El territorio palestino ha detectado 1.427 casos nuevos en 24 horas

Cisjordania, a la espera de la vacuna, experimenta un aumento en el número de contagios

REUTERS/MUSSA QAWASMA - Trabajadores palestinos se dirigen a trabajar en Israel a través de un puesto de control en medio de la preocupación por la propagación de la COVID-19 cerca de Hebrón, en la Cisjordania ocupada

A comienzos de este mes la Autoridad Palestina ponía en marcha la campaña de vacunación. Esta comenzó tras la llegada de 2.000 dosis de Moderna, según confirmaba la ministra de Sanidad palestina, Mai al-Kaila.

La ministra de Salud no mencionó procedencia de dichas vacunas. No obstante, el ministerio de Defensa de Israel había informado previamente de la transferencia de 2.000 dosis para los sanitarios palestinos a través del puesto de control de la localidad de Beitunia, ubicada al sur de Ramala, así como de otras 3.000 dosis que serán transferidas en el futuro.

Asimismo, varias organizaciones en defensa de los Derechos Humanos han criticado con dureza al Ejecutivo israelí por su negativa a facilitar el fármaco a los habitantes de los territorios que ocupa. Por su parte el Ejecutivo israelí se escuda en el hecho de que corresponde a la Autoridad Palestina la supervisión de la salud pública bajo los principios de autodeterminación, según los Acuerdos de Oslo.

Atalayar_Vacunacion palestina

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha anunciado que la Autoridad Palestina recibiría 37.440 dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech para mediados de febrero, tras alcanzar un acuerdo con los fabricantes. La OMS agregó que recibirían entre 240.000 y 405.600 dosis adicionales de la vacuna de AstraZeneca entre mediados y finales de febrero, así como otras 5.000 dosis de la vacuna rusa Sputnik V y de otras 37.000 entregadas a través del mecanismo COVAX.

En este contexto, Cisjordania está experimentando un nuevo pico de contagios consecuencia de la COVID-19, que está tensionando aún más su sistema hospitalario. El territorio palestino de Cisjordania ocupada, con unos tres millones de habitantes, ha detectado 1.427 casos nuevos en 24 horas, una cifra que sigue la tendencia al alza de los últimos días, lo que ha provocado que el ministerio de Sanidad recomiende imponer un cierre general de dos semanas.

La ministra de Sanidad, Mai al Kaila, alertó que los hospitales "se están quedando sin capacidad", las salas de cuidados intensivos están saturadas y un 85 % de camas disponibles se encuentran ocupadas, lo que genera una situación "extremadamente preocupante”. 

Atalayar_trabajador sanitario palestino

A esta situación se suma el retraso en la llegada de importantes cargamentos de vacunas. Hasta ahora, la Autoridad Nacional Palestina (ANP) solo recibió 2.000 de 5.000 dosis para vacunar a sanitarios por parte de Israel, y 10.000 de Sputnik V donadas por Rusia. A lo que se suma que Israel ha congelado la distribución de vacunas contra el coronavirus a países aliados, debido a que las autoridades deben examinar primero si esa decisión corresponde al primer ministro.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, había anunciado el envío de una "cantidad limitada" de vacunas no utilizadas a los palestinos y a otros países como Honduras, Guatemala, República Checa y Hungría.

Desde el inicio de la pandemia, los territorios palestinos (Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este, con más de 5 millones de habitantes) han registrado unos 203.000 casos y 2.216 fallecidos por COVID-19.