Argel decide retirar a su embajador en París

Se trataba de una reacción esperada, cuyo anticipo fue dado el 25 de julio por un comunicado del Ministerio argelino de Asuntos Exteriores, mucho antes de que París anunciara oficialmente su reconocimiento de la soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental.
“El Gobierno francés ha dado finalmente su apoyo franco y categórico al hecho colonial impuesto sobre el Sáhara Occidental. El Gobierno actual ha dado este paso, que ningún otro Gobierno francés anterior sintió que debía dar, muy a la ligera y muy a la ligera, sin medir lúcidamente todas las repercusiones potenciales”, añade la misma fuente.
"Al reconocer el plan de autonomía marroquí como única base para resolver el conflicto del Sáhara Occidental en el marco de la supuesta soberanía de Marruecos, el Gobierno francés se burla de la legalidad internacional, asumiendo la causa de la negación del derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación, se aleja de todos los pacientes y perseverantes esfuerzos realizados por Naciones Unidas para completar la descolonización del Sáhara Occidental, y abdica de las responsabilidades particulares que debe asumir, en toda circunstancia, como miembro permanente del Consejo de Seguridad”, subraya el comunicado del Gobierno argelino.
Francia no es el único país que ha reconocido la soberanía marroquí sobre su Sáhara. Mucho antes, varios países, entre ellos las monarquías árabes del Golfo, lo hicieron sin que Argel moviera un dedo. Del mismo modo, Estados Unidos, al final del mandato de Donald Trump, la misma decisión no suscitó ninguna reacción por parte de Argel. El embajador estadounidense en Argel reiteró esta decisión hace apenas unos días en una entrevista concedida a un sitio web de noticias argelino. Dos días después, asistió a una reunión entre el general Langley y el comandante del AFRICOM, el presidente Tebboune y su jefe de Estado Mayor del Ejército, el general Chengriha, sin que ambos se atrevieran a pedirle la menor explicación.

Argel, que invoca una posición de principios, demuestra su incoherencia al utilizar un doble rasero a conveniencia del cliente. Nunca se ha retirado a ningún embajador por reconocer la soberanía marroquí sobre el Sáhara, salvo en el caso de España.
Fue en marzo de 2022 cuando Argelia decidió retirar a su embajador en Madrid “para consultas, con efecto inmediato”, tras “las declaraciones de las más altas autoridades españolas sobre la cuestión del Sáhara”.
Sin embargo, con París, retirar al embajador argelino en Francia se ha convertido en una práctica habitual. Es la tercera vez desde que el dúo Tebboune-Chengriha llegó al poder que Argelia retira a su embajador en París.
La primera vez fue en octubre de 2021. Argelia justifica esta retirada por su “rechazo a cualquier injerencia en sus asuntos internos”. Su decisión se produce tras las “declaraciones atribuidas” al presidente francés, Emmanuel Macron, sobre el poder argelino y la historia de Argelia.
Argelia ha expresado su “rechazo categórico a la injerencia inaceptable en sus asuntos internos que constituyen dichas declaraciones”, ha dicho la Presidencia argelina, refiriéndose a una “situación particularmente inaceptable creada por estos comentarios irresponsables”.
La decisión de retirar al embajador fue seguida unos días más tarde por la decisión de Argel de prohibir a los aviones militares franceses sobrevolar su territorio.

En julio de 2020, en un momento en que las relaciones apenas habían empezado a entibiarse, Argel volvió a llamar a consultas a su embajador en Francia para protestar contra la “exfiltración ilegal”, vía Túnez, de la activista franco-argelina Amira Bouraoui. En una nota oficial, el presidente argelino, Abdelmadjid Tebboune, “ordenó la llamada a consultas del embajador, Saïd Moussi, con efecto inmediato”.
Cada vez que Argel retira a su embajador, París apenas reacciona y no hace ningún comentario sobre decisiones que se olvidan al cabo de unos meses. Lo mismo ocurrirá sin duda esta vez, ya que es inimaginable que el gobierno francés dé marcha atrás en su decisión.