El ministro de Defensa chino visita Rusia y Bielorrusia con motivo de la XI Conferencia de Moscú sobre Seguridad Internacional

El Ministerio de Defensa chino anunció el lunes que su ministro Li Shangfu visitará Rusia y Bielorrusia del 14 al 19 de agosto. El titular de Defensa asistirá a una reunión sobre seguridad internacional, la XI Conferencia de Moscú sobre Seguridad Internacional, donde pronunciará un discurso y mantendrá conversaciones con sus homólogos de Defensa de Rusia y otros países.
“Li Shangfu viajará a Rusia del 14 al 19 de agosto para asistir a la XI Conferencia de Moscú sobre Seguridad Internacional y también visitará Bielorrusia”, declaró en un comunicado Wu Qian, portavoz del Ministerio de Defensa chino.

El representante chino de Defensa también visitará Bielorrusia, estrecho aliado de Rusia y refugio del grupo paramilitar ruso Wagner, para reunirse con su jefe de Estado, Alexander Lukashenko, sus Fuerzas Armadas y visitar instalaciones militares.
Según RTE, el principal diplomático chino, Wang Yi, habló por teléfono la semana pasada con el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Sergei Lavrov, y elogió la “cooperación práctica” entre ambos países. Al parecer, el diplomático chino dijo al ministro ruso que Pekín y Moscú “deben seguir manteniendo una estrecha coordinación estratégica, promover la multipolarización del mundo y la democratización de las relaciones internacionales”.
La XI Conferencia de Moscú sobre Seguridad Internacional, un foro para promover un mundo multipolar
Creada en 2012, la conferencia es considerada por el Ministerio de Defensa ruso como “una plataforma esencial para el debate abierto de las cuestiones de seguridad mundial y regional más apremiantes”. Afirma que, para su edición de 2023, “la conferencia se celebrará en un contexto de cambios fundamentales en la situación militar y política en el mundo, y de establecimiento y consolidación de un auténtico orden mundial multipolar”, en referencia a la guerra de Ucrania que asola el país desde el 24 de febrero de 2022.
La conferencia reunirá a los jefes y representantes de varias agencias de defensa, organizaciones internacionales y comunidades de expertos y politólogos para “intercambiar puntos de vista sobre el fortalecimiento de una cooperación constructiva en las nuevas realidades”.

La conferencia abordará cuestiones de estabilidad mundial y regional, así como diversos aspectos de la seguridad en Asia, África, Oriente Medio, América Latina y Europa. Se inaugurará con un seminario sobre “Las realidades de la seguridad global en un mundo multipolar”, una tendencia geopolítica importante tanto para las autoridades rusas como para las chinas.
Tanto a China como a Rusia les mueve el objetivo común de contrapesar a Occidente. Está previsto que el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Sergei Lavrov, pronuncie un discurso en la conferencia sobre el tema de “la búsqueda por parte de los países del mundo mayoritario de medios de desarrollo al margen de los mecanismos occidentales, incluido el fortalecimiento de asociaciones multilaterales de nuevo tipo”, según la agencia oficial rusa de noticias TASS.

La participación de Li Shangfu subraya la voluntad de China y Rusia de alinear sus políticas exteriores en un intento de socavar el orden mundial liberal-democrático liderado por Occidente, a pesar de los costes económicos y de reputación que ello implica, afirma Yahoo noticias. De hecho, conviene recordar que, aunque China ha pedido que se respete la integridad territorial de todos los países, nunca ha condenado explícitamente la invasión rusa y está considerando la posibilidad de desempeñar un papel mediador en el conflicto.
China acusa regularmente a Estados Unidos y a sus aliados de provocar a Rusia. Pekín ha apoyado a Rusia en varias ocasiones manteniendo fuertes lazos económicos, diplomáticos y comerciales con Moscú. Sin embargo, mantiene que no suministrará armas a ninguna de las partes beligerantes.
Sin embargo, el ministro de Defensa chino ya había visitado Rusia el pasado mes de abril para reafirmar las relaciones militares entre ambos países en las primeras conversaciones militares oficiales. Pekín y Moscú también organizaron una serie de ejercicios conjuntos, mientras que dos buques de guerra rusos visitaron China el mes pasado.
En cuanto a las relaciones chino-estadounidenses, el ministro de Defensa chino se ha negado a reunirse con sus homólogos estadounidenses hasta que Washington haya levantado las sanciones que le impuso por la adquisición de tecnología militar rusa. Ha evitado todo contacto con Lloyd Austin, secretario de Defensa estadounidense, especialmente en un reciente foro de seguridad celebrado en Singapur y negándose a responder a su llamada telefónica tras el derribo de un supuesto globo espía chino.