Argelia repara la relación diplomática con España
Argelia ha tomado la determinación de enviar un nuevo embajador a España, según información del medio El Confidencial, restableciendo la relación diplomática plena entre el país norteafricano y el europeo después de 19 meses de distanciamiento originado por el respaldo del Gobierno español a la propuesta de Marruecos para el Sáhara Occidental, que ha considerado como la “más seria, creíble y realista” para solventar el diferendo saharaui.
De esta forma, Argelia habría dado por terminada la crisis diplomática que estaba abierta desde el apoyo español al plan de Marruecos para el Sáhara Occidental, el cual ha recibido el respaldo de muchos e importantes países, como Estados Unidos, Israel, Emiratos Árabes Unidos, Alemania o incluso la propia España.
Marruecos plantea para una fórmula de amplia autonomía para el Sáhara Occidental bajo soberanía marroquí respetando las resoluciones de la Organización de Naciones Unidas (ONU) con el objetivo de desarrollar al máximo la región en todos los ámbitos, como el económico, social, administrativo, político, etc.
Frente a esta propuesta, está la del Frente Polisario, organización que aboga por la celebración de un referéndum de independencia de la población saharaui, de difícil materialización, según diversos analistas, y que cuenta con menos apoyos internacionales, entre los que se encuentra el de Argelia, gran rival político de Marruecos, país con el que cortó relaciones diplomáticas en agosto de 2021 tras acusar al reino marroquí de “actos hostiles”, todo ello a pesar de la mano tendida que ha venido ofreciendo en los últimos años el rey Mohamed VI de cara a que exista un buen vínculo entre los dos vecinos del Magreb.
Desde Argelia se criticó el apoyo del Ejecutivo de Pedro Sánchez a través de la carta enviada al rey Mohamed VI, en la que se expresaba el apoyo español a la opción marroquí para el Sáhara Occidental, ya que suponía un contratiempo político importante para el régimen argelino.
A partir de ese momento, llegaron las tiranteces políticas y otros problemas vinculados a la esfera económica como el relacionado con el suministro de gas argelino a España, que la nación española tuvo que suplir en parte a través de otros canales de aprovisionamiento tras los impedimentos habidos con el gas argelino a cuenta del conflicto político desatado, o también el veto argelino a las exportaciones españolas.
Precisamente, en marzo de 2022, el presidente argelino, Abdelmadjid Tebboune, ordenó la llamada a consultas de Said Moussi, su embajador en España, y emitió un duro comunicado. “La actitud del Gobierno español viola la legalidad internacional que le impone su estatuto de potencia administradora y los esfuerzos de Naciones Unidas (...) y contribuye directamente al deterioro de la situación en el Sáhara Occidental y en la región”, según se manifestó desde el Estado argelino.
Ahora, según la información del medio El Confidencial, el Gobierno argelino se dispone a enviar un nuevo embajador a España. Se especula con el nombre de Abdel Fattah Daghmoum, un exministro consejero que ya estuvo destinado en Madrid.
La vuelta a la normalidad diplomática entre Argelia y España supondría la estabilidad política entre ambas naciones y recuperar una relación económica deseable y estable con la normalidad en el suministro del gas y el fin progresivo del veto a las exportaciones españolas.
