El ministro de Exteriores de Argelia exige a Rusia y Turquía que dejen de intervenir en Libia
Ahmed Attaf se reunió con la responsable de la misión de la ONU en Libia para discutir la crisis del Sahel

El ministro de Exteriores de Argelia, Ahmed Attaf, se mostró contundente al rechazar la presencia de actores extranjeros en Libia y acusó específicamente a Rusia y Turquía, tradicionales aliados de Argelia, de actuar en contra de los intereses de su país.
En unas declaraciones realizadas tras su reunión con la jefa en funciones de la Misión de Apoyo de las Naciones Unidas en Libia, Stephanie Khoury, Attaf escenificó el actual malestar reinante en Argelia contra sus otrora aliados por su intervención en Libia y abogó por una solución interna al conflicto libio. El ministro argelino pidió el fin de lo que describió como “las políticas, prácticas y acciones que alimentan y siembran la división, y profundizan la brecha entre los pueblos”.
Traición de Rusia y Turquía en Mali
Argelia considera que Turquía y Rusia no han tenido en cuenta sus intereses y formaron una alianza para apoyar a la junta militar en Mali después de que ésta abandonara el acuerdo de paz que patrocinó la propia Argelia en 2015.
Ello ha provocado el declive del peso de la diplomacia argelina en Mali y, por extensión, en el Sahel, hasta el punto de que no sólo se han visto afectados los intereses regionales de la propia Argelia, sino incluso su seguridad geográfica. El hecho de que el Grupo Wagner ruso esté apoyando a Bamako y que Turquía haya firmado acuerdos armamentísticos con Mali ha llevado el conflicto armado hasta las mismas puertas de Argelia.
De hecho, ya se han producido las primeras repercusiones para este país de la guerra en el norte de Mali: un reciente bombardeo aéreo con drones efectuado por el ejército de Mali contra la población civil en la región de Tin Zaouine provocó el desplazamiento de centenares de personas hacia el territorio de Argelia.
La crisis de Libia
Estas manifestaciones del ministro de Exteriores argelinos se produjeran en el marco de la reunión celebrada con la responsable en funciones de la misión de la ONU en Libia, Stephanie Khoury, que se encuentra de gira por la región, en la que ambos discutieron sobre el problema que representa la presencia de potencias militares como Rusia y Turquía, como base de retaguardia para expandirse dentro de la región del Sahel.

Para Attaf, la larga duración de la crisis de Libia, más de 13 años, se debe precisamente “al incremento, crecimiento y complejidad de las intervenciones extranjeras en los asuntos de este país hermano, y por tanto la clave para resolver esta crisis radica principalmente en excluir y poner fin a estas intervenciones, en todas sus formas, contenidos y objetivos”.
Respecto a la reunión con la representante de la ONU, el ministro de Exteriores argelino señaló que “ha sido una oportunidad para conocer los esfuerzos que están realizando las Naciones Unidas para hacer avanzar el proceso político y resolver la crisis libia, esfuerzos que Argelia apoya de forma total, ilimitada e incondicional, ya sea desde su posición como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas o desde sus posiciones en varios grupos y organizaciones regionales, en particular la Unión Africana”.
Para Argelia, la solución pasa por “la organización de elecciones libres y justas a través de las cuales el pueblo libio otorgue legitimidad a aquellos que considera más competentes y capaces de representarlo y defender sus intereses, y que den lugar a instituciones unificadas y fuertes, que sean capaces de disuadir y anular todos los efectos de la interferencia extranjera. Esto restauraría el prestigio y estatus natural y merecido de Libia a nivel regional e internacional”.

El papel de Argelia
Por su parte, la representante de la ONU, Stephanie Khoury, subrayó el importante papel que le corresponde a Argelia en esta crisis y aseguró que la conversación que mantuvo con Ahmed Attaf fue muy profunda y útil: “se discutieron objetivos comunes entre las Naciones Unidas y Argelia, que redundan en interés del pueblo libio para alcanzar un Estado libio unificado y sin divisiones, así como la estabilidad de toda la región”.