Tras la vuelta a las calles de la Policía de la Moral en Irán la semana pasada, el Gobierno sigue atacando cualquier violación del código de vestimenta impuesto por el régimen de los ayatolás

El código de vestimenta sigue acechando a la sociedad iraní

En esta foto de archivo tomada el 23 de julio de 2007, una mujer policía iraní observa desde la parte trasera de un vehículo policial antes del comienzo de una campaña para hacer cumplir el código de vestimenta islámico en la capital, Teherán
AFP/BEHROUZ MEHRI
AFP/BEHROUZ MEHRI - Una mujer policía iraní observa desde la parte trasera de un vehículo policial antes del comienzo de una campaña para hacer cumplir el código de vestimenta islámico en la capital, Teherán

Una de las oficinas de la empresa de comercio electrónico más grande de Irán, Digikala, ha sido cerrada por las autoridades iraníes tras la publicación de imágenes de mujeres sin el hiyab, según informa el medio Arab News. Estas empleadas, según informes, formaban parte de una reunión corporativa en la que se realizaron fotos, y en las cuales aparecía sin el hiyab mandatorio.

La empresa Digikala, con más de 40 millones de usuarios activos mensuales, sirve como sustituto para los ciudadanos iraníes de servicios como Amazon, que no opera en las fronteras persas debido a las sanciones internacionales. Aunque sus operaciones digitales siguen en pie, una de sus oficinas establecidas en Teherán ha sido cerrada por las autoridades iraníes.

El sitio web del poder judicial de Irán dijo que se habían presentado casos judiciales en relación con la publicación de estas fotos, sin dar más detalles, informa Arab News.

PHOTO/FILE – Ayatolá Ali Jamenei
PHOTO/FILE – Ayatolá Ali Jamenei

Tras la muerte de la joven de 22 años Mahsa Amini bajo custodia policial al ser detenida por no cumplir con estos códigos de vestimenta, miles de personas salieron a las calles en protesta por este suceso. Después de semanas de manifestaciones, en las que se estiman la detención de 20.000 personas y la muerte de otras 500, el fiscal general anunció en diciembre la disolución de la Policía de la Moral, sin embargo, en estos últimos meses se han observado a las furgonetas de este organismo patrullando las calles iraníes en búsqueda de cualquier violación del código de vestimenta. La semana pasada, tras un comunicado del portavoz del organismo policial de Irán, anunciaba el reinicio oficial de “las patrullas a pie y en vehículos en todo el país”. Las personas que son detenidas por este incumplimiento del código de vestimenta son llevadas a “centros de reeducación”.

La Policía de la Moral, también conocida como “Gasht-e-Ershad” (Patrulla de Orientación), forma parte de la Policía Nacional bajo control del Ministerio del Interior y con influencia del Líder Supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei.

El Gobierno y Parlamento de Irán buscan también aprobar una nueva legislación que intensifique y endurezca estas normas de vestimenta, en específico las relacionadas con el control del hiyab.