El Ejército de Estados Unidos comienza la construcción de un muelle portuario frente a Gaza

La guerra de Gaza entre Israel y Hamás continúa. Las operaciones de las Fuerzas Armadas israelíes en la Franja prosiguen en respuesta al terrible ataque sufrido el pasado 7 de octubre cuando la organización extremista palestina de Hamás lanzó una ofensiva en territorio israelí que dejó en torno a 1.200 muertos.
El ataque militar israelí en la franja de Gaza ha dejado ya decenas de miles de víctimas, con el objetivo ahora claro del enclave de Rafah, como ha planeado el gabinete de guerra del primer ministro Benjamín Netanyahu.
Mientras, la mediación internacional sigue su curso para detener la barbarie y para que haya un cese de las hostilidades. Estados Unidos, Qatar y Egipto han sido principalmente los países que durante estas semanas han mediado entre las partes, de manera infructuosa de momento.
En este punto, el Ejército de Estados Unidos sí ha iniciado la construcción de un muelle portuario frente a la costa de Gaza con el objetivo de facilitar el tránsito de ayuda humanitaria. Una ayuda que, en cualquier caso, será inspeccionada por los destacamentos israelíes en tierra.

La ayuda humanitaria que salga del muelle deberá pasar por los puestos de control israelíes en tierra, a pesar de que Israel ya había inspeccionado la ayuda internacional en Chipre antes de enviarla a Gaza.
De esta forma, las tropas estadounidenses han comenzado la construcción de un muelle marítimo frente a la costa de Gaza que tiene como objetivo acelerar el flujo de ayuda humanitaria hacia el enclave cuando entre en funcionamiento en mayo, según confirmó el propio Pentágono. “Puedo confirmar que los buques militares estadounidenses, incluido el USS Benavidez, han comenzado a construir las etapas iniciales del muelle temporal y la calzada en el mar”, según explicó el portavoz del Pentágono, el mayor general Patrick Ryder.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció en marzo que se desarrollaría esta infraestructura, mientras activistas involucrados en la ayuda internacional instaban a Israel a que facilitase el acceso de suministros a Gaza por rutas terrestres.
No está claro si este muelle portuario permitirá un impulso para la llegada de ayuda humanitaria a Gaza, una zona que está pasando por condiciones difíciles de falta de víveres y recursos de todo tipo tras la intervención militar israelí. Desde la Organización de Naciones Unidas (ONU) y otras instituciones internacionales se ha alertado sobre la alerta humanitaria y el riesgo serio de hambruna para gran parte de la población gazatí, que cuenta con 2,3 millones de habitantes y que sufre las consecuencias de la guerra entre Israel y Hamás.
Un alto funcionario de la Administración estadounidense ha señalado que la ayuda humanitaria que salga del muelle deberá pasar por los puntos de control israelíes en tierra; esto a pesar de que Israel ya había inspeccionado la ayuda en Chipre antes de enviarla a Gaza, como informaron diversos medios como Arab News.

Lo que Israel quiere evitar a toda costa es que todos estos recursos lleguen a unidades armadas del grupo palestino extremista de Hamás y que sirvan para ayudarles en el conflicto bélico que les enfrenta a las Fuerzas de Defensa de Israel.
Este control previo podría provocar retrasos en la llegada de la ayuda, mientras la comunidad internacional sigue pidiendo a Israel que no ponga obstáculos a la llegada de suministros a la franja de Gaza.
En cualquier caso, Washington ha confirmado que no habrá soldados norteamericanos en suelo gazatí, lo cual supone un alivio ante la escalada de tensión en la zona.
Inicialmente, el muelle manejará 90 camiones por día, pero ese número podría aumentar a 150 camiones diarios cuando esté en pleno funcionamiento.
La misma fuente de la Administración Biden indicó que unos 1.000 soldados estadounidenses apoyarían el esfuerzo, incluso en unidades de coordinación en Chipre e Israel.