Senegal volvió a mostrar su decidido respaldo al plan de autonomía para el Sáhara Occidental planteado por Marruecos como la solución más apropiada para terminar con el conflicto político regional que dura ya más de cuatro décadas.
El país senegalés tomó parte en el Comité de los 24 de la Organización de Naciones Unidas (ONU) celebrado en Bali e indicó que el plan de autonomía marroquí sigue siendo el “marco apropiado” para resolver el diferendo regional saharaui. El representante senegalés presente en el cónclave manifestó que la propuesta del Reino presentada en 2007 respeta el derecho internacional y las resoluciones de Naciones Unidas. Precisamente, el Comité de los 24 es el principal órgano de las Naciones Unidas en materia de descolonización y en este se trató el asunto del Sáhara Occidental, cuyo problema sigue persistiendo más de cuatro décadas después de la salida de España de la zona como antigua potencia colonizadora.
Este movimiento político del país africano sigue la senda de otros apoyos de muchas e importantes naciones al plan autonómico marroquí como la alternativa más seria, creíble y realista para resolver la situación en el Sáhara Occidental.

El país norteafricano plantea una amplia autonomía del Sáhara Occidental bajo soberanía marroquí respetando los postulados y resoluciones de la ONU. La intención marroquí con sus denominadas Provincias del Sur es la de desarrollar la región política, social y económicamente a través de un plan estructurado de desarrollo en favor de la población de la zona.
En oposición a la propuesta del país norteafricano se sitúa la iniciativa del Frente Polisario, que defiende la celebración de un referéndum de independencia del pueblo saharaui, de difícil materialización por problemas de censo y otras cuestiones, según han apuntado diversos analistas, y que cuenta con un menor respaldo internacional, destacando en este caso el apoyo de Argelia, gran rival político de Marruecos en el Magreb, sobre todo a raíz de la decisión argelina de romper relaciones diplomáticas con su vecino al que acusaba de actos hostiles y debido también a diferencias políticas profundas en cuestiones como la del Sáhara Occidental.

Por otro lado, se cuestiona también el papel del Frente Polisario y su aliado argelino en cuanto al trato a los refugiados saharauis alojados en los campamentos establecidos en Argelia, como el de Tinduf. Las condiciones de vida allí son difíciles, como pudo constatar en recientes visitas Staffan de Mistura, enviado especial de la ONU para el Sáhara Occidental, quien recientemente también estableció conversaciones con las partes implicadas en el caso para acercar posturas y pasar un informe detallado al secretario general de la ONU, António Guterres. En abril, De Mistura llevó a cabo consultas informales bilaterales con representantes de Argelia, Mauritania y miembros del “Grupo de Amigos”, entre los que se encuentran España, Estados Unidos, Rusia, Reino Unido y Francia, es decir, con todas las partes que tienen algo que ver con la cuestión saharaui y trasladó sus impresiones a Guterres.
En relación con la figura de Staffan de Mistura, el representante senegalés ante el Comité de los 24 de la ONU destacó los esfuerzos del enviado de Naciones Unidas para el Sáhara Occidental por promover el diálogo político enquistado hasta el momento. Senegal sigue mostrando su apoyo a una solución política justa, duradera y mutuamente aceptable respetando las resoluciones de la ONU, como quedó de manifiesto.

El representante senegalés también elogió los “significativos” progresos llevados a cabo por Marruecos en el entorno del Sáhara Occidental con medidas de promoción social y económica. “Estos esfuerzos han terminado de convencer del deseo del Reino de Marruecos de resolver definitivamente esta disputa”, dijo, y señaló que, en apoyo a esta política, Senegal inauguró, el 5 de abril de 2021, su consulado general en Dajla, como recogió el medio Le Matin.
Diversas naciones, cerca de la treintena, pusieron de manifiesto su estrategia de abrir consulados en el entorno del Sáhara Occidental, en los enclaves de Dajla y El Aaiún, para promover el desarrollo territorial lo que demuestra el apoyo a Marruecos de cara a la cuestión saharaui.