Marruecos tiene previsto hacerse con varios tanques Merkava, de fabricación israelí, que mejoran el equipamiento militar de las Fuerzas Armadas marroquíes. Un nuevo hecho que sigue demostrando la estrecha cooperación existente actualmente entre el reino marroquí e Israel, derivada del entendimiento que alcanzaron bajo el auspicio de Estados Unidos hace más de dos años.
El Estado marroquí y Chipre serán los receptores de este tipo de carro de combate que Israel ya había relegado a la reserva al haber incorporado el nuevo modelo de este blindado. Así, Jerusalén tiene previsto vender a Rabat tanques de este tipo después de retirarlos del servicio, como informó el medio El Español.
De esta forma, el reino marroquí prosigue con la potenciación de su equipamiento militar gracias a todo tipo de armamento que está adquiriendo procedente de países como Estados Unidos, Francia e Israel. En un intento de ponerse más al nivel del gran rival regional del Magreb, que es Argelia, país que cuenta con un poderoso Ejército. La nación marroquí sufre ante la posible amenaza argelina, sobre todo después de que el Estado dirigido por las Fuerzas Armadas, comandadas por Said Chengriha, y por el presidente Abdelmadjid Tebboune rompiese relaciones diplomáticas con el Reino en agosto de 2011 tras acusarle de “actos hostiles” y por diferencias políticas irreconciliables, sobre todo en lo referente a la cuestión del Sáhara Occidental.

A lo largo de los últimos años, Marruecos ha ido acumulando muchos apoyos en la esfera internacional. Sobre todo, después de que el pasado Gobierno estadounidense de Donald Trump reconociese la marroquinidad del Sáhara en diciembre de 2020 a cambio de que el reino marroquí estableciese vínculos políticos con Israel, siguiendo la estela de los Acuerdos de Abraham, sellados en septiembre de 2020, por los que importante países de la esfera árabe como Emiratos Árabes Unidos o Bahréin entablaron lazos diplomáticos con el Estado israelí con el objetivo de pacificar la región de Oriente Medio y propiciar su desarrollo social y económico de la zona.
Además de esto, Marruecos ha visto cómo diversas naciones han apoyado su iniciativa para el Sáhara Occidental, basada en una amplia autonomía del territorio bajo soberanía marroquí, al entenderla como la “más seria, creíble y realista” para arreglar el contencioso saharaui. Todo ello frente a la propuesta del Frente Polisario, que defiende la celebración de un referéndum de independencia entre la población saharaui que cuenta con menos soportes, entre los que se encuentra el del gran rival regional, Argelia.
Israel ya estuvo negociando la venta de unas 200 unidades de sus carros de combate Merkava Mk2, una versión con más 40 años de servicio, y requería el visto bueno de Estados Unidos debido a algunos componentes el vehículo blindado.

El Merkava es el carro de combate principal de las Fuerzas de Defensa de Israel. Desde principios de la década de 1980 se han puesto en uso cuatro versiones distintas. “Merkava” era el nombre por el que se conocía el proyecto desarrollado por el Ejército de Israel, siendo finalmente la denominación atribuida al carro de combate. Estos blindados fabricados en Israel llevan una década fuera de servicio, pero se han podido reacondicionar para su posible exportación, en este caso a Marruecos y Chipre.
Los prototipos de este modelo fueron construidos a partir de 1974, entrando en servicio el Merkava I, en 1979. Posteriormente, se desarrolló una versión con blindaje y visores mejorados, denominada Merkava II. Existen tres submodelos que difieren en el tipo de blindaje.

En 1989 apareció el Merkava III, equipado con un cañón de 120 mm y un motor de mayor potencia, así como con dirección de tiro y blindaje mejorados. La última versión, Merkava IV, fue equipada con nuevo motor y blindaje, siendo entregado a partir de 2004. En los modelos más recientes del Merkava IV se ha instalado un sistema de defensa activo que, mediante sensores situados en la torre, detecta la aproximación de misiles o granadas, activándose el lanzamiento de artefactos explosivos que destruyen dicha amenaza. Además, los últimos modelos poseen un rango largo de disparo alcanzando objetivos situados a distancias de hasta 8 kilómetros.