Dbeibé, en una entrevista ofrecida a la cadena libia Al-Ahrar TV, ha mostrado su intención de presentar un nuevo proyecto de ley a la Cámara de Representantes de Libia. Una vez aprobado, va a ser transferido al Consejo Presidencial para proceder a su ratificación.
La ley electoral pretende resolver la grave crisis política y económica que sufre el país africano desde 2011. Año en el que miles de ciudadanos salieron a las calles para manifestarse contra el régimen dictatorial de Gadafi. Este levantamiento estuvo respaldado por la OTAN y acabó con el estallido de una dura guerra civil.
El primer ministro dio estas declaraciones un día después de sobrevivir a un intento de asesinato. El incidente tuvo lugar el pasado jueves cuando Dbeibé se dirigía a su casa en el centro de Trípoli. Algunos medios árabes difundieron imágenes en las que se aprecian los daños provocados en el vehículo en el que viajaba el líder libio.

Las divisiones políticas se han agudizado después de que la Cámara de Representantes nombrara a Fathi Bashagha como nuevo primer ministro interino. Esta decisión no ha sido bien recibida por Dbeibé, quien defiende que “la selección de un nuevo Gobierno por parte del Parlamento es otro intento de entrar en Trípoli por la fuerza”.
A su vez, defiende que solo va a ceder sus competencias a un candidato elegido de forma democrática por los ciudadanos. El Parlamento libio, aparte de Bashagha, también preseleccionó a Khaled al-Bibas como aspirante para ocupar el cargo de primer ministro. Ambos cuentan con una larga trayectoria profesional. Bashagha fue ministro del Interior entre 2018 y 2020, y Al-Bibas fue presidente de una importante empresa tecnológica libia.
El nombramiento de Bashagha ha estado rodeado de polémica. Al-Bibas ha acusado a Aqila Saleh, líder del Parlamento, de mentir y manipular a los disputados, ya que su candidatura fue supuestamente retirada justo antes de celebrar la votación. Abdullah Bliheg, portavoz de la Cámara de Representantes, aseguró que esta designación ha contado “con el consentimiento unánime de los presentes”.

Ambos candidatos formularon los principales objetivos de sus programas políticos ante la Cámara de Representantes. Este organismo también busca crear un comité encargado de la formación de la Carta Magna y de una ley electoral firme. Fuentes cercanas a Bashagha han desvelado que el Ejecutivo pasará a denominarse Gobierno de Solidaridad Nacional (GNS).
Dbeibé se mantiene firme en su idea de no apoyar el surgimiento de nuevas etapas en el proceso de transición. Tampoco va a permitir la creación de una autoridad paralela y sigue acusando a Saleh de intentar dividir nuevamente el país al dar por finalizado su mandato.
En marzo de 2021, Libia consiguió configurar un Gobierno de unidad tras un largo proceso de conversaciones tras la contienda protagonizada por el bando del Gobierno de Acuerdo Nacional de Fayez al-Sarraj y el Ejército Nacional de Libia dirigido por el mariscal Jalifa Haftar. Lo que se pretendía era unificar las administraciones enfrentadas, una, la de Al-Sarraj radicada en Trípoli, y otra, la de Haftar apoyada en el Gobierno oriental de Tobruk, que llevaron a cabo una guerra civil durante varios años.

Los planes para encontrar un acuerdo se vieron minados, pero el Ejecutivo supo recomponerse ante este acontecimiento. El Foro de Diálogo Político Libio (FDPL) y la ONU confiaron a Dbeibé la tarea de acabar con los enfrentamientos que estaban asolando el territorio.
El líder político iba a ejercer como primer ministro de forma provisional hasta que se celebrasen las elecciones en diciembre de 2021. Sin embargo, estas votaciones no se llevaron a cabo ya que la Alta Comisión Electoral Nacional (HNEC) tomó la decisión de aplazarlas debido a las diferencias existentes entre los poderes político y judicial.
El temor estriba ahora en la posibilidad de que surjan nuevos enfrentamientos entre partidarios de Dbeibé y el Parlamento. El deseo de cambio por parte de los ciudadanos libios es más que evidente y lo único que quieren es un Gobierno que asegure la recuperación de su país.