Gustavo de Arístegui: “Putin ha perdido contacto con la realidad, considera que lo que está haciendo es de verdad un acto de defensa propia”

El diplomático Gustavo de Arístegui pasó por los micrófonos del programa ‘De cara al mundo’ de Onda Madrid y analizó la difícil situación que se atraviesa con la guerra en territorio de Ucrania. El experto en asuntos internacionales censuró la agresiva posición tomada por el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y valoró la trascendencia que puede tener.

Ucrania puede ser el final de Putin, ¿o pensar eso ahora es una quimera?

Vamos a ver, a largo plazo puede ser una posibilidad, pero seamos un poco más pesimistas. En este momento, en Rusia, la aplastante mayoría de la opinión pública apoya esta acción. He estado escuchando prácticamente toda la noche, todo el día, las cadenas internacionales más relevantes y sus expertos más reputados en materia rusa que son todos ellos rusos y ucranianos de nacimiento y de educación, y hay un cierto “wishful thinking” en Occidente que piensa que la mayoría de la población rusa está en contra de la guerra. Es cierto que hay una minoría, no pequeña, que lo está y que no se manifiestan porque es reprimida, y porque también, la aplastante mayoría de los medios de comunicación en Rusia están dominados por gentes muy próximas al Kremlin. Dicho esto, el pensar que esa manifestación de gente contraria a la guerra en Ucrania, a la invasión de un país soberano, es mayoritaria en la sociedad rusa, es francamente una quimera, y me parece muy irresponsable insistir en ese tema. Hay que entender la mentalidad de los rusos, los rusos son profundamente nacionalistas, y se sienten gravemente humillados cuando hace implosión la unión soviética, y como es conocido, y es una cuestión pública. La mayor tragedia para Rusia fue la implosión de la unión soviética, y eso está grabado a sangre y fuego en la cabeza de alguien que conoce como nadie la confrontación este-oeste.

Recordemos que, durante muchos años, Vladimir Putin fue el jefe de Estación del KGB en Berlín, y que era el hombre fuerte que daba las instrucciones a la Stasi, era quien conocía perfectamente la confrontación en el punto más caliente del planeta, de la confrontación este-oeste, que era justamente Berlín, y eso está en la cabeza de Putin, y esto está guiando todos sus acciones y sus estrategias. En este momento, Putin lleva maquinando estas cuestiones desde el año 99, en su cabeza era muy claro que no podía tolerarse ningún tipo de régimen que no fuera puramente prorruso en las fronteras de Rusia, y, por eso, él estabilizó Georgia en el año 2008.

Empezó a decir que Georgia iba a integrarse en la Unión Europea y en la OTAN, y empezó a poner banderas de la OTAN y de la Unión Europea por todas partes, en Tiflis, y en todas partes. En Georgia hubo una guerra relámpago, Rusia se quedó con Abjasia y con Osetia del sur, las declaró independientes. Hoy son republicas rusas. Lo mismo hizo con Crimea, no pasó absolutamente nada. Tiene rusia milicianos en el Donbás que no es que sean milicianos rusos o de etnia rusa ucranianos que tomaron las armas, son soldados rusos sin uniforme. Esa es la realidad de las cosas. Putin ha amasado 190.000 hombres, no 10.000. 190.000 hombres en el entorno a Ucrania para poder hacer el ataque coordinado que acaba de hacer por norte, este y sur. Está desplegando en Kiev comandos chechenos que están buscando al presidente Zelenski y hay que entender otra cosa, para los rusos y sobre todo para Putin, la revolución de Maidán, de la plaza de Maidán fue un golpe de Estado antirruso. El presidente Yanukovich, que acababa de ser elegido fue derrocado por las masas en la plaza de Maidán, y en la mentalidad de todos los rusos, pero sobre todo en la de Putin, eso fue una maquinación de Occidente y de Estados Unidos en concreto, de la OTAN en su conjunto para tener en Ucrania un elemento para controlar y desestabilizar permanentemente a Rusia. Por lo tanto, en la mentalidad distorsionada porque yo creo que en gran medida es verdad lo que dicen algunos analistas que conocen bien Rusia, Putin ha perdido contacto con la realidad. Él considera que lo que está haciendo es de verdad un acto de defensa propia para garantizar la supervivencia y estabilidad de Rusia en el futuro. Ahora hay que tener en cuenta qué consecuencias van a producirse de todo esto. No sería impensable, que algo que era inimaginable, hace apenas un año o dos, que dos países neutrales. Uno que ha hecho de la neutralidad su esencia nacional, que su eje acabe integrándose de una manera u otra en la estructura de la OTAN, hay que recordar, por cierto, que Suecia siendo un país neutral, es el país que con mayor eficacia se ha integrado en las acciones en Afganistán, en coordinación con la OTAN, con sus excelentes fuerzas especiales y su muy experimentada fuerza aérea. Por otra parte, el único país del mundo que ha derrotado a la Unión Soviética en una guerra convencional es Finlandia, y que es por eso por lo que fue neutralizada porque Finlandia quería formar parte de Occidente y fue una exigencia de la Unión Soviética en la segunda posguerra mundial, que Finlandia no fuese miembro de la Alianza Atlántica y que estuviese en consecuencia neutralizado. En este momento, Finlandia que se ha acostumbrado a estar en el lado neutral desde el año 45 hasta nuestros días. Podría muy bien empezar a pensarse los beneficios de estar cubiertos por el artículo 5 del Tratado del Atlántico Norte. Después está, por supuesto, las consecuencias económicas.

