Estados Unidos, que actúa como mediador, mantendrá contactos bilaterales con ambos países

Las negociaciones sobre las fronteras marítimas entre el Líbano e Israel quedan aplazadas

REUTERS/AZIZ TAHER - Un barco de las Naciones Unidas cerca de la frontera libanesa e israelí

La próxima ronda de negociaciones entre el Líbano e Israel sobre la limitación de las fronteras marítimas entre ambos países, programada para este miércoles, ha sido pospuesta hasta nuevo aviso. Una fuente de seguridad libanesa ha confirmado que la razón del retraso era el rechazo por parte de Israel de sus propuestas.

Sin embargo, el pasado noviembre, Israel acusó en varias ocasiones al Líbano de haber cambiado su posición sobre la limitación de la frontera marítima en demasiadas ocasiones. El aplazamiento de estas conversaciones, por tanto, no supone ninguna sorpresa después de que Israel ya avisará sobre el continuo cambio de postura por parte de este país.

La cuarta ronda de conversaciones entre ambos países estaba prevista para el miércoles 2 de diciembre. El Ministro de Energía israelí, Yuval Steinitz, ha declarado que han llegado a un acuerdo con los mediadores estadounidenses para aplazar las conversaciones unas semanas.

Durante este tiempo y hasta que se conozca la próxima fecha para la celebración de la siguiente ronda, Estados Unidos, que actúa como mediador, mantendrá contactos bilaterales con ambos países.

Por su parte, Steinitz, en una entrevista con la Radio del Ejército israelí la semana pasada, dijo que no había habido ningún avance después de cuatro rondas de conversaciones y que el Líbano "hasta ahora ha presentado posiciones que se suman a una provocación".

Las negociaciones comenzaron en Octubre, con ambas delegaciones reunidas en una base de la ONU, con el objetivo de resolver una controversia sobre sus fronteras marítimas y  que ha retrasado la exploración de hidrocarburos en una zona potencialmente rica en gas. La zona en disputa se trata de un área de 860 kilómetros cuadrados y que según ambos países se sitúan en sus respectivas Zonas Económicas Exclusivas.

Israel y el Líbano están oficialmente en guerra y han roto todos los lazos diplomáticos. La frontera terrestre ha sido un escenario de conflicto durante el último tiempo. Ambos países llevan meses negociando sobre la superficie que corresponde a cada uno. El Líbano exige 1.430 kilómetros cuadrados (552 millas cuadradas) adicionales más al sur, que incluye parte del yacimiento de gas de Karish de Israel, según la experta en energía libanesa Laury Haytayan.

Atalayar_ conflicto Israel Libano

Las negociaciones fueron calificadas de “históricas” por el secretario de Estado estadounidense Mike Pompeo. Sin embargo desde un inicio, tanto funcionarios libaneses como israelíes han restado importancia a cualquier esperanza de que estas conversaciones puedan ser el comienzo de un proceso de paz o una normalización de las relaciones entre los dos países. 

Estas rondas se enmarcan dentro del contexto de los acuerdos de normalización de las relaciones entre Israel firmados por los Emiratos Arabes Unidos y Bahréin, además del recrudecimiento de la situación en el mediterráneo oriental, sobre los hidrocarburos y el límite de las fronteras marítimas, entre Turquía, Grecia y Chipre.

La salida de Trump de la presidencia de Estados Unidos supone una cuenta atrás para conseguir estos acuerdos de “normalización” de la relación del Líbano e Israel, que supondría una nueva victoria en el ámbito de la política exterior de su Administración. Pero ni Israel ni el Líbano se lo están poniendo nada fácil a Estados Unidos para salir victorioso de esta situación. La llegada de Biden podría suponer la retirada del país como mediador en este conflicto y dejarlo en manos de la ONU. 

Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato