”, asegura Fraçois Raynaud, economista de la consultora Edmond de Rothschild en una comunicación para medios enviada por correo electrónico.