El apoyo al desarrollo de las pequeñas empresas

¿En qué ámbitos se enfrentaron las pequeñas y medianas empresas (PYME) a los retos más acuciantes relacionados con la pandemia, y cómo se mitigaron esos problemas?
La pandemia creó un nivel de perturbación e incertidumbre sin precedentes para las PYMES, especialmente durante el segundo y tercer trimestre de 2020, y muchas tuvieron que cesar completamente sus operaciones durante un largo periodo de tiempo. Ante las dificultades de tesorería, muchas PYMES corrieron el riesgo de cerrar, ya que suelen ser más vulnerables a las tensiones financieras a corto plazo que las grandes empresas.
Para ayudar a las empresas y a los particulares a hacer frente a los múltiples retos derivados de la pandemia, el Fondo Nacional de Desarrollo destinó 22.000 millones de SR (5.900 millones de dólares), de los cuales 12.000 millones de SR (3.200 millones de dólares) se asignaron al BDS. Esto nos permitió duplicar nuestro capital para préstamos sociales en apoyo de las familias en dificultades -algunas de las cuales vieron sus ingresos cortados o reducidos de la noche a la mañana-, así como aumentar los préstamos a las empresas de 1.000 millones de SR (266,6 millones de dólares) a 1.700 millones de SR (452,2 millones de dólares), dirigidos a más de 9.000 PYME. Aunque estas facilidades financieras se dirigían sobre todo a las microempresas y a las PYME bien establecidas, decidimos ampliarlas a las empresas de nueva creación, siempre que el capital se utilizara para suministrar servicios y bienes necesarios para la lucha contra la pandemia, como la logística y la distribución de alimentos.
Además, se introdujeron aplazamientos de los reembolsos de los préstamos por parte del sector bancario, lo que benefició a más de 12.000 clientes de la SDB.
Dado que las PYME son un pilar de la Visión Saudí 2030, el presupuesto público ha ampliado el mismo nivel de apoyo financiero a las PYME y a los segmentos vulnerables hasta 2021. En este sentido, los bancos públicos tendrán una importante responsabilidad para garantizar la sostenibilidad financiera. En el caso del SDB, su independencia operativa -concedida en 2019- refuerza la responsabilidad e incentiva la disciplina financiera para gestionar los gastos operativos y mantener un balance saneado.

¿Cuál es el papel del segmento de las microempresas en el desarrollo económico de Arabia Saudí y cómo se apoya a este segmento?
Las microempresas son un segmento del tejido económico que a menudo se pasa por alto, a pesar de que genera un impacto social notablemente positivo, sobre todo en relación con el empoderamiento económico de las mujeres. Sin embargo, Arabia Saudí está prestando cada vez más atención a este segmento, con 200 millones de SR (53,3 millones de dólares) presupuestados para 2020 y aproximadamente la misma cantidad para 2021.
En 2020, el SDB había proporcionado con éxito apoyo financiero a más de 100.000 microempresas, en parte gracias a la aplicación del modelo de vértice. Este modelo se basa en el empoderamiento de las ONG locales para canalizar los fondos y dio lugar a que la SDB formara a unas 140 organizaciones benéficas sobre cómo identificar y evaluar a los posibles beneficiarios, así como para desembolsar los pagos y gestionar el cobro de las deudas. Cabe señalar que la proporción de préstamos morosos en este segmento es inferior al 3%. Más allá del apoyo financiero, también se han añadido una serie de programas no financieros para facilitar la mejora de las microempresas en términos de calidad de producción y acceso al mercado.

¿Cómo está evolucionando la financiación social en Arabia Saudí y en qué medida se refleja esta evolución en los resultados y la estrategia del SDB?
Cuando el gobierno saudí creó el SDB y los primeros fondos sociales a principios de los años 70, el objetivo era apoyar directamente a las familias mejorando su nivel económico mediante préstamos sociales, a veces a coste cero. Este enfoque se mantuvo durante cuatro décadas. Sin embargo, en la última década se ha puesto más énfasis en los préstamos para ayudar a los individuos a establecer y desarrollar sus negocios con el fin de lograr la autosuficiencia. Como resultado, en 2020 el SDB alcanzó un hito: por primera vez el valor de los préstamos orientados a las empresas fue superior al de los préstamos sociales.
Más allá del peso relativo de nuestra cartera, los esfuerzos se dirigen a estimular el crecimiento del segmento de las PYMES en general, dando prioridad a las empresas que añaden valor a las relaciones entre empresas, articulando cadenas de valor y creando empleo de calidad en sectores de gran potencial. Este enfoque ha dado resultados positivos, fomentando el crecimiento orgánico de base en sectores como la generación de energía solar, con el éxito de Medina como ejemplo. Esto está marcando el camino para que el SDB amplíe su oferta de préstamos orientados a las empresas y el apoyo a las microempresas en los próximos años.