El G20 enfoca la cumbre virtual de Riad en la recuperación económica sostenible

Los líderes de los países miembros de grupo de los 20 comenzaron ayer su cumbre anual de dos días, que se celebra de forma telemática por la pandemia del coronavirus, con el objetivo de consensuar medidas para encarrilar la recuperación económica y con la promesa de que esta sea justa y sostenible.
“Tenemos el deber de afrontar el desafío juntos durante esta cumbre y dar un fuerte mensaje de esperanza y de tranquilidad adoptando medidas para mitigar esta crisis”, afirmó desde Riad del rey Salman bin Abdulaziz de Arabia Saudí, país organizador del evento al ejercer la presidencia rotativa del grupo.
Durante los dos días que dura esta cita los países miembros del Grupo de los 20 están discutiendo medidas con el objetivo de impulsar una recuperación económica, que tanto la presidencia saudí de turno como varios de los países participantes se han propuesto que sea “inclusiva y sostenible”.
Uno de los temas que ha protagonizado el encuentro, como lo fue en la cumbre extraordinaria de líderes del G20 que tuvo lugar en marzo, es cómo hacer accesible la vacuna contra la COVID-19 para los países menos desarrollados.
“Debemos trabajar para crear las condiciones para un acceso asequible y equitativo para todo el mundo”, aseguró Salman, que agregó que al mismo tiempo hay que empezar a desarrollar estrategias para estar preparados “para futuras pandemias”.

El ministro de Inversión de Arabia Saudí, Jalid al Falih, indicó en un evento previo al inicio de la cumbre que la suspensión de la deuda a los países menos desarrollados acordada por el G20 ha alcanzado hasta ahora los 40.000 millones de dólares y ha beneficiado a 73 países.
Sin embargo, tanto la ONU y como la Unión Europea afirmaron antes de la cumbre que la suspensión de la deuda, que de momento se extiende hasta mediados de 2021, no era suficiente y anunciaron que pedirían más recursos al G20 para financiar el acceso a vacunas para esas naciones.
También el presidente de Gobierno español, Pedro Sánchez, que acude como invitado a la cumbre, se ha unido a este reclamó y pedirá a los líderes del G20 el acceso universal a las vacunas contra el coronavirus, según informó la Moncloa.
Los prolegómenos de la cumbre han estado marcados además por los llamamientos a una mayor cooperación internacional y a la vuelta al multilateralismo después de que el año pasado el presidente estadounidense, Donald Trump, rompiera el consenso negándose a aceptar el Pacto de París contra el cambio climático.
El inminente recambio en la Casa Blanca, tras la victoria en las pasadas elecciones del demócrata Joe Bien, ha despertado las expectativas en este sentido y aunque está será la cumbre de la despedida Trump, algunos miembros del grupo ya han apreciado una postura menos confrontacional del norteamericano.

“Solo uniendo nuestras fuerzas y trabajando juntos como podremos derrotar al coronavirus y salir más fuertes de esta crisis”, aseguró en un mensaje grabado el primer ministro británico, Boris Jonson.
Igualmente, el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, apeló a “la cooperación dentro el G20”, asegurando que es clave para superar la pandemia de covid-19 y retomar el camino de la recuperación social y económica”.
El líder sudamericano, sin embargo, volvió a poner a la par los riesgos sanitarios y los económicos del coronavirus y apeló a “trabajar hacia el crecimiento económico, la libertad de la gente y la prosperidad del mundo”.
Pese a que la máxima prioridad para el G20 en este año sigue siendo la lucha contra la COVID-19, varios de los participantes recordaron la importancia de la lucha contra el cambio climático al secundar el objetivo marcado por la presidencia saudí de buscar una recuperación “sostenible”.
“Necesitamos crear las condiciones para una economía más sostenible”, declaró en su mensaje inaugural el rey Salman.
La crisis sanitaria y económica ha ensombrecido algunos de los temas que había elegido la presidencia saudí para la agenda del G20 de este año.
Entre otros puntos, se había propuesto centrar su presidencia en la innovación tecnológica, la protección del planeta y la creación de oportunidades, particularmente para jóvenes y mujeres, pese a que el país árabe mantiene encarceladas a varias activistas por los derechos de la mujer, como se han encargado de recordarle varias ONG.
El G20 está integrado por Alemania, Arabia Saudí, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, la India, Indonesia, Italia, Japón, México, el Reino Unido, Rusia, Sudáfrica, Turquía y la Unión Europea.
Además de España, país invitado permanente, Suiza, Jordania y Singapur han sido invitados también a participar este año.

El rey de Arabia Saudí, Salman bin Abdelaziz, pidió hoy desde la presidencia de turno del G20 que estos países se comprometan a una economía circular del carbono como principal motor para la recuperación económica tras la crisis causada por la pandemia.
"Los países serán capaces de adoptar tecnologías que sean compatibles para la transición energética de acuerdo con los pilares del programa de la economía circular del carbono, que son reducción de emisiones, reutilizar, reciclar y eliminar", dijo el monarca en un debate sobre la salvaguarda del planeta que se celebra en el marco de la cumbre del G20 este fin de semana.
El rey Salman afirmó que Riad ha lanzado este domingo oficialmente el programa nacional de economía circular de carbono y llamó a los demás países a "trabajar con nosotros para conseguir los objetivos de este programa mientras continuamos desarrollando la economía".
Asimismo, indicó que Arabia Saudí cuenta con diversas iniciativas para reducir las emisiones de carbono y transformar las fuentes de energía en renovables. En ese sentido, auguró que para 2030 el 50 % de la electricidad vendrá de la energía solar y eólica en Arabia Saudí.
Además, aseveró que actualmente se está desarrollando "el campo de hidrógeno verde más grande" del mundo en el marco del megaproyecto NEOM, una ciudad ultra tecnológica y moderna que Arabia Saudí está levantando en el desierto en el norte del reino, junto a la frontera con Jordania y frente a las costas egipcias.
Los países del G20 están fomentando las energías sostenibles como futuro y pilar de recuperación económica tras la grave crisis causada por la COVID-19.