Hay consecuencias graves. Rusia es uno de los primeros productores mundiales de aluminio. Rusia es uno de los primeros productores mundiales de fosfato. Rusia es uno de los primeros productores mundiales de titanio. Todos estos elementos son fundamentales para la seguridad alimenticia, sobre todo para la industria moderna, y esto significa que otros países que tienen estos recursos van a ganar enormemente en la escena internacional. Por ejemplo, Noruega que tiene unas reservas extraordinarias de titanio, de vanadio, e incluso de fosfatos que acaban de ser descubiertos, o la propia Marruecos que es el primer productor mundial de fosfatos, va también a tomar una relevancia importante para sustituir los fosfatos rusos. Es decir, estamos empezando a entrar en una guerra extraordinariamente compleja en la que se unen tres elementos, o tres pilares fundamentales. El geoeconómico que acabo de descubrir, el geoestratégico que está en pleno desarrollo en este momento, y el geopolítico, que es el de más amplio espectro, que es el que va a definir cómo vamos a tener el mundo en las próximas décadas. Lo que parece claro y no quiere parecer demasiado solemne, es que el orden de seguridad estrategia y equilibrio que surge de la segunda guerra mundial ha quedado completamente destruido. Lo que va a pasar, pase lo que pase en la guerra de Ucrania, gane o no gane a largo o corto plazo Rusia, yo creo que es evidente que va a ganar porque está a minutos de poder derrocar el Gobierno ucraniano y poner en su lugar un Gobierno títere, que es lo que quería. El equilibrio de fuerzas geopolíticas en el mundo ha cambiado para siempre, y eso lo tenemos que entender muy claramente. Ahora, es muy importante que también entendamos las rivalidades que existen entre China y Rusia. Tienen algunas cuestiones comunes, por ejemplo, tiene rivales y adversarios comunes. En este momento para Rusia, enemigo es Occidente. China en ese sentido va a convertirse en el salvavidas económico de la Rusia sancionada, pero al mismo tiempo, son rivales en muchas otras cosas. China y Rusia han sido enemigos jurados en muchos lugares del mundo, y me gustaría nombrar, uno, como a título de ejemplo, del sudeste asiático en la guerra de Vietnam, en Laos, en Birmania, en todo el sudeste asiático. Siempre China estaba en lados opuestos de la batalla por la conquista y dominio de los países. No es tan claro, porque China sea rival de Occidente, no quiere decir que automáticamente China sea el mejor aliado y amigo de Rusia. Habrá cosas muy matizables. Esto nos lleva a una cuarta reflexión, la cuarta reflexión es el cambio de los modelos políticos que conocemos, es decir, hay un cierto declive del modelo de democracias liberales representativas. Hay un surgimiento de un nuevo tipo de régimen al que la China comunista no es ajena, que es lo que podíamos denominar el populismo de hombre fuerte. En el pasado, las dictaduras estaban en una inmersa mayoría inspiradas por ideologías. La dictadura comunista estalinista, la dictadura comunista monstruosa nazi y la monstruosa fascista, etc. La ideología más un personalismo, Mussolini, Hitler, Stalin, hacían de ellos personajes especialmente peligrosos. Hoy estamos en una fase completamente distinta. El populismo de hombre fuerte hace que el hombre fuerte, el dictador genere una propia ideología, y esto es muy importante que lo entendamos. Utiliza la ideología en diferentes grados, son siempre el mismo caso, es evidente que, en China, la fuerza del Partido Comunista es extraordinaria, pero que Xi Jinping es un comunista, nadie lo duda, sin embargo, es un dirigente comunista o si quiere uno llamarlo dictador o lo que una quiera llamarlo. Es obvio, que es de un tipo distinto de lo que fue Mao Zedong, o de lo que fueron sus sucesores. Este populismo de hombre fuerte está empezando a contagiar en diferentes partes del mundo. Lo estamos viendo en Turquía que es un país de la OTAN, lo estamos viendo surgir en algunos países de Europa como el caso de Hungría, y este sistema va a extender a cada vez más países porque la población, con estas incertidumbres económicas, las pandemias, las guerras, en definitiva, las crisis profundas en todos los ámbitos que se están empezando a arraigar y a reunificar van a buscar en el hombre fuerte populista la certeza y seguridad que no consiguen con las democracias.

Ha contestado a todas las preguntas que tenía previstas, siga.

La cuestión turca es muy interesante. Duramente muchísimos años, durante la Guerra Fría, los españoles no nos dábamos cuenta de una cosa porque estábamos un poco lejos, pero cuando uno recorre en barco el estrecho del Bósforo, uno se da cuenta de la extraordinaria importancia de Turquía en la seguridad mundial. Tengamos en cuenta que mientras que Rusia dominaba los Estados bálticos tenía una salida directa al mar Báltico a través de estos Estados bálticos, sabiendo obviamente que el mar Báltico y el mar del Norte, y en consecuencia la salida por Escocia por el norte o la salida por el canal de la Mancha, estaban profundamente, intensamente controladas por las fuerzas de la OTAN, de la misma manera que el puerto de Múrmansk permanecía congelado la mayoría los meses del año, la única salida natural, más fácil, pero siempre controlada, era  a través del estrecho del Bósforo, es decir a través de Turquía que era un miembro de la OTAN, y que, por tanto, cada barco ruso que atravesaba el estrecho del Bósforo, estaba controlado por Occidente, pero cuando el cambio climático acabe haciendo del puerto de Múrmansk y todos los puertos siberianos, unos puertos que sean practicables todo el año, la hegemonía naval rusa puede acabar siendo una realidad o, por lo menos, la rivalidad con Estados Unidos puede acabar siendo una realidad. Mucha gente está diciendo que Putin es un poscomunista. No, no lo es. Putin es un nacionalista ruso. De hecho, una de las cosas que está reprochando al régimen anterior de la Unión Soviética es justamente, que fueron los bolcheviques los que en su opinión crearon a Ucrania como una creación artificial, puesto que, como él está diciendo, son el mismo pueblo aunque hablen un idioma distinto, que ellos consideran un dialecto del ruso, y que la alma rusa nace en Ucrania, que nace en Kiev, que la iglesia ortodoxa rusa tiene razón en Kiev, y que para los rusos historiadores lo que es un ruso étnico es una mezcla de los escandinavos con los eslavos ucranianos, y esto lo tienen grabado a sangre y fuego, y será muy complicado que entendamos hasta qué punto está arraigado en la mayoría del pueblo ruso, que lo está ocurriendo en Ucrania desde el año 2014 con el derrocamiento de Yanukovich no era sino una agresión a cámara lenta de Occidente contra Rusia.

¿Estados Unidos y la Unión Europea, en este panorama que tan bien has explicado, qué papel podrán jugar, o debemos jugar?

Vamos a entrar en un periodo de Guerra Fría, de consecuencias imprevisibles. Rusia no va a parar en convertir Ucrania en el campo de batalla contra Occidente, eso ya está logrado. Ellos van a seguir tratando de desestabilizar a aquellos países que formaron parte de la Unión Soviética. No van a invadirlos porque eso sería llevar el mundo al apocalipsis, eso sería la confrontación con la OTAN, los países del Báltico y Polonia forman parte de la OTAN, Rumanía forma parte de la OTAN, Hungría, la Republica Checa y la República Eslovaca forman parte de la OTAN. No se puede volver el reloj de la historia atrás, pero no significa que la guerra híbrida no vaya a practicarse en estos países. A mí me parecía de una ingenuidad extraordinaria cuando muchos analistas decían que lo de Ucrania va a ser a una guerra híbrida. No, ha sido una guerra convencional, una guerra de reocupación de territorio a la que sumaron estrategias de guerra híbrida, es evidente. Pero esto no para ahí, los rusos conocen muy bien las debilidades de Occidente. No olvidemos que tenían el espantoso departamento 13 del KGB del primer directorio, que se dedicaba a la captación de elementos antioccidentales en Occidente, y que muchos eran por dinero, otros por convicción, y los utilizaban con una convicción extraordinaria y eso lo van a seguir haciendo ahora. No olvidemos, además, que hoy existe un elemento distinto ideológico en la Europa de hoy, y es la extrema derecha de algunos países, no de todos, en los que son fronterizos con la Rusia actual, esa extrema derecha es antirrusa, pero esa extrema derecha es de otras partes de Europa, sobre todo, de Europa occidental, y esa es laxa o prorrusa. Seamos muy claros. Muchas veces he oído hablar, de labios de gentes, de la derecha dura y de la extrema derecha europea decir que Putin es el único baluarte defensor de los valores cristianos y europeos de Europa. Lo cual no deja de ser un verdadero dislate. Ahí también coindicen justamente las fuerzas extremas izquierdas que también son prorrusas, por nostalgia o porque en efecto el sucesor del departamento 13 está haciendo muy bien su trabajo y en este momento no solo tiene los aliados de la extrema izquierda de la Guerra Fría, sino que también, tiene aliados de la extrema derecha en Occidente. es un panorama extraordinariamente preocupante.