El Manchester City y el Al-Ahly, nuevos campeones de Europa y África

Un gol de Rodrigo, el canterano del Atlético de Madrid que apenas jugó una temporada con el club rojiblanco, le dio al City su primera Champions ante el Inter de Milán en el estadio Atatürk de Estambul.
Los ingleses toman el relevo del Real Madrid en Europa, aunque Pep Guardiola ya daba por amortizada su presencia en el torneo tras el partido de vuelta en el que golearon a los blancos en el Ettihad.
En 2008, el fondo Abu Dhabi United Group compró el club inglés al ex primer ministro de Tailandia y empezó una larga carrera por reinar en el Viejo Continente que ha culminado en 2023 después de 1.230 millones de euros en fichajes solo en las últimas cinco temporadas con Pep Guardiola en el banquillo.

El técnico español fue contratado más como un asesor que como un entrenador. Llevó a Manchester a gente de confianza que había conocido en su época triunfal en Barcelona. Ferran Soriano, Rodolfo Borrell, Beguiristáin, Estiarte, Vicens o el preparador físico Lorenzo Buenaventura son los artífices de volver a reinar en la Premier con cinco ligas y 14 títulos en total contando con la Champions de 2023 que, por cierto, nunca fue un gran objetivo como se ha encargado de repetir siempre el técnico español. Siempre han luchado por la Premier y por ser grandes en Inglaterra antes que fuera.
La final no fue un gran partido. El Inter aguantó mucho más de lo que se esperaban los agoreros que veían una goleada clara de los ingleses. Lukaku tuvo una de las grandes ocasiones en los minutos finales para empatar el partido, pero Ederson se encontró el balón bajo la línea.
El único gol lo anotó Rodri. El que fuera central en los tiempos de Luis Enrique como seleccionador español, pasó al centro del campo del City para controlar el fútbol de Guardiola y rendir a un altísimo nivel.
Su disparo preciso desde la frontal del área culminó un proyecto que se veía abocado a una nueva derrota como la de 2020 ante el Chelsea. De Bruyne se lesionó a la media hora y las pesadillas de aquella final volvían a la mente de los silenciosos aficionados que se habían desplazado a Estambul.
Inzaghi ha hecho un milagro con el Inter. Jugadores veteranos como Dzeko, Lukaku, Brozovic o Lautaro supieron jugar a ese fútbol que domina el Real Madrid en Europa, pero no fueron capaces de coronarse. El futuro de ese equipo no pinta bien porque la renovación será cara.
La Champions del City puede ser el final del ciclo de Guardiola, pero también del propio club que tiene pendiente una investigación para conocer de dónde sale su fortuna y por qué son capaces de vivir en pérdidas.
Al menos, dentro de los nuevos ricos del petróleo, sigue el ejemplo del Chelsea de Abramovich y no el del PSG, que sigue intentando reinar en Europa a base de grandes fichajes.
El domingo fue el turno de la final de la Champions africana con el Wydad y el Al-Ahly. En este caso, el partido de vuelta disputado en el estadio Mohamed VI de Casablanca. En la ida, los egipcios ganaron 2-1 en el estadio internacional de El Cairo.

Las gradas del estadio marroquí se volcaron con su equipo. El presidente del PSG, Nasser al-Khelaïfi acudió a la gran cita del fútbol africano y vivió el partido desde el palco.
A los 27 minutos abrió el marcador el Wydad con un gol de falta que se fue envenenando según se dirigía a la portería egipcia. El partido fue una locura de ataques descontrolados de los locales que buscaban a toda costa el segundo gol que les diera su cuarta Champions.
Pero a 12 minutos del final el Al-Ahly igualó partido con un gol de cabeza del central Abdelmonem y que hizo callar a la bulliciosa grada. Desde ese momento el partido se enfangó con peleas constantes que les costaron a los visitantes hasta tres amarillas por conductas antideportivas.

El Al-Ahly llega a las 11 Champions de África en un partido que le sirvió de revancha por la derrota del año pasado ante los marroquíes. Los egipcios jugarán el próximo Mundial de Clubes junto al Manchester City, el León mexicano, el Urawa Red Diamonds de Japón, el Auckland City neozelandés y el Al-Ittihad, campeón de Arabia Saudí, país anfitrión del torneo. Faltará el campeón de la Libertadores.