Alex Erquicia
Pie de foto: Una lancha iraní patrulla aguas cercanas al puerto de Bandar Abas, en una imagen de 2012. AFP PHOTO/ATTA KENARE
El estrecho de Ormuz vive nuevos episodios de tensión en la batalla de provocaciones que se ha instalado en la región. Los continuos ataques, acusaciones y negaciones son el status quo actual en el golfo Pérsico que observa como Estados Unidos e Irán utilizan la misma ofensiva: lanzar ataques a navíos y drones en la zona poniendo las aguas y los cielos en una tensión constante. EEUU ha anunciado que enviará nuevas tropas a la zona mientras la comunidad internacional no quita el ojo encima del estratégico estrecho por la preocupación que causa la seguridad del tránsito de crudo por Ormuz.
Los más recientes incidentes han sido el anuncio iraní de la interceptación de "un petrolero extranjero" acusándolo de "contrabando de carburante". La Guardia Revolucionaria, que no ha identificado la nacionalidad del navío, abordó el petrolero por la fuerza, cuando transportaba un millón de litros de combustible.
Por su parte, EEUU acusa a Irán de haber derribado un avión no tripulado en aguas internacionales. Un proyectil disparado desde un buque de asalto anfibio estadounidense Boxer en aguas del estrecho de Ormuz abatió el dron iraní cuando este se acercó dentro de un rango amenazante, dijo el Pentágono. "Esta es la última de las muchas acciones provocativas y hostiles por parte de Irán contra buques que navegan en aguas internacionales", aseguró el presidente Donald Trump.
Pie de foto: Cronología de los recientes eventos e incidentes en la escalada de tensión entre Irán y Estados Unidos. AFP/AFP
El ministerio de Exteriores iraní niega que este hecho sucediera, alegando que las Fuerzas Armadas no perdieron un avión no tripulado en el estrecho de Ormuz. "No hemos perdido ningún avión no tripulado en el estrecho de Ormuz ni en ningún otro lugar. ¡Me preocupa que el USS Boxer haya derribado sus propios aviones no tripulados por error!", dijo en Twitter el viceministro de Exteriores, Abas Araqchí. Irán asegura que su misión es "legítima" y que protegen la seguridad en el golfo Pérsico.
El derribo en junio de un dron estadounidense, según Teherán porque violó su espacio aéreo, está muy reciente y es la única acción que Irán admite haber realizado. Washington niega que entrara en territorio iraní y durante esos días Trump llegó a aprobar un ataque selectivo contra Irán, aunque se suspendió la orden poco antes de que el Pentágono la ejecutase al considerar que no habría sido una respuesta "proporcionada" al derribo del dron.
Mientras tanto, el departamento de Defensa de Estados Unidos está preparando el envío de 500 soldados a la base aérea Príncipe Sultán, en Arabia Saudí, para reforzar su presencia militar en la región ante la escalada de tensión con Teherán, según informaron medios estadounidenses. Este posible despliegue, que fue desvelado por la cadena de televisión CNN, se produciría después de que el presidente estadounidense anunciara el pasado mes de mayo el envío de 1.500 soldados a la región como medida "de protección" para las fuerzas estadounidenses del Comando Central (Centcom) desplegadas en la zona.
Pie de foto: Un avión teledirigido Saegheh, que puede ser equipado con cuatro bombas, en Irán, en una foto sin fecha. AGENCIA DE NOTICIAS TASNIM via REUTERS
La creciente tensión entre ambos países ha llevado a Washington a buscar crear una coalición internacional para velar por la seguridad de los buques que naveguen por los estrechos de Ormuz y de Bab el-Mandeb. Se trataría de una fuerza de protección marítima internacional en los confines del golfo Pérsico para los que, en un principio, cuenta con el apoyo, directo o indirecto, de los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí.
Desde el 5 de mayo, el Pentágono ha reforzado su presencia militar en la zona con el envío del portaaviones USS Abraham Lincoln, el buque de asalto anfibio USS Arlington, un sistema de misiles Patriot y cuatro aviones bombarderos B-52 con capacidad nuclear. España retiró la fragata Méndez Núñez del grupo de combate encabezado por el portaaviones USS Abraham Lincoln por la escalada de tensión en entre EEUU e Irán.
Otro campo de batalla entre ambos países es Twitter. El ministro de exteriores iraní, Javad Zarif, de visita en Nueva York, publicó un tuit en el que venía a acusar a Trump de injerencias en la región. Se trata de un mapa que muestra la posición exacta de Irán, de EEUU y de Ormuz, acompañada de un escueto "Recordatorio" de que el estrecho de Ormuz se encuentra en su frontera y no cerca de EEUU. Además defendió que ningún avión no tripulado suyo hubiera sido derribado por parte estadounidense. Por su parte, Trump hizo el anuncio "de la acción defensiva contra un dron iraní", según dijo en la red social.
Pie de foto: El ministro de Exteriores de Irán, Javad Zarif, se dirige al Foro Político de Alto Nivel sobre Desarrollo Sostenible, en la sede de las Naciones Unidas, el 17 de julio de 2019. AP PHOTO/RICHARD DREW
Mientras tanto, el Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, por sus siglas en inglés), el acuerdo nuclear iraní, el asunto espinoso y detonante de la escalada de las últimas semanas, sigue su curso. Irán y la Unión Europea están intentando salvarla. Irán dijo esta semana que negociará volver a sus compromisos con el acuerdo nuclear si EEUU levanta sus sanciones.
Trump también juega la carta de tener buenas intenciones y buscar un compromiso entre los dos países y reiteró su voluntad de negociar con los iraníes para rebajar las tensiones. "Todo lo que queremos es tener un acuerdo justo" con Irán, dijo el mandatario.
Las dinámicas de los últimos tiempos han sido los sabotajes y ataques a petroleros y busques cisterna, de los que EEUU ha responsabilizado a Irán, creando un estado de acusaciones entre ambos países que calienta los ánimos en las administraciones estadounidenses e iraníes por igual. El país iraní y Reino Unido tensaron su relación la semana pasada por otro incidente en el golfo Pérsico.
El nerviosismo es tal que un paso mal dado puede desencadenar un conflicto que ambos bandos parecen buscar y evitar a la vez. La importancia del estrecho de Ormuz, por el que cruza una gran parte del crudo mundial, es evidente. Con la amenaza del Gobierno de Irán de bloquear el estratégico estrecho, las maniobras y presencia del Ejército de EEUU en la zona hace que la tensión ya no solo escale, sino que esté asentada en Ormuz.