Varios antiguos jefes de Gobierno y exministros de Exteriores de países africanos pidieron en Marrakech la salida del seno de la organización panafricana de la República Árabe Saharaui Democrática

Marruecos alberga un notable cónclave que insta a la expulsión de la RASD de la Unión Africana

PHOTO/AP - Sesión de Cumbre de la Unión Africana (UA) en la sede de Addis Abeba

Marruecos acogió una importante cumbre con la presencia de hasta 40 antiguos jefes de Gobierno y exministros de Asuntos Exteriores de diversos países africanos, entre ellos una veintena de signatarios del denominado grupo “Llamado de Tánger”, que abogaron por la expulsión de la autodenominada República Árabe Saharaui Democrática (RASD) del marco de la Unión Africana (UA) en una apuesta por la estabilidad regional y la defensa de la integridad territorial del reino marroquí, el cual sigue defendiendo la pertenencia del Sáhara Occidental al territorio nacional frente a la postura del Frente Polisario, ligado a la RASD, que continúa exigiendo la celebración de un referéndum de independencia entre el pueblo saharaui. 

Los presentes en el cónclave celebrado en Marrakech presentaron un “Libro Blanco” que vendría a demostrar la ilegalidad de la presencia de la RASD dentro de la UA, como informaron diversos medios como Le360. Estos líderes políticos africanos decidieron presentar una iniciativa diplomática para lograr que los Estados africanos acaben con lo que entienden como una anómala situación en el seno de la UA al acoger a una organización que no es legítima y que no se cataloga como una entidad estatal como tal. 

La capital etíope de Addis Abeba acogerá a principios de febrero la 36ª Cumbre de la UA y el objetivo es desenmascarar a la RASD y evitar que siga siendo tratada como un país más de pleno derecho integrante del órgano supranacional del continente africano cuando muchos entienden que no tiene tal estatus al representar un Estado que no existe. 

“Es necesario que la organización africana que admitió un Estado que no existe asuma sus responsabilidades para corregir el error cometido”, afirmó Léonard She Okitundu, exjefe de la diplomacia de la República Democrática del Congo y actual senador, quien recordó que se trata de una “fuerte reivindicación de Marruecos hoy” y añadió que el grupo de seguimiento del “Llamado de Tánger” (establecido el 4 de noviembre de 2022 por los líderes africanos) actuará para “sensibilizar a los Estados africanos de cara a corregir el error que se ha cometido”, lo que se convierte en el “verdadero debate”, como recogió Le360. 

Mientras, Le360 también se refirió a la intervención de Mamadi Touré, exministro de Asuntos Exteriores de Guinea, quien se alineó con esta “ofensiva diplomática” que pretende llevar a cabo esta iniciativa en el marco de una estrategia que el grupo ha trazado a partir del “Libro Blanco”, siendo éste un documento de referencia para reparar “el error” y evitar riesgos independentistas en África. “Existe el riesgo de que sigan otros movimientos en África para desestabilizar el continente” y se trata ahora de "reparar, prevenir y unir", explicó Touré. 

El exjefe de la diplomacia guineana también denunció la serie de trabas a las que se enfrenta la UA con la presencia en su seno de la fantasmal RASD, entidad representada por el Frente Polisario y dirigida por Argelia, gran rival político de Marruecos en el Magreb, como apuntan diversos analistas. 

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Tres nuevos países africanos se han adherido al “Llamado de Tánger” que pide formalmente la salida de la RASD de la Unión Africana: Lesoto, Madagascar y Gambia. Lo que da muestra de la fortaleza que está cobrando este movimiento.

Los exjefes de Gobierno y exministros de Asuntos Exteriores africanos reiteraron por tanto su completo compromiso a trabajar juntos por la expulsión de una entidad no estatal como la RASD de la UA, siguiendo el llamamiento solemne por la salida de esta organización establecido con la firma del “Llamado de Tánger” el pasado 4 de noviembre de 2022. Estos líderes políticos consideraron que esta expulsión, legítima desde el punto de vista legal, de ninguna manera debe ser considerada un objetivo inalcanzable porque se enmarca en una dinámica continental e internacional favorable, donde prevalecen el realismo y el pragmatismo, y porque representa un requisito previo esencial para el retorno de la imparcialidad y la credibilidad de la Organización Panafricana sobre la cuestión del Sáhara marroquí.

Como ha recordado el medio Quid, de las deliberaciones englobadas en la Campaña Panafricana de Reflexión sobre los desafíos de la UA respecto a la cuestión del Sáhara Occidental, debatidas durante cinco seminarios llevados a cabo en mayo y octubre de 2021, en Nuakchot, Dakar, Accra, Dar Es-Salaam y Kinshasa, los firmantes del “Solemne llamamiento para la expulsión de la RASD de la Unión Africana”, discutieron un borrador de “Libro Blanco” que aprobaron por unanimidad. Este “Libro Blanco”, titulado "La Unión Africana y la cuestión del Sáhara marroquí, entrega final de una reflexión panafricana profunda e inclusiva", resume la Campaña Panafricana y desarrolla argumentos históricos sólidos bajo una visión de un África unida y un panafricanismo renovado, alejado de las ideologías de otro tiempo, como las que pueden representar la RASD y Argelia. Destacando que la RASD no cuenta con las características necesarias para ser considerado como un Estado. 

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La RASD y su adscrito Frente Polisario son vistos por varios expertos como un elemento desestabilizador en el continente africano y pueden representar un símbolo que provoque el independentismo en otros países del entorno. 

Por su parte, Marruecos sigue defendiendo su fórmula de amplia autonomía del Sáhara Occidental bajo soberanía marroquí respetando las resoluciones de la Organización de Naciones Unidas con el objetivo de acabar con el conflicto saharaui que dura ya más de cuatro décadas. Una propuesta que cuenta con importantes apoyos en el concierto internacional, como los de Estados Unidos, Emiratos Árabes Unidos, Alemania o incluso España, la antigua metrópoli del territorio colonial del Sáhara en su día. Mientras, que el Frente Polisario cuenta con menos soportes, entre los que se encuentra el de Argelia, que rivaliza políticamente con Marruecos, país con el que llegó a cortar lazos diplomáticos en agosto de 2021 por las profundas diferencias políticas existentes. 

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