Marruecos asciende al quinto puesto mundial en industria de aviación y lidera África

En las últimas dos décadas, Marruecos ha alcanzado una mejora significativa en el sector de la aviación y como resultado ha podido reforzar su ambición de ensamblar un avión completo dentro de sus fronteras, convirtiéndose en el mayor exportador de equipos aéreos de África.
Todo esto gracias a su habilidad para producir más de 40 componentes clave de aeronaves, además de piezas sensibles fabricadas en solo cinco países del mundo.
La directora de Aviación, Ferrocarriles, Industrias Navales y Energías Renovables del Ministerio de Industria y Comercio de Marruecos, Afaf Saïdi, declaró que su país está posicionado como el principal fabricante de equipos de aviación y repuestos de África, ocupando el quinto lugar a nivel mundial entre los países más activos en el sector de la aviación. Saïdi mencionó ante la Agencia Marroquí de Noticias que este logro había sido posible “después de solo veinte años de lanzar su primera iniciativa en este sector", resaltando la capacidad de adaptación de Marruecos al impulso del mercado global.
La directora de Aviación también señaló el sólido desarrollo económico del sector, con un crecimiento de más del 3,8 % durante 2023. Asimismo, el valor de sus exportaciones alcanzó los 21.864 millones de dirhams (dólar= 10 dirhams) hasta el octubre pasado, lo que significa un aumento anual del 17,3 %. En consecuencia, actualmente el sector ofrece más de 23.000 puestos de trabajo con una tasa de integración local del 42 %, un verdadero éxito teniendo en cuenta los desafíos económicos que el mundo ha presenciado estos últimos años. Sobre esto, el ministro de Industria, Ryad Mezzour, anunció en julio que Marruecos tiene como objetivo duplicar el empleo del sector para 2030.
Este año ha sido clave para fortalecer avances en la industria aeronáutica del reino marroquí, siendo uno de estos la acogida del Salón Aeronáutico de Marruecos 2024 en Marrakech, lo que a su vez ha facilitado nuevas asociaciones estratégicas con gigantes de la industria como Boeing, Airbus y Bombardier, que han establecido fábricas y centros de ingeniería en el país. Mientras que Rabat se mantiene centrado en seguirle el ritmo a las transformaciones tecnológicas a través del desarrollo de la investigación y la innovación para así poder mejorar su competitividad internacional.

Los logros de Marruecos se ven reflejados en la confianza existente en el entorno de inversión; tan solo en el mes de octubre, el grupo español Asiture, especializado en la fabricación de aeroestructuras y piezas de motor, abrió una nueva planta de fabricación en la zona industrial “Midparc” de Nouaceur con el fin de crear una instalación dedicada especialmente a la fabricación de palas de motor, convirtiéndose en una inversión de más de 30 millones de dirhams. Por su parte, el puerto de Tánger Med ha desempeñado un papel fundamental en el apoyo al crecimiento del sector a través de las operaciones de exportación.
Otro hito importante fue la apertura de la planta de fabricación de motores de avión del Grupo Safran en Casablanca, cuyo valor estima ser de 300 millones de dólares, con esta nueva inversión se busca crear cientos de puestos de trabajo y acelerar el traspaso de la tecnología avanzada.
Respecto al crecimiento económico del sector, el economista marroquí Idris Al-Fina, ha comentado: “En las últimas dos décadas, Marruecos ha sido testigo de un notable dinamismo en muchos sectores estratégicos, incluido el sector aeroespacial, uno de los puntos fuertes de Marruecos, que no tenía una presencia real antes de 2010, y hoy es la segunda mayor fuente de divisas del país, atrayendo a más de 140 empresas internacionales que trabajan en este sector, contribuyendo con aproximadamente 2.500 millones de dirhams anuales al Producto Interior Bruto", destacando que estos logros fueron gracias al arduo esfuerzo por mejorar el clima de inversión.

Es así como Marruecos ha sido capaz de construir un cimiento sólido en la fabricación de piezas de motores, materiales compuestos y conexiones de cableado, así como la instalación de piezas de estructuras de aviones, reforzando el atractivo del país como destino de inversión preferido.
También se ha visto un aumento significativo del 18 % en las exportaciones del sector, en comparación al año anterior, alcanzando los 10.700 millones de dirhams durante los primeros cinco meses de 2024. A su vez, el sector ha contado con el apoyo de alianzas estratégicas con compañías internacionales, como SABCA Marruecos, que inauguró una nueva planta de ensamblaje de estructuras aeronáuticas, y Gal Aerospace, que se dedica al desarrollo de componentes para cabinas de aviones.

Según Afaf Saïdi, una de las metas propuestas es poder fabricar un avión integrado para 2030 mediante la ampliación de las actividades del sector, el refuerzo de la colaboración con socios internacionales y la creación de soluciones innovadoras y ecológicas para reducir las emisiones de dióxido de carbono.
Aunque las exportaciones del sector siguen representando un porcentaje pequeño en comparación con industrias clave como la automotriz, el crecimiento constante muestra una dinámica prometedora que posiciona a Marruecos como un candidato para destacar en la industria aeroespacial y, con el tiempo, posiblemente, en el espacio.