El mafioso turco vuelve a arremeter contra el Gobierno de Erdogan

El mafioso más famoso de Turquía, Sedat Peker, ha vuelto a acusar al Gobierno de Recep Tayyip Erdogan de vinculaciones con la mafia, así como de sobornos y actuaciones poco lícitas por parte de la élite política de Turquía. El pasado mes de mayo, Sedat Peker publicaba varios vídeos en los que involucraba a algunos diputados del AKP, partido de Erdogan, dentro de su red criminal, según informó el medio Arab News.
Peker fue declarado culpable en 2007 de dirigir una organización delictiva, robo y falsificación, entre otros cargos. La justicia del país lo condenó a 14 años de prisión, pero fue absuelto en 2014. A principios de 2021 fue arrestado de nuevo en Macedonia del Norte con pasaporte falso, y posteriormente deportado a Kosovo. Actualmente se cree que vive en Dubái, según medios como Arab News o BBC Turquía.

El capo turco ha acusado al exministro del Interior, Mehmet Agar, y a su hijo, el diputado del AKP Tolga Agar, de estar involucrados en la muerte de una periodista kazaja de 21 años, Yedana Kaharman. Tal y como informa Arab News, el caso de Kaharman se cerró de forma temprana por orden de los fiscales locales. En sus vídeos, Peker también ha acusado al actual ministro del Interior, Suleyman Soylu, de conductas corruptas. El ministro ha respondido a las declaraciones de Peker instándole a que vuelva a su país a “someterse a la justicia”. Soylu también lo ha calificado de “escoria mafiosa” y lo acusa de huir “como una rata”. Cemil Cicek, exministro de Justicia y actual miembro de la junta superior de la Presidencia turca ha exigido investigar las declaraciones de Peker. Cicek ha pedido a la Fiscalía “hacer lo que sea necesario”.
Como consecuencia de estas polémicas declaraciones, la Fiscalía de Ankara emitió una orden de arresto contra Sedat Peker. A finales del mes de mayo, el ministro del interior, Suleyman Soylu, presentó una denuncia penal contra Peker. El presidente Erdogan respaldó al ministro de Interior, que prometió juzgar a Peker y se comprometió en la lucha contra el crimen organizado. Insistió en que no permitirá que los jefes de la mafia amenacen “la atmósfera de paz y seguridad del país”. Tras dos meses sin tener noticias del mafioso turco, el pasado mes de julio, Peker volvía a la carga diciendo que el AKP, partido de Erdogan, se ha estado armando de forma secreta tras el golpe de Estado fallido que se llevó a cabo en julio del año 2016, lanzando así una nueva daga contra el cada vez más débil Gobierno de Turquía.

Sedat Peker, según ha relatado él mismo, contaba con un trato de favor por parte de ciertos miembros del AKP, pero, aparentemente fue expulsado como resultado de las luchas internas de poder en las filas del Gobierno. Su lucha contra el partido de Erdogan tras apartarle es férrea y ha acusado al ministro del Interior Suleyman Soylu de “coordinar” la distribución de armas no registradas en el Estado. El mafioso describió con amplio detalle cómo supuestamente se llevó una caja de rifles AK-47 de Esenyurt, un distrito periférico de Estambul, al barrio de Balat en el antiguo corazón de la ciudad en agosto de 2016.
El capo turco, no satisfecho con todas las acusaciones vertidas hacia el Gobierno de Erdogan, ha vuelto a servirse de las redes sociales para arremeter contra el círculo más cercano al presidente turco. Peker ha acusado al ex diputado del Partido AKP, Burhan Kuzu, de tener fuertes vínculos con el narcotraficante iraní, Naci Serifi Zindasti. El mafioso turco ha asegurado que Zindasti fue liberado en un caso de asesinato abierto en su contra gracias a la intervención de Kuzu. Asimismo, Peker volvió a atacar al ministro del interior turco a quien ha acusado de liberar al supuesto culpable de un asesinato machista gracias a las buenas relaciones que mantenía con el padre de éste.

El jefe de la mafia ha afirmado que Umitcan Uygun, principal sospechoso del asesinato de Aleyna Cakir el pasado año, "no fue arrestado a pesar de las abrumadoras evidencias que lo vinculaban con el asesinato" porque su padre, Durak Uygun, es un amigo cercano de Soylu. Según ha hecho público Peker, el informe forense sobre la muerte de Cakir se preparó para evitar que Umitcan Uygun fuese arrestado. Peker también insistió en algunas de las acusaciones anteriores sobre Yeldana Kaharman, una mujer kazaja de 21 años que se cree que fue asesinada por el diputado del Partido Justicia y Desarrollo (AKP), Tolga Agar, y que su informe forense también habría sido “amañado” para no acusar al político.