La salud como tema central en Marruecos y África
Marrakech ha acogido la II Conferencia Africana sobre Reducción de Riesgos Sanitarios con el objetivo de promover en Marruecos y en África en general la mejora de la prevención de riesgos que puedan afectar a la salud y al medio ambiente.
Bajo el patrocinio del rey de Marruecos Mohamed VI, responsables administrativos, expertos, políticos y profesionales de África y de otros continentes han tomado parte en este encuentro organizado por African Global Health y el Gobierno marroquí, que ha estado encaminado a evitar en la medida de lo posible todo riesgo que amenace la salud general.
El objetivo era reflexionar sobre los aspectos de la salud en conceptos amplios de políticas de salud pública, pero también construir los pilares de la salud en el futuro, repensando la salud en sus aspectos orgánicos, psicológicos, económicos, sociales y medioambientales, trabajando conjuntamente por una salud africana común a través también de la cultura, la educación y la enseñanza. Los puntos clave sobre los que ha girado la cita han sido la salud en África con referencia especial al suministro y gestión del agua, el medio ambiente y la seguridad alimentaria.
El ministro de Sanidad de Marruecos, Khaled Ait Taleb, ha participado activamente en este cónclave y Atalayar tuvo la ocasión de hablar con él para analizar lo debatido en esta II Conferencia Africana sobre Reducción de Riesgos Sanitarios.
Es muy importante la celebración de esta conferencia, los temas tratados para evitar los riesgos sanitarios con una política que Marruecos está llevando adelante en cuanto a mejorar los alimentos, el tratamiento de agua… Algo fundamental para reducir los riesgos sanitarios.
Marruecos ya ha demostrado en el pasado, gracias a la dirección de Su Majestad el Rey Mohamed VI, que ha dado muestras de resiliencia cuando se trata de gestionar catástrofes y crisis sanitarias. Hoy en día, el agua es una cuestión para la que estamos buscando soluciones. No es un problema exclusivo de Marruecos; es un problema mundial, por supuesto.
Pero, sin embargo, con lo que estamos haciendo actualmente en política de agua, como comunicación, puesta en marcha y diseño de plantas desalinizadoras para 2025, habrá autonomía y, por supuesto, tendrá un impacto positivo en la salud y por eso hablamos de reducción de riesgos.
Pero no se trata de ir al tratamiento, se trata de intentar solucionar problemas de infraestructuras que tienen un impacto directo en la salud y que podrían tener consecuencias fatales más adelante.
En primer lugar, Marruecos. En segundo lugar, no se trata sólo de Marruecos, porque estamos hablando del continente africano, y ustedes saben muy bien que la gestión de Su Majestad de la crisis de la COVID-19 fue anticipatoria y proactiva. Fuimos los primeros en vacunar, y contuvimos la enfermedad. Pero hubo un problema de diplomacia de la vacuna, la vacuna no se distribuyó equitativamente.
La cuestión central hoy es: ¿podemos seguir yendo a remolque en el continente africano? No, el continente africano debe confiar en el continente africano, y confiar sólo en el continente africano. Por supuesto, en colaboración con los demás continentes, necesitamos investigación, necesitamos tecnología, pero al menos el potencial de África debe destacarse en la convergencia más que en la acción.
Marruecos está jugando un papel de liderazgo en este terreno para el continente africano.
Su Majestad, en su política exterior desde el principio, nunca ha dejado de hablar del potencial de África. Y hoy es una oportunidad de oro. ¿Y por qué? Porque la salud se ha convertido en un tema central. Ha dejado de ser un problema porque en todos los países del mundo la sanidad se considera el pariente pobre de los demás sectores.
Y se pueden imaginar que incluso los países que son económicamente fuertes durante la COVID con empatía encontraron dificultades. No basta con ser muy rico para ser excelente en salud, porque hay algunos retos importantes, hoy en día, con el progreso tecnológico, la industrialización, y, por supuesto, los productos farmacéuticos; la industria farmacéutica está cambiando con la introducción de lo que se conoce como genómica y metabolómica. El gasto sanitario va a aumentar drásticamente, y ningún sistema de seguro de enfermedad puede soportarlo, así que tenemos que recurrir a la reducción de riesgos para intentar minimizar y evitar lo que es evitable.
Uno de esos países fue España. Ahí, la colaboración con España, con la Unión Europea en este terreno es fundamental. ¿Están ustedes satisfechos? ¿Debería incrementarse?
En cuanto a la colaboración, estoy muy contento de la cooperación con España. Estuve en España durante la COVID y tratamos de explorar vías de colaboración, especialmente en el campo de la investigación y el desarrollo, porque lo importante hoy en día en el ámbito de la salud es esencialmente la investigación y el desarrollo para tratar de encontrar la solución mejor adaptada a los distintos problemas.
Estamos viendo con mucha alegría que Marruecos, Marrakech, está recuperada, la ciudad ha podido acoger este congreso. Dentro de 15 días el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial estarán presentes. Marrakech está funcionando casi a pleno rendimiento, ¿no?
Me alegro de que estén aquí también, para enviar una señal muy clara de que somos un país resistente. Hay vulnerabilidad en todo el mundo, pero no debemos ceder ante ella. Debemos ser lo bastante dinámicos para intentar salir de las distintas crisis. Y me complace que esta conferencia haya podido tener éxito, con más de 80 países presentes para apoyar a Marruecos, que es, por supuesto, el mejor apoyo que podemos dar hoy al país.
