Turquía está construyendo su propia versión del Pentágono estadounidense, un centro que será la sede del Ministerio de Defensa, el Estado Mayor y de las diferentes ramas de las Fuerzas Armadas turcas, según informa la agencia Anadolu. El complejo, oficialmente denominado “Creciente y Estrella” (los símbolos de la bandera nacional turca), se ubicará el distrito Etimesgut de la capital y albergará unos 15.000 trabajadores. Tendrá una extensión de aproximadamente 12,6 kilómetros cuadrados y la edificación tendrá una superficie de 890.000 metros cuadrados, frente a los 603.000 que tiene la sede del Departamento de Defensa de Estados Unidos.
Tal y como informó Recep Tayyip Erdogan, el proyecto contará con tecnología avanzada, que será respetuosa con el medio ambiente. El presidente turco aprovechó un discurso durante el Día de la Victoria para anunciar que la obra ya está llevándose a cabo y que se inaugurará el 19 de mayo de 2023, un mes antes de las elecciones presidenciales. Asimismo, advirtió que este complejo “infundirá miedo” en los enemigos de Turquía y “dará confianza” a sus aliados. Como señala el medio Daily Sabah, un gigantesco edificio en forma de estrella será la entrada a la sede de las Fuerzas Armadas, mientras que la otra gran estructura en forma de media luna estará destinada a las ceremonias oficiales.
La empresa de construcción Rönesans Holding participará en la construcción de este megaproyecto. La compañía turca, que trabaja en Oriente Medio y el Norte de África, ya fue la encargada de edificar el palacio presidencial en Bestepe y la sedes de la Organización Nacional de Inteligencia turca (MIT) en Ankara y Estambul.
‘Creciente y Estrella’ es uno de los últimos planes de Erdogan para aumentar su popularidad antes de las elecciones de 2023. Dentro de la agenda política del actual presidente el aumento de poder militar de Turquía es una de las prioridades. A través de la empresa FNSS Defense Systems, Ankara está lanzando sus propias armas y equipos de guerra, como el vehículo blindado de tracción Pars IV, presentado el pasado mes de agosto.
En el plano internacional, Turquía también exhibe su capacidad militar con acciones ofensivas en el norte de Siria. Por otra parte, en el Mediterráneo oriental, Ankara movilizó el buque Oruç Reis durante la disputa con Grecia. Actualmente, Turquía también aspira a ganar influencia en Afganistán negociando con los talibanes. Mientras tanto, la situación económica de Turquía es desfavorable debido a una alta inflación que alcanzó el 12,3% en 2020. También cabe destacar la fuerte caída que ha sufrido la lira turca frente al euro y al dólar en los últimos años.
