Abdelmajdid Tebboune ha vuelto a defender la “descolonización” del Sáhara y reafirma su apoyo al Frente Polisario

Argelia renueva su apoyo al Polisario y se aleja aún más de Marruecos

Presidente de Argelia, Abdelmajdid Tebboune
Presidente de Argelia, Abdelmajdid Tebboune

Argelia no pretende dar su brazo a torcer en la carpeta del Sáhara Occidental. A pesar de expresar su voluntad de acercar posturas con Marruecos, con quien rompió sus relaciones diplomáticas hace ya más de dos años, no tiene intención de abandonar su apoyo al Frente Polisario. De esta forma, Argel sigue desafiando la integridad territorial de Marruecos y ahondando en la brecha abierta entre ambas administraciones.

  1. Las contradicciones argelinas
  2. Marruecos sigue tendiendo su mano a Argelia

Abdelmajdid Tebboune manifestó, de nuevo, su apoyo al Polisario durante su último discurso ante el Parlamento argelino. También lo hizo con la causa Palestina, con la que siempre ha intentado vincular el caso saharaui, a pesar de las manifiestas diferencias existentes entre ambos. Tebboune aseguró que la “descolonización” del Sahara está “registrada en el Comité de Descolonización de la ONU, y es sobre esta base que Argelia apoya la lucha del pueblo saharaui”.

PHOTO/ARCHIVO - Presidente de Argelia, Abdelmadjid Tebboune durante una emisión televisiva
PHOTO/ARCHIVO - Presidente de Argelia, Abdelmadjid Tebboune durante una emisión televisiva

Las contradicciones argelinas

Si bien es cierto que los ataques hacia su vecino marroquí no suponen una sorpresa dadas las diferencias entre ambos, sí que contravienen las palabras del ministro de Exteriores argelino, Ahmed Attaf. Hace pocos días, Attaf aseguró que su país podía ser “considerado más proclive a buscar una solución rápida” a la crisis con Marruecos.

Tan sólo unos días después, Tebboune vuelve a alejarse de Rabat con unas declaraciones que sabe suponen una línea roja para el reino alauí. Sobre todo, cuando se tiene en cuenta que Argelia ha utilizado buena parte de sus ingresos y peso diplomático en África para hacer presión y apoyar al Frente Polisario en sus esfuerzos por desestabilizar el Sáhara Occidental.

El responsable de la cartera de Exteriores argelina aseguró que su país es “consciente, como los demás Estados, de la construcción del Magreb árabe y de la fraternidad”. No obstante, las palabras de este no concuerdan con los gestos del presidente, y mucho menos con las acciones que ha llevado a cabo su Gobierno en los últimos años. Siempre, cada vez más, alejados de esa voluntad “fraternal” de unir a los países de la región del Magreb.

Marruecos sigue tendiendo su mano a Argelia

A pesar de los desafíos constantes de Argel, Rabat ha mostrado de forma reiterada su voluntad de acercar posturas con su rival regional. El rey marroquí, Mohammed VI, ya expresó este deseo en su discurso del Día del Trono en julio, cuando aseguró que su país pretende mejorar los lazos bilaterales “estables” con Argelia.

Marruecos sabe que, a pesar de llevar tiempo asentándose como líder regional, la asociación con Argelia acabaría por estabilizar el norte de África. De esta forma, abriría una ventana de oportunidad para seguir creciendo y aumentando su poder de influencia a todos los niveles. Sin embargo, mientras el presidente argelino mantenga una postura tan beligerante, será complicado seguir ese camino.

Aún así, desde Rabat no descartan un acercamiento y continúan tendiendo su mano a la reconciliación. El propio Mohammed VI ya se dirigió directamente al Gobierno argelino y sus dirigentes afirmando que “nunca se les hará ningún mal ni se les producirá ningún daño desde Marruecos”. Ahora, debe ser Argelia quien dé un paso al frente o, al menos, no los siga dando en la dirección contraria.