Opinión

Trump se enfrenta a la justicia federal

PHOTO/FILE - Donald Trump

A Donald Trump, protagonista cotidiano de acusaciones y escándalos le ha llegado la hora más comprometida de rendir cuentas cuando se empeña en una nueva campaña electoral para recuperar el cargo. Los registros en su lujosa residencia de Florida – la más grande del Estado – han proporcionado pruebas suficientes del incumplimiento de las leyes de protección de secretos oficiales y confidenciales de su etapa de cuatro años como presidente de los Estados Unidos. A la vista de las pruebas encontradas, el Departamento de Justicia ha dado un paso adelante sin precedente en la historia, que es el procesamiento por primera vez de un expresidente por un delito federal.

La acusación enseguida recordó la frecuencia con que durante la campaña electoral que le llevó a la Casa Blanca acusó con argumentos falso a su competidora Hillary Clinton de revelar secretos oficiales sin pruebas y, en cualquier caso, de mucha menor importancia que los que ahora se demostrará que él incurrió y secuestró para ocultar con todas las agraves. En total son siete las acusaciones concretas que se le imputan avaladas por los documentos descubiertos en la mansión de ocho hectáreas de Mar-a-Lago. Entre otros aparecen cartas inéditas y confidenciales con el líder de Corea del Norte Kim Jon Un con el que llegó a reunirse ante le general sorpresa de la diplomacia internacional y sin resultado alguno.

El resto se trata de informes sobre cuestiones de defensa, con secretos importantes y declaraciones falsas, así como informes igualmente secretos sobre la administración de la Justicia. Algunos documentos e informes que reproduce como intervenciones propias están demostrado que fueron falsas. El martes tendrá que comparecer ante el tribunal Federal en Miami para ser informado oficialmente de las acusaciones que se le imputan. Su abogado se ha apresurado a afirmar que el expresidente es inocente de todo cuanto se le acusa. Pero las pruebas que revelan los principales periódicos norteamericanos son irrefutables.

Ante estas revelaciones y su esperada comparecencia del martes se esperará al juicio federal a que será sometido dentro de unas semanas y, en el caso de ser declarado culpable, condenado a varios años de prisión. Sería un récord en la historia de los cuarenta y seis presidentes que han tenido los Estados Unidos. Él, sin embargo, ha reaccionado ratificando que este nuevo escándalo, y previsible condena, no frenará su campaña para participar el año próximo a las elecciones para recuperar el mandato que con el respaldo de sus fans intenta vengarse del fraude que estima que en las pasadas le fue robada la Presidencia, algo que en ningún caso fue probado ni en los recuentos no en las denuncias ante los tribunales